Alemania campeón de la Copa Confederaciones

Fútbol > ANÁLISIS

El modelo alemán a la uruguaya

Desde hace 11 años, Uruguay intenta revolucionar el fútbol juvenil y avanza a sus tiempos
Tiempo de lectura: -'
04 de julio de 2017 a las 05:00
Por estos días el mundo habla del plan de Dietrich Weise, quien fuera entrenador en los años de 1970 y que en 1998 planteó un proyecto innovador que pretendía buscar talentos y potenciarlos con el objetivo de lograr una revolución en el fútbol germano. Aquella idea desembocó, después de algunos resultados que inquietaron al comienzo –porque los éxitos estuvieron lejos–, en este 2017 con campeón vigente del mundo, de la Copa Confederaciones y el candidato para los torneos futuros.

Hace 11 años, en Uruguay se empezó a vivir una revolución similar, con puntos de contacto con la de Weise. En distintos niveles, con diferentes protagonistas y con la indisimulable idiosincrasia de una sociedad que suele transcurrir a un ritmo muy diferente al que puede proponer la alemana, por ejemplo.
El presidente de la República, Tabaré Vázquez, impulsó desde 2005 el programa Gol al Futuro. Reunió a los idóneos en distintas áreas, en el caso del fútbol a Óscar Washington Tabárez y Jorge Franco, y puso el foco para elevar el nivel en la formación integral de los futbolistas.

En Alemania no tuvieron que prepararlos académicamente, alimentarlos ni pensar en los aspectos más básicos. Ya estaban uno o varios escalones más arriba: apuntaron a la selección de talentos y a la perfección de los elegidos.

En Uruguay el camino a recorrer era más largo, porque las carencias no solo pasaban por un mejor desarrollo del futbolista en los aspectos técnicos sino en brindarle pilares más sólidos para que pudieran llegar a la edad madura con otras fortalezas físicas básicas, carencias de las últimas generaciones.

Desde entonces, con reestructuras en el plan, con médicos, odontólogos, podólogos, sicólogos, entrenadores y especialistas en distintas áreas, acompañaron el crecimiento de los juveniles de los distintos equipos de las divisiones menores del fútbol uruguayo.

A cambio, el programa Gol al Futuro exigía rendimientos académicos. Asistir a clase y no tener bajas en el liceo era el premio para que los clubes siguieran recibiendo el apoyo de profesionales, además de materiales que brindaban (indumentaria, pelotas) otro confort a los jugadores. Mínimos a la vista del primer mundo y si se siguiera en la comparación con Alemania, pero ajenos a la realidad uruguaya hasta 2005, en la que las formativas estaban descuidadas.

En 1998, en Alemania, lo primero que hizo Weise fue formar 115 centros regionales, para los que se necesitaba una inversión de € 1.250.000. Desde la Federación le dijeron que no tenían ese dinero, pero tras la floja participación en el Mundial de 1998, cambiaron de idea y, pensando en ser anfitriones en 2006, hicieron la inversión.

En total se crearon 121 centros regionales. En ellos, se les dio dos horas de entrenamientos a unos 4.000 jugadores de entre 13 y 17 años una vez por semana. Además, otros 10 mil niños sub 12 concurrieron a esas clases.

En Uruguay, lentamente comenzaba a prender la idea del valor de las divisiones formativas, como negocio para los clubes. Todo a esfuerzos aislados e individuales. Mejores juveniles y más preparados significaba mejores ingresos. Fue entonces cuando las instituciones empezaron a invertir en sus complejos para juveniles. El modelo de Danubio y Defensor Sporting, por el que ya transcurría también Wanderers y River Plate, prendió en Nacional, Liverpool, y más adelante Peñarol. Actualmente más de la mitad de los equipos de Primera apuestan a sus juveniles como forma de elevar el nivel.

Al mismo tiempo, en marzo de 2006 llegaba Tabárez a la selección con un proyecto que incluía un plan completo para las selecciones nacionales. En el punto 3, destacaba un capítulo especial para el fútbol del interior que no pudo desarrollar. No lo apoyaron.

El técnico consideraba que no era saludable expropiar del interior a sus jóvenes valores, alejarlos de sus familias y traerlos a Montevideo en condiciones adversas para un adolescente de 13 a 16 años que se destaca por sus condiciones futbolísticas, pero que aún no tiene la madurez para culminar su desarrollo lejos de sus afectos. Proponía crear centros de formación en distintos puntos del país y particularmente desarrollar y potenciar el trabajo y las competencias entre jugadores sub 15, el agujero negro en el fútbol del interior, después que dejaban el baby fútbol. Quería que los sub 15 jugaran al menos 40 partidos por año. Una cifra menor, pero altísima cuando no existía estructura que contemplara una competencia para los jugadores de esa edad.

La idea tenía puntos en común con la de Weise, adaptada a la realidad uruguaya. Weise quería que los jugadores no se trasladaran más de 25 kilómetros para ir al centro de entrenamiento. Tabárez se presentó en el Congreso de Intendentes, formalizó la idea para presentar un centro de entrenamiento por departamento y solamente encontró eco en dos intendencias: Maldonado y Flores. Las otras 16 lo ignoraron. Las dos miradas cómplices, también se distrajeron rápidamente y el proyecto de Tabárez naufragó.

Además, Tabárez destacaba hace 10 años que Uruguay tenía algunos puntos en común con Alemania. La historia y tradición futbolística, por un lado, y las distancias a recorrer dentro del país. En contra: mientras de Alemania se trasladaban a cualquier parte de Europa en máximo dos horas en avión, las distancias en Sudamérica se transformaban en un contrapeso para competir con los países vecinos.

Mientras Alemania se fortalecía desde sus raíces, en Uruguay daban pasos lentos.

Hace cuatro años, con Gustavo Bares en la presidencia de la Organización del Fútbol del Interior (OFI), le pidieron a Jorge Franco y Luis Matosas un plan para el desarrollo del fútbol juvenil del interior. La propuesta recorrió el camino que planteó Tabárez. Esta vez, después de mucho esfuerzo de OFI, Gol al Futuro y las Intendencias, prendió la idea. En mayo inauguraron el primer centro regional en Soriano.

Actualmente entrenan 60 futbolistas (30 varones y 30 mujeres) de 13 a 17 años, que trabajan con médicos, psicólogos, podólogos, entrenadores y profes, que perfeccionan las habilidades de los elegidos, por las que se destacaron y le permitieron ingresar en esa selección.

La idea de Bares es tener un centro por departamento. Imaginó una tarea titánica, porque inaugurar el primero había resultado así. Sin embargo, el presidente dijo a Referí que se encontró en estos días con un envión impensado.

Minas y Flores ya tienen todo pronto para inaugurar su centro de entrenamiento departamental. Bares espera la primavera para hacer el lanzamiento. Canelones trabaja en la construcción del suyo y San José está a punto de firmar. De no tener ninguno hace tres meses, hoy hay uno en funcionamiento, dos para inaugurar y dos en proceso, más otros 13 departamentos que quieren subir al carro de la formación de futbolistas con el entorno apropiado para su desarrollo, en su casa y con centros que le permitan a los jóvenes no trasladarse más de 50 kilómetros para ir a entrenar.

El proyecto que Tabárez presentó al Congreso de Intendentes hace una década naufragó, pero resurgió en esta movida de OFI.

Es por ello que, mientras en este 2017 en el mundo se deslumbran con Alemania y el modelo de Weise, a la uruguaya un país con tradición futbolera como muy pocos en el planeta, le pelean a esa idiosincrasia que impide crecer al ritmo de los alemanes, pero que comienza a asomar en el horizonte con la lentitud en que avanza todo en Uruguay. Por ello se puede plantear 2030 como un buen momento para que el mundo se deslumbre con Uruguay como hoy con Alemania. Es ahora cuando se construye la revolución futbolística para el futuro..

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...