Conciliadores y combativos: las diferentes actitudes del FA por el coronavirus

La polémica por las tarifas públicas primero, pero más especialmente la crisis desatada por el coronavirus, generaron reacciones dispares desde la izquierda y dieron pistas acerca de los perfiles que asumirán sus principales dirigentes en estos años.

Más allá de la palabra de líderes históricos como Tabaré Vázquez –quien planteó que “una cuarentena total" era un camino "inevitable" para "cortar este círculo vicioso"– y de José Mujica –que llamó a no "desgarrarse" en peleas partidarias–, estos días también han servido para que otras figuras de mayor renovación hagan valer sus armas y opiniones.

Yamandú Orsi, Daniel Martínez, Pablo Ferreri, Cristina Lustemberg y Álvaro García fueron de los que asumieron la actitud más conciliadora con el gobierno. Dirigentes como Carolina Cosse, Óscar Andrade, Alejandro Sánchez asumieron una postura más crítica de algunas decisiones –aunque con matices en el tono–, mientras que otros legisladores cargaron todas sus balas contra la administración de Lacalle. 

Yamandú Orsi, exintendente y candidato a la reelección en ese departamento, es quizá el mayor abanderado de la estrategia conciliadora. A través de sus redes sociales y declaraciones públicas, el dirigente del MPP –que asoma como una importante carta de la izquierda para 2024– ha enfatizado desde hace tiempo la necesidad de buscar acercamientos con otras tiendas políticas y abrir las puertas del Frente Amplio a la sociedad. 

Mientras varios en la izquierda pedían abiertamente al gobierno que decretara la cuarentena general, Orsi llamó a "reforzar la actitud voluntaria" y hacer "lo imposible" por quedarse en casa. "Sé que lo mejor de nosotros aparece. Insistamos desde todas las filas. Sumémonos todos", escribió.

Este lunes destacó el encuentro entre el presidente del Frente Amplio, Javier Miranda, y el secretario de la Presidencia Álvaro Delgado. "Gracias Javier y Álvaro por la señal. Es clave para seguir caminando, aun con nuestras diferencias. No es la primera vez que la política se abre paso en la cerrazón", señaló Orsi.

El excandidato presidencial Daniel Martínez ha mantenido un perfil más bajo que Orsi pero, al igual que el dirigente canario, también ha evitado caer en cuestionamientos y críticas directas al gobierno. En cambio, Martínez llamó a apoyar los emprendimientos solidarios que han surgido en estos días y se limitó a pedir un gran "acuerdo nacional", en línea con el reclamo del Frente Amplio.

Quien sí ha encarado decididamente la estrategia de conciliación con el gobierno es el candidato a suplente de Martínez en la Intendencia de Montevideo, Pablo Ferreri. El exsubsecretario de Economía fue uno de los pocos frenteamplistas en señalar públicamente que las tarifas públicas debían aumentar –pese a cuestionar el discurso "contradictorio" del actual gobierno– y fue de los primeros en defender las medidas económicas adoptadas por la administración de Luis Lacalle Pou ante la emergencia social y sanitaria. 

"En 48 horas se anunciaron medidas económicas que van en la línea correcta, esto es dinámico y se deberá evaluar día a día si son suficientes o deben complementarse", escribió en Twitter el sábado, luego de que el Poder Ejecutivo informara la apertura de líneas de crédito flexibles, préstamos para pequeñas y medianas empresas, aplazamiento de vencimientos de pago de DGI y BPS y extensiones del régimen de seguro de paro flexible para todos los sectores de actividad. "Respaldo lo anunciado. Poner el hombro para pensar medidas complementarias y para el día después debe ser nuestro aporte", añadió. 

Otros exintegrantes del equipo económico –como Christian Daude, Santiago Soto y Martín Vallcorba– se expresaron en términos similares.

El exdirector de OPP Álvaro García y líder del sector Plataforma también actuó en línea con Ferreri. "Soy de la oposición, sí, pero soy uruguayo antes de todo y es momento de estar apoyando una salida país para esta situación. Quienes estuvimos en situaciones difíciles en cargos de gobierno también quisimos tener esos respaldos y estamos dispuestos a colaborar", aseguró. Eso no impidió que García polemizara con la postura de sucesor Isaac Alfie en el manejo de las cifras sobre empresas públicas.

La diputada Cristina Lustemberg (PAR), socia política de García, también se plegó a esa línea discursiva. La exsubsecretaria de Salud pidió públicamente "trabajar en conjunto dejando lo partidario a un lado" y destacó que la crisis sanitaria "no tiene precedentes" en el corto plazo. "Hay que tratar de sumar y no andar reclamándonos", dijo días atrás a El Observador.

Cargos: Pablo Caggiani al Ineed y Francolino al Brou

Entre la crítica y el entendimiento

El equilibrio entre la postura conciliadora y la crítica es siempre una línea delgada, más en tiempos de crisis como la que atraviesa el país y el mundo. El diputado Alejandro Sánchez, a su modo, y los senadores Óscar Andrade y Carolina Cosse han caminado por esa cuerda en estos días en los que han llamado al diálogo y a los acuerdos, al tiempo que le han reclamado mayor acción al gobierno. 

El jueves pasado, Sánchez (MPP) cuestionó que el equipo económico no había anunciado medidas para paliar la crisis generada por la parálisis de la actividad. "Queda mucha gente sin atender, ¡no se le puede dar la espalda a los que necesitan que el estado sea su escudo!", escribió en Twitter. Horas más tarde, cuando el Ejecutivo anunció el paquete de acciones, el legislador dijo que a su juicio se quedaban "cortas".

"Todavía queda mucha gente por fuera", opinó a través de un vivo en Facebook. Sánchez, que asumió como suplente de José Mujica en el Senado, insistió en que "ahora no importa lo que se votó en octubre y noviembre" y rechazó las movidas en redes como el #YoNoLosVoté. "Mucha gente votó a un gobierno porque creyó en sus propuestas o se dejó embaucar con algunas ilusiones, pero eso no los hace mas o menos malos; somos todos orientales y hay que intentar salir juntos, viendo cómo logramos construir alternativas para que la gente que está más jodida no la pase tan mal. Eso no quiere decir que no haya diferencias políticas: claro que las hay", argumentó. 

El senador comunista Óscar Andrade ha sido más combativo en su prédica a través de las redes, por ejemplo instando al gobierno a que defina la cuarentena general. Andrade dijo que la posición del Sindicato Médico al respecto es "contundente" y también defendió al Sindicato de la Construcción en su lucha por tener una licencia adelantada.

"¿Qué hay que esperar? ¿Una obra en cuarentena? ¿Dos, cien? ¿Contagios? Enfermos graves? O peor aún. Por tema económico no es. La mayoría de la licencia acordada iba a cargo de trabajadores y empresarios, al gobierno le salía menos que un seguro de paro. ¿Quién puede explicar? Absurdo", manifestó cuando las autoridades frenaron la firma de un acuerdo, que luego sí vería la luz.

La senadora y candidata a intendenta, Carolina Cosse, criticó al gobierno por la falta de mayores medidas para paliar la crisis económica. "El gobierno se está demorando en tomar acciones que defiendan a los más débiles. Los precios se multiplicaron varias veces, la gente está perdiendo los trabajos, no hay una decisión sobre los seguros de paro especiales, yo deseo que esto pase, deseo que reaccionen rápido. A mí no me importa la discusión, me importa la gente que está siendo afectada por la suba de los precios, porque está perdiendo el trabajo, porque si tiene que hacer cuarentena no tiene las condiciones para hacerlo”, afirmó a Caras y Caretas.

Cosse también respaldó al PIT-CNT en su reclamo al gobierno y pidió que se convoque a una "mesa nacional" para analizar la situación junto a todos los partidos, organizaciones sociales y academia. 

Por su parte, el diputado comunista Gerardo Núñez cuestionó a la administración Lacalle por no declarar aún la cuarentena total. "¿Cuánto se va a esperar para declarar la cuarentena total?¿Llegar al extremo de Italia? El sindicato médico plantea la cuarentena. Uruguay con casi 13 veces menos población que Argentina, ya tiene 135 casos, contra 158. Si no se toman medidas drásticas esto puede ser incontrolable", expresó. El legislador cuestionó el "cerco mediático" alrededor del caceroleo del domingo, y dijo que el presidente le "faltó el respeto" a los médicos al aclarar que estaba gobernando y no haciendo política.

En ese marco de críticas al gobierno, el secretario general del Partido Socialista, Gonzalo Civila, planteó su "preocupación" por que el sistema político siguiera intercambiando facturas. "Llevamos una semana de una crisis que genera angustia y miedo. Se puede dar opinión política, aportar y explicitar con firmeza acuerdos y diferencias, sin caer en una dinámica irresponsable y mezquina", escribió en Twitter. 

Un día antes, Civila había destacado el anuncio del ministro de Desarrollo, Pablo Bartol, de destinar $ 1.000 millones de pesos a alimentación y refugios. "Analizaremos las características y el plan de ejecución de esa partida, pero es una buena decisión que celebramos", expresó.