Irene Moreira: Manini Ríos-Salinas “era una linda fórmula” presidencial

Esto nace a raíz de una invitación que recibimos de Finlandia. Allá hacen una muestra de construcción en madera, que lo hacen todos los años en una ciudad distinta. En esta oportunidad fue en Naantali, en la que exponen por un mes casas en madera de distinta tipología. Al terminar la exposición, en esas casas ya  pasan a vivir las personas. Fue una experiencia muy buena, nosotros fuimos con técnicos del Sistema Público de Vivienda. Invitamos a Mevir y a la Agencia Nacional de Vivienda a que participaran con nosotros. Para los técnicos, obviamente, fue fundamental. Fui enamorada de la madera y volví aun más convencida. 

Esto no es por novelería: realmente estoy convencida de que es una herramienta fundamental para contrarrestar el déficit habitacional tan grande que hay en el Uruguay. No tenemos hectáreas y hectáreas planteadas, de eucaliptus, de pinos. El objetivo principal del ministerio es construir viviendas, pero también ser amigables con el ambiente y darle una valor agregado a la madera que hoy no se le está dando. 

 El 5 de agosto del año pasado lanzamos un plan piloto en viviendas de madera, y el 23 de diciembre estaban ingresando los participantes en sus casas. Eso nos demostró que se podía ahorrar el 50% de tiempo. Un factor muy importante en un momento como este, en donde necesitamos viviendas no para dentro de dos años, sino para ayer. 

También queremos hacer un piloto de viviendas en altura, que también pudimos ver allá. Fue una experiencia muy buena, y entre octubre y noviembre vienen técnicos de allá a continuar con este trabajo. Este cruzamiento de información va a ser bien importante para seguir avanzando en esto de la construcción en madera. 

En Suecia, por ejemplo, participamos de un barrio que están construyendo, totalmente en madera. También vimos un edificio, totalmente en CLT (madera contralaminada). Es una torre de nueve pisos, y cada uno tiene cuatro apartamentos. Todo en madera. Y cada piso lo hacen en un día.  Ví el Uruguay que quiero para el futuro. 

¿Qué se podría aplicar aquí de lo que se está desarrollando en esos países? 
Vine contenta porque pude comprobar que no estamos atrasados. Obviamente, cuando nosotros hacemos una casa en CLT (madera contralaminada), ellos ya hicieron 100 mil. Es evidente que nos tenemos que apoyar en el expertise de ellos. 

¿Pero cómo se “bajaría a tierra” esa experiencia? 
Nosotros tenemos una “hoja de ruta” para la construcción de vivienda social, en que la participó el Banco Interamericano de Desarollo con técnicos chilenos y uruguayos. Allí se estudió y se encontraron barreras... más que barreras, los miedos típicos de los uruguayos, que son fundamentalmente dos: el mantenimiento de las cosas. La verdad es que no es algo más complicado o costoso que una vivienda tradicional. El otro miedo es el fuego. Pero no lo dice Irene Moreira, lo dicen los especialistas: tenemos que ver el retardo al fuego, que es mucho mayor en la madera que en el acero. Lamentablemente lo vimos en el shopping de Maldonado: el acero cedió. 

Lo que tenemos que trabajar en Uruguay es ese prejuicio, ese concepto de que, cuando se habla de madera, se habla de algo de mala calidad. Pero lejos se está de eso. Nosotros tenemos casas dignas, de buena calidad. Es curioso: Si tú vas por ruta 10, desde la Barra de Maldonado a José Ignacio, podés ver inmumerables casas de “alta gama” hechas en madera. 

¿Usted se imagina viviendas en madera con fines sociales, por ejemplo? 
Sí, claro. Además, ese plan piloto que hicimos en Rivera nos demostró que ahorramos la mitad del tiempo, y entre el 20% y el 30% del costo de construcción por metro cuadrado. 

¿Cuál sería el costo? 
Un estudio de la Auditoría Interna de la Nación demostró que se estaba construyendo vivienda social por entre US$ 2.000 y US$ 2.400 el metro cuadrado. Yo me propuse que debería estar en los US$ 1.000, porque si no deja de ser social. En una casa de 50 metros cuadrados, que es la casa tipo, estaríamos hablando de ciento y pico de miles de dólares, que de social no tiene nada. Las construcciones en madera rondaron los US$ 700, US$ 800 el metro cuadrado. Es accesible, es posible. 

En Finlandia también hablan del bienestar personal: la madera es cálida en invierno, es fresca en verano, tiene una serie de ventajas. Allá tienen  una serie de estudios, hasta desde el punto de vista espiritual, que demuestran que sirve la construcción de madera. 

Allí usted fue acompañada por su esposo, el senador Guido Manini Ríos... 
Sí. Él me acompañó. La misión oficial fue del ministerio, él se pagó todo.

¿En ese Uruguay que quiere para el futuro la madera podría utilizarse en el plan de relocalización de asentamientos?
Puede ser una opción totalmente factible. Reitero, el esfuerzo que hay que hacer es cambiar ese chip en la población. 

Le pregunto por los señalamientos sobre la falta de concreciones en lo que el propio gobierno ha definido como el “buque insignia” de esta administración, que es el Plan Avanzar.
El Plan Avanzar está funcionando. Nosotros hicimos el lanzamiento en mayo, y dejamos en claro que vamos a actuar en 120 asentamientos. De ellos, en 40 ya veníamos trabajando en el Plan Quinquenal. El jueves, por ejemplo, inauguramos 54 viviendas...

Por eso le preguntaba... lo que se inauguró el jueves, en Chacarita de los Padres, venía de un plan anterior...
Por eso te digo. El Plan Avanzar son 40 asentamientos que vienen del Plan Quinquenal, otros 20 que tenían algún tipo de estudio, ya sea de tierra o de población, pero que estaban en stand by, es decir que en este quinquenio allí no se iba a actuar. Y después los otros, que son totalmente nuevos. 

Nosotros hicimos el lanzamiento y firmamos un convenio con el Congreso de Intendentes y luego, un convenio específico con cada intendencia. Ahora estamos en la etapa de estudio de los anteproyectos de esos 60 asentamientos nuevos. Ya hay seis proyectos presentados, que equivalen a 17 asentamientos. Mevir presentará la semana que viene otros tres proyectos de cinco asentamientos. La meta que nos hemos puesto es en diciembre poder estar actuando en los 19 departamentos. Eso es bien importante. El Plan Avanzar tiene ese objetivo: estar actuando en todo el país como nunca antes se había hecho, en un trabajo transversal con las 19 intendencias. 

¿Cambian las metas con respecto a las que se habían planteado iniciamente, de llegar con determinado número de asentamientos ya regularizados al final de quinquenio?
Este programa insignia que es el Avanzar, no estará permitiendo duplicar lo que se venía haciendo en quinquenios anteriores. Nosotros teníamos US$ 240 millones para asentamientos, y ahora tenemos US$ 240 millones más. Eso nos genera tener una mayor respuesta en menos tiempo. 

El Ministerio de Economía dijo hace poco en el Parlamento que para esos US$ 240 millones suplementarios se iba a recurrir a préstamos internacionales para fondear el fideicomiso...
El fideicomiso está creado. Se crearon los mecanismos, el soporte para recibir ese dinero. También están los US$ 40 millones que habían venido de Colonización. Obviamente, ningún fideicomiso se crea con todos los rubros, pero ya tenemos todo habilitado para que el dinero empiece a ingresar para seguir trabajando. Este es un proyecto de varios años... nosotros queremos dejar esto como una política nacional de cómo actuar en el tema asentamientos para otras administraciones.

¿Cuál es la meta concreta de realizaciones hasta el final de este gobierno?
(Piensa)... por lo menos, un asentamiento por departamento. Todo varía mucho, ya que ningún asentamiento es igual a otro. En algunos es todo relocalización, si se trata de una tierra contaminada. En otros es algún tipo de mejora, sacar un par de casas, abrir calles...Hay asentamientos en los que, hoy por hoy, no está entrando ni siquiera una ambulancia.  También varía el gasto en cada asentamiento, según el número de casas que haya que hacer o la infraestructura. 

Le pregunto porque, insisto, se ha dicho que el Plan Avanzar es el “buque insignia” de este gobierno. Usted está asociada de alguna manera a este plan. ¿Qué legado le gustaría dejar en marzo de 2025?
 El legado que voy a dejar es poder mirar para atrás y saber que hice mi mayor esfuerzo para conseguir el número más grande de casas para nuestros frágiles, y haber tratado de solucionar el mayor número de asentamientos posible. 

Se habla de que usted estaría explorando una carrera política o de armar su propio sector en Cabildo Abierto...
Lo ponen como si fuera una novedad, o de que hoy me desperté diciendo que voy a ser política. Yo milité durante toda mi vida. He sido edil, convencional, he integrado listas desde los 18 años. Lo que hay ahora es que Cabildo Abierto, que el 3 de mayo tuvo su congreso, habilitó la posibilidad de que se organizaran agrupaciones nacionales. Entendemos que es la posibilidad de ensanchar las bases y de crear corrientes, todas apuntando hacia nuestro líder, sin lugar a dudas. El único líder que tenemos es el senador Manini Ríos. Que cada persona pueda trabajar desde el lugar en el que se sienta más cómoda, y que el electorado tenga la posiblidad de tener un abanico más abierto y amplio, y elegir desde qué lugar aportar. 

Algunos compañeros me vinieron a hablar y me dijeron que se sentían cómodos trabajando conmigo. Es una posibilidad. 

¿Cómo se imaginaría una corriente “moreirista”? 
Apoyando y trabajando codo a codo por los principios de Cabildo Abierto, trabajando para nuestros frágiles, buscando soluciones para cambiar la realidad de muchas personas. Fijate que hay 200 mil compatriotas que están un día como hoy, con lluvia y humedad, viviendo en costaneros o casas de chapa. A veces con un nylon por arriba, para aislarse un poco más. No me lo contaron, lo viví, lo recorrí. Desde antes de estar acá, que nunca pensé estar al frente de este ministerio. Como mujer y como madre, me niego a que eso suceda... En algunos departamentos, he visto viviendo gente dentro del vertedero municipal. 

Es increíble que, después de tanto “viento a favor” y de tanto dinero que entró al país, que haya tantos uruguayos viviendo en esa situación es muy duro. Por eso estamos trabajando, actuando responsablemente y dando lo máximo posible para buscar soluciones para cambiar esa realidad. 

¿Cómo juega el hecho que Daniel Salinas, que según las encuestas es uno de los máximos capitales políticos de Cabildo Abierto, pueda ir a la Organización Panamericana de la Salud, dejando al partido sin una de sus figuras de mayor proyección? 
Sin dudas, Daniel ha hecho un excelente trabajo en el ministerio y es reconocido internacionalmente. De ahí que su nombre esté sobre la mesa para ese cargo. Como uruguayos, debemos estar muy contentos de que haya un compatriota con ese profesionalismo representando a nuestro país. 

¿Preferiría que se quedara aquí para ganar más votos?
Obviamente, es un gran cabildante y es uno de los grandes apoyos que tiene Cabildo. Pero no podemos ser tan egoístas. Tenemos que pensar como uruguayos más que como cabildantes. 

Le digo porque Salinas era uno de los probables candidatos a integrar la fórmula presidencial junto a Manini en 2024...
 Que era una linda fórmula, sin lugar a dudas. 

Si no es Salinas ¿la fórmula podría ser Manini - Moreira?
No, no. En la elección pasada ya un grupo de pesonas manejó mi  nombre, pero no. 

¿No lo aceptaría?
Yo estaré en el lugar que el partido necesite que esté. Trabajando y aportando desde el lugar en el que el partido entienda que tengo que actuar.