Robert Epstein es un psicólogo estadounidense destacado. Colaboró con B. F. Skinner, principal divulgador de la teoría conductista, se doctoró en psicología en Harvard, fue editor de Psychology Today (una de las revistas de psicología de mayor prestigio) y fue uno de los fundadores del Instituto Americano de Investigación y Tecnología del Comportamiento.
En 2013 Epstein descubrió un fenómeno al que llamó “Efecto de Manipulación de un Motor de Búsqueda”, mediante el cual una compañía como Google, que tiene casi un monopolio de las búsquedas de internet, podría tener una influencia determinante en una elección pareja. Posteriormente Epstein siguió estudiando las manipulaciones de Google y presentó los resultados de sus investigaciones en eventos académicos, en publicaciones científicas y en un testimonio ante el Congreso de los Estados Unidos (16/07/2019). Pese a ser demócrata, se ha vuelto popular en los medios de prensa conservadores.
En uno de sus sitios web1, Epstein presenta sus investigaciones sobre Google al público en general. Desde allí se puede descargar un muy interesante ensayo de 51 páginas cuyo título, traducido al español, es “La amenaza triple de Google: a la democracia, a nuestros hijos y a nuestras mentes”. A continuación resumiré esa obra de Epstein, que es una versión actualizada (al 03/10/2022) y aumentada de su testimonio ante el Congreso.
En la introducción, el autor expresa su posición personal: “No soy conservador y no escribo este ensayo para impulsar una agenda política. Si acaso, políticamente me inclino a la izquierda, por lo que debería estar aplaudiendo a Google y las otras grandes compañías tecnológicas [Facebook, Twitter, etc.] por su apoyo reciente a candidatos y causas progresistas. Pero no puedo aplaudir, porque una investigación rigurosa que he conducido desde 2013 me ha mostrado cuán peligrosas son estas compañías. (…) El auge de internet ha dado a estas compañías un poder sin precedentes para controlar la política pública, decidir elecciones, lavar el cerebro de nuestros hijos, censurar contenido, rastrear todos nuestros movimientos, destrozar sociedades, alterar la mente humana e incluso rediseñar la humanidad2.”
Más adelante el autor presenta seis hallazgos preocupantes de su investigación:
- “En 2016, resultados de búsqueda sesgados generados por el algoritmo de búsqueda de Google probablemente impactaron a votantes indecisos de un modo que dio entre 2,6 y 10,2 millones de votos [adicionales] a Hillary Clinton (a quien yo apoyé)3.”
- “En el día de la elección [de medio término] de 2018 el recordatorio para ir a votar que Google desplegó en su página principal dio a un partido político [el Demócrata] entre 800.000 y 4,6 millones de votos más que los que dio al otro partido [el Republicano]4.”
- “En las semanas anteriores a la elección de 2018, el sesgo en los resultados de búsqueda de Google puede haber desplazado más de 78,2 millones de votos a los candidatos de un partido político [el Demócrata], repartidos entre cientos de contiendas [electorales] locales y regionales5.”
- “En los días anteriores a la elección presidencial de 2020 y la segunda vuelta de las elecciones al Senado de 2021 en Georgia, mi equipo y yo preservamos más de 1,5 millones de experiencias efímeras de carácter político en Google, Bing, Yahoo, YouTube, Facebook y otras plataformas, y también preservamos más de 3 millones de páginas web. Una vez más, encontramos un sesgo político extremo en Google y YouTube (que pertenece a Google), suficiente para haber desplazado al menos 6 millones de votos en la elección presidencial sin que la gente lo sepa. Más importante aún, una carta informando de nuestros hallazgos preliminares enviada al CEO de Google por tres Senadores de los EEUU el 05/11/2020 forzó a Google a permanecer fuera de las elecciones de Georgia6.”
- “Mi investigación reciente demuestra que las sugerencias de búsqueda ‘autocompletadas’ de Google pueden convertir un reparto 50/50 entre votantes indecisos en un reparto de casi 90/10 sin que la gente se dé cuenta7.”
- “Probablemente Google haya determinado los resultados de más del 25% de las elecciones nacionales en todo el mundo desde al menos 2015. Esto se debe a que muchas contiendas son muy parejas y a que las tecnologías de persuasión de Google son muy poderosas8.”
Epstein sostiene que la interferencia de Google en las elecciones estadounidenses es más de 100 veces mayor que la de Rusia. Yo agrego que, pese a esto, la interferencia de Rusia acaparó casi toda la atención de la prensa y la de Google pasó casi inadvertida.
El autor también presenta sus estudios sobre las operaciones de censura de Google y denuncia su modelo de negocios, basado en una vigilancia masiva de los usuarios de sus servicios. “Los servicios de Google no son gratuitos –sentencia Epstein–. Pagamos por ellos con nuestra libertad9.”
El autor propone una solución al problema planteado por Google: establecer que la base de datos que Google usa para generar resultados de búsqueda sea un bien público accesible para todos.
Epstein concluye su ensayo con una referencia al famoso discurso de despedida del Presidente Eisenhower en 1961: “Eisenhower alertó sobre el posible ascenso de una ‘élite tecnológica’ que podría controlar la política pública sin que la gente se enterara. Ahora esa élite existe, y tiene más poder del que ustedes piensan. La democracia tal como fue concebida originalmente no puede sobrevivir a las grandes compañías tecnológicas con su poder actual. Depende de nuestros líderes –y de cada uno de nosotros como individuos– determinar a dónde iremos a partir de aquí10.”
1) www.mygoogleresearch.com
2) Robert Epstein, Google’s Triple Threat, p. 3 (todas las citas incluidas corresponden a mi traducción).
3) Ibídem, p. 6.
4) Ibídem, p. 8.
5) Ibídem, p. 9.
6) Ibídem, p. 10.
7) Ídem.
8) Ibídem, p. 11.
9) Ibídem, p. 15.
10) Ibídem, pp. 21-22.