La mayoría de edad no se cumple a los 18 años, al menos para usar las redes sociales y aplicaciones. En general, los padres no tienen conocimiento de cuál es la edad correcta para iniciarse en el mundo de la tecnología y hay psicólogos que piensan que los padres nunca están preparados. Las redes sociales y organismos que velan por los derechos de los niños se pronuncian sobre el tema.
La Administración Nacional de Educación Pública y el Centro Nacional de Respuesta a Incidentes de Seguridad Informática divulgaron a fines de 2018 una guía que establece una sugerencia sobre cuál es la edad mínima para el uso de aplicaciones.“Todas las redes sociales tienen una edad mínima para su uso; es importante respetarla”, señala en su página 53.
En general, las principales plataformas como Facebook, YouTube, Instagram, WhatsApp y Twitter exigen que el mínimo sea 13 años (ver recuadro).
Los niños uruguayos no parecen cumplir esta sugerencia. Hay cifras que lo evidencian: por ejemplo, el 90% de los menores cuyas edades oscilan entre 9 y 12 años utilizan YouTube, según el informe Kids Online Uruguay, que encuestó a niños sobre su uso de la tecnología en 2017. En ese mismo rango etario, el 60% utiliza WhatsApp, el 40% Facebook, el 27% Instagram (esta cifra seguramente haya subido en los últimos dos años), y el 6% Twitter.
Cecilia Cabrera, psicóloga e integrante de Sujetos en Red, una ONG que busca concientizar sobre el uso saludable de las tecnologías de la información en menores, opinó que “está bien” que las plataformas fijen una edad mínima, pero ese no es el verdadero problema. “El problema es el tipo de uso que se le da y la falta de preparación que tiene un niño o un adolescente cuando va a utilizar una red social”, señaló.
Según Cabrera, a esa edad, si no tienen los conocimientos de los riesgos, como poner datos de la vida privada en las redes o de compartir imágenes propias y ajenas, pueden terminar en problemas. El objetivo de esa preparación es que el menor “no se ponga en peligro y tampoco ponga en peligro a otros”.
Para ilustrar las consecuencias que puede tener, Cabrera da el ejemplo del auto e internet. “Nadie discute que es espectacular tener un vehículo que te transporte, pero darle la posibilidad de manejar un auto a una persona que no tiene preparación y no pasó por un examen, lo convierte en un arma letal”. “Pasa algo parecido con las redes”, comentó.
La ley de urgente consideración que prevé aprobar el Parlamento en la próxima legislatura hace un capítulo especial sobre este tema. En el artículo 214 habla del “derecho de los menores en Internet”. Dice: “Los padres, madres, tutores, curadores o representantes legales procurarán que los menores de edad hagan un uso equilibrado y responsable de los medios digitales a fin de garantizar el adecuado desarrollo de su personalidad y preservar su dignidad y sus derechos. Asimismo, deberán atender que la utilización o difusión de imágenes o información personal de los menores en las redes sociales y medios digitales equivalentes no atente contra sus derechos humanos”.
En este artículo hace solo referencia al vínculo entre los padres y sus hijos en el mundo de internet.
Además de la atención familiar que busca fomentar esta ley, está la atención educativa formal. Y ahí el Plan Ceibal juega un rol fundamental.
Esta institución toma como referencia los datos de la encuesta de Unicef para ejecutar políticas públicas, aseguró Pablo Pagés, jefe de Desarrollo en Centros Educativos en Plan Ceibal.
Han pensado estrategias para que los menores hagan un uso saludable de las tecnologías. Por ejemplo, el año pasado hicieron en más de 70 liceos de todo el país un módulo temático de 12 semanas sobre cómo hacer un uso responsable de las redes sociales. “Problematizamos su uso”, comentó. Luego, los alumnos realizaron una presentación en el aula donde daban a conocer cómo hacer un uso saludable de ellas.
El abordaje con las escuelas sobre este tema se hace por intermedio de los practicantes de magisterio. Los estudiantes que transitan su año anterior al egreso reciben preparación en su instituto: aprenden el uso de distintos recursos digitales y se los “sensibiliza” en el desarrollo de la ciudadanía digital en los niños. ¿Qué es ciudadanía digital? Promoverles un uso responsable, seguro y creativo de la tecnología.
El ejecutivo del Plan Ceibal comentó que desde esta institución aplican filtros de contenido y promueven la navegación en páginas seguras. “Cualquier referente que se comunique con nuestro call center puede decir: ‘Tal página alentó a que el niño viera contenido no previsto para su edad’”, comentó. Luego se da de baja. Esto no corre para los servicios más populares.
“Este es un dispositivo más. Desde la responsabilidad que nos toca, lo que importa es generar una navegación responsable, segura y que eso pueda permear en el hogar. Por eso importa trabajar con la familia”, agregó el experto.
Pagés señaló que este afán “no prohibicionista” en el uso de estas plataformas está dialogado con varios actores del Estado. “Desde 2019 se generó una mesa interinstitucional para poder generar un abordaje uniforme de la ciudadanía digital”, comentó Pagés. En esa mesa participan la Agencia del Gobierno Electrónico (Agesic), el Ministerio de Educación y Cultura, la Universidad de la República, la Universidad Tecnológica, la organización El Abrojo.
Además, para este año están pensando en realizar videoconferencias para preparar a los niños de 5° de escuela a 2° de liceo sobre un uso responsable de las redes, la etapa en la que se dan esos primeros usos.
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