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Programa del Frente Amplio: comunistas proponen "participación directa del Estado" en "lugares clave" de las cadenas económicas en manos de "grandes capitales"
El Frente Amplio distribuyó su borrador del programa de gobierno de cara al Congreso de diciembre y los sectores se movilizan en la interna para marcar su impronta en una eventual administración de izquierda en 2025. El Partido Comunista, el espacio con más peso en la orgánica, comenzó a hacer circular entre sus dirigentes un documento con aportes al programa frenteamplista a modo de "guía" para marcar dónde estarán sus énfasis.
Más bien basado en una "línea general" y no en menciones explícitas al texto del Frente Amplio, las "prioridades" comunistas adelantan determinadas posturas ideológicas, que marcan perfil respecto a otros espacios de la izquierda, en pos de "un salto cualitativo en la superación de los límites estructurales" enfrentados durante 15 años de gobierno.
Un primer punto del documento interno –al que accedió El Observador– refiere a la "transformación de la matriz productiva", con una propuesta que no incluye el resto del Frente Amplio en su programa. El partido habla de "un papel central" de las empresas públicas, "pero no limitándose a ellas".
"Será necesaria la participación directa del Estado mediante asociaciones estratégicas con el capital privado y/o los trabajadores en lugares claves de las principales cadenas económicas, que hoy están en manos de grandes capitales (en general transnacionales)", afirman los comunistas de cara a la discusión en la interna.
También sostiene que el "único objetivo" de los grandes privados "es la acumulación mediante la apropiación del grueso del trabajo social". Consultado por El Observador, el secretario general del partido, Juan Castillo, señaló que "objetivamente ha quedado claro" que los comunistas son "críticos en que parece que todo lo que sea el Estado sea mala palabra y que no siendo una inversión directa privada haya un alejamiento del Estado en determinadas áreas clave".
A modo de ejemplo, los comunistas propusieron en 2011 –a través del exsenador Eduardo Lorier– un proyecto de ley para fundar un "frigorífico nacional", y el entonces presidente José Mujica llegó a prometerles una comisión para estudiarlo, aunque la iniciativa nunca prosperó.
Los comunistas también apuntan a un marcado énfasis hacia la reducción de la jornada laboral, una disposición que el borrador de programa frenteamplista menciona solo en una línea comprometiéndose a "estudiarla". El partido la menciona como una segunda prioridad a aportar en el debate dentro de la izquierda, sin que por ello haya "pérdida de salario".
"La reducción de la jornada de trabajo tiene un claro impacto redistributivo y puede traer resultados favorables a nivel macroeconómico como la disminución del desempleo", remarcan. El presidente del PIT-CNT, Marcelo Abdala, defendió la iniciativa y apostó a que sea "la ley laboral más importante de este siglo XXI”, al tiempo que el MPP –con el respaldo de la bancada frentista– impulsó esa iniciativa en el Senado.
En materia de vivienda reconocen que es un tema "muy sentido" por la población uruguaya: "(...) y tenemos que reconocer que, tras 15 años de gobiernos progresistas, más allá de los avances conseguidos, estuvimos lejos de resolverlo". "Debe ser una prioridad garantizar el acceso a la vivienda de miles de uruguayas y uruguayos que hoy no lo tienen", anuncian.
El Partido Comunista incluye también entre sus prioridades una "educación democrática y democratizadora", el "combate a la pobreza" y la salud.
Otro punto en el que marcan perfil es en la seguridad social, bajo la afirmación de que "el modelo de las AFAP ha fracasado". "En lugar de incrementar las jubilaciones de nuestra gente, solamente hizo aumentar las ganancias del capital financiero. Debemos plantearnos ir hacia la eliminación del lucro privado en la seguridad social, ya que esta es un derecho y no una mercancía", aseguran en una línea que no comparten ni el MPP ni la Convocatoria Seregnista-Progresistas.
El texto, fechado a agosto, no contempla aún el escenario de enmienda constitucional impulsado por el PIT-CNT.
Otra de las novedades es la posibilidad de considerar "instrumentos como una renta que reconozca el valor del trabajo reproductivo en los hogares", de modo de "posibilitar la independencia económica de las mujeres".
En otro orden, los comunistas aseguran que "el capitalismo no es únicamente un sistema económico", sino "un sistema de valores que conforman una ideología que lo naturaliza como 'sentido común'" y que establece "un predominio absoluto de lo individual por sobre lo colectivo". "Debemos colocar como tarea central de nuestra acción política dar la batalla cultural o ideológica para construir una sociedad basada en principios de solidaridad", sostienen.
Añade también que "el punitivismo ha fracasado" y "conducido a una sociedad con más violencia y más presos, sin solucionar los problemas de la inseguridad y el delito", debiendo priorizarse "la prevención y jerarquización de los espacios de fortalecimiento de la convivencia, más que en la represión, que, por supuesto es una parte del combate al delito".
"Los mayores castigos se deben concentrar en los grandes delincuentes: no puede seguir pasando que un gran narcotraficante que vive en un barrio privado tiene una pena inferior a la de una mujer que ingresa unos gramos de droga en una cárcel", cuestionan.
