General sancionado rechazó pase a retiro ofrecido por el Ejército y niega violencia de género

Días atrás, una suboficial con la que había mantenido una relación amorosa lo había denunciado en la Seccional 16 por violencia de género y luego el Juzgado Especializado en Familia de Sexto Turno le había impuesto, como medidas cautelares, el uso de tobillera electrónica por 180 días, la prohibición de acercarse a menos de 300 metros y la prohibición de tenencia y porte de armas.

En un mensaje enviado a varios camaradas de la fuerza, Fernández contó que ante esa situación el comandante en jefe del Ejército, Gerardo Fregossi, lo había “apoyado mucho”, que le había dado “la opción de pasar a retiro o esperar y que lo gestione el Poder Ejecutivo”, y que él había decidido la primera alternativa. 

Sin embargo, el apoyo de sus compañeros y el asesoramiento de dos abogadas –que le dijeron que las medidas cautelares no implicaban en sí una condena– lo convencieron de dar marcha atrás e insistir con su inocencia.

Mientras que la desobediencia y la marcha atrás de Fernández generaron malestar en sus superiores, el mando civil analiza destituirlo por el caso de violencia de género. En un comunicado de prensa, el Ministerio de Defensa informó que “la sanción se aplica, sin perjuicio del análisis jurídico y reglamentario de los hechos, del que se desprenderá la medida disciplinaria correspondiente, una vez que se disponga de todos los antecedentes”.

El presidente Luis Lacalle Pou –que respaldó al ministro Javier García y dijo que la decisión se tomó “en consulta”– dijo que “el fondo del asunto, que es el tema de la violencia doméstica, obviamente puede ameritar otra sanción”. 

Según el presidente, el arresto a rigor no se decretó por el asunto de fondo “sino por un hecho colateral”. “Estamos evaluando eso. Nosotros debemos llevarnos adelante por la ley”, afirmó. 

Esta es la segunda denuncia contra Fernández por violencia de género, pero en la primera ocasión no intervino la Justicia, según supo El Observador. 

El general, de 58 años, egresó de la Escuela Militar como alférez de Infantería en el año 1981, fue agregado de Defensa a la Misión Permanente de Uruguay ante Naciones Unidas en Nueva York, y participó en operaciones de paz en Mozambique (1993) y en el Congo  (2006-2007). Hasta hoy en día es uno de las figuras de relevancia dentro de la fuerza de tierra. 

El caso y una crítica a la justicia

En un primer mensaje a sus compañeros de armas, Fernández contó su versión de los hechos, negó haber incurrido en cualquier acto de violencia y dijo que la denuncia se dio luego de que, a los diez días de vivir juntos, le comunicara a la mujer su decisión de separarse. "Garanto a ustedes que no fui violento ni amenacé a esa mujer", dijo el general.

En su mensaje escrito contó que en enero ya había recibido una sanción por esa relación, expresó su "vergüenza" por los "errores" cometidos y señaló que aceptaría el pase a retiro pese a considerar que el juzgado de familia "no es un juzgado de justicia imparcial", ya que "está concebido para proteger a la víctima sin más y pese a que por error terceros denunciados puedan ser arrebatados en su derecho". 

Poco rato después, a través de un mensaje por audio, contó que varios compañeros y dos abogadas le habían advertido que el camino que había elegido era el "equivocado" y que había llegado "a la conclusión" de que "no debía" retirarse por "una situación de una mujer que está despechada".

"Las abogadas me dicen que estoy equivocado en el sentido de que la justicia a la que fui sometido es justicia especializada en violencia, que lo que hace es escuchar a las víctimas y no se hace ningún tipo de pruebas, no se piden ni testigos ni prueba forense, y con el indicio de que ella sufrió eso le hacen una pericia técnica al que denuncia, en mi caso por ser militar y general del Ejército soy de alto riesgo. Entonces el juez, con la denuncia de ella y esta situación, no me declara culpable de violencia doméstica. No cometí un delito, toma medidas de prevención para que yo no vaya a agredirla. Por lo tanto las abogadas me dicen que yo no debería tomar la decisión de pasar a retiro simplemente por una medida cautelar que se toma en una ley que lo que busca es proteger el bien de la mujer sin indagar si es cierto o falso lo que dice", expresó.  

"A partir de esto hablé con Fregossi, le expliqué que había cambiado de opinión, que me habían asesorado, que yo no estaba afectando éticamente a las jerarquías del mando, y que por una denuncia me tomaron medidas cautelares, que voy a cumplir con las medidas cautelares y voy a seguir en servicio", dijo Fernández, y señaló que podía ser pasible de una sanción disciplinaria.

Por su parte, dijo estar pensando en "pedir una junta médica" para que determine si es o no "un tipo riesgoso".  

El general dijo que "si el juez hubiera entendido" que efectivamente existieron amenazas o daños a la denunciante, el tema lo hubieran pasado a la justicia penal.