Congo: la ONU admitió que cascos azules mataron a dos personas e hirieron a catorce

Un video compartido en redes sociales muestra a varios hombres, al menos uno con uniforme de policía y otro vestido con ropas del ejército, avanzando hacia el vehículo de la ONU en el puesto de Kasindi, en el territorio de Beni. Tras un intercambio verbal, los cascos azules parecen abrir fuego, y cruzan con el vehículo la barrera con la frontera con Uganda.

El secretario general de la ONU, António Guterres, afirmó estar "indignado" y calificó al incidente como “ grave". La Monusco, el acrónimo de la Misión de la ONU para la Estabilización en la República Democrática del Congo, admitió el hecho que provocó “pérdidas humanas y heridos graves”, según la agencia AFP. Asimismo, la representante especial de la ONU en el país, Bintou Keita, se declaró “profundamente conmovida y consternada”, y reconoció que efectivos “se abrieron paso a tiros por motivos inexplicables”.

La funcionaria aseguró que los más de 60 militares implicados -cuyas identidades y nacionalidades no reveló- fueron detenidos y ya se habían iniciado gestiones para que sean procesados, según reportó la agencia Europa Press. “Se establecieron contactos con los países de origen de estos militares para que se puedan iniciar procesos judiciales de manera urgente con la participación de víctimas y testigos, para que se puedan tomar sanciones ejemplares”, sostuvo.

"Ante este comportamiento incalificable e irresponsable, los autores de los disparos fueron identificados y detenidos, a la espera de las conclusiones de la investigación, que ya comenzó en colaboración con las autoridades congoleñas", añadió. Guterres quien celebró la decisión de detener al personal involucrado, en un comunicado firmado por su vocero adjunto de la Secretaría General, Farhan Haq, ratificó “la necesidad de establecer responsabilidades” por esos hechos y confirmó “la apertura inmediata de una investigación”.

Tensión en la zona

A principios de semana, tres cascos azules y más de una decena personas murieron durante las protestas contra la misión de la ONU en varias localidades fronterizas con Uganda. Los manifestantes critican a la Monusco por su incapacidad para frenar la violencia y los ataques del centenar de grupos armados activos en el este del país africano.

El subsecretario general para operaciones de paz de la ONU, Jean-Pierre Lacroix, estuvo en el país africano el sábado para abordar la situación con las autoridades. "Se estudiarán fórmulas para que ambos podamos evitar estos incidentes, y, sobre todo, trabajar mejor conjuntamente para conseguir nuestros objetivos", dijo Lacroix.

Desde el lunes pasado, la República Democrática del Congo es escenario de múltiples protestas violentas contra la presencia de la Monusco, que lleva más de 20 años apostada en el norte del país. Los disturbios comenzaron cuando manifestantes invadieron el edificio de la Monusco en la ciudad de Goma, en la provincia Kivu del Norte, y dejaron al menos 22 muertos, protesta que luego se extendió a varias ciudades.

Presente en la RDC desde 1999, la Monuc (Misión de la ONU en el Congo) que se convirtió en Monusco (Misión de la ONU para la Estabilización en la RDC) en 2010, cuenta en la actualidad con más de 14.000 cascos azules y un presupuesto anual de US$ 1.000 millones de dólares, y su objetivo es procurar la paz en una región donde unos 130 grupos armados se disputan el control de las fuentes de oro, diamantes, cobalto y cobre, especialmente en Kivu del Norte y la vecina provincia Ituri.