Presidencia

La explicación de Argimón sobre el audio con Cristino y las preguntas que falta responder

La vicepresidenta dio su versión de la conversación en la coordinación interpartidaria de este lunes; los senadores del Frente Amplio pidieron investigar a Fiscalía

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23 de junio de 2020 a las 05:03

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Desde que el jueves por la noche se conocieron los audios entre la vicepresidenta Beatriz Argimón y el relacionista público Fernando Cristino quedó instalado el debate acerca del accionar de la número dos del gobierno, y de si se trata de un escándalo de poca relevancia política o si es un asunto de interés público con consecuencias políticas.

Lo que generó más controversia de la conversación es que la vicepresidenta habló de que se realizan escuchas telefónicas. Las aclaraciones que dio luego sobre el tema no permiten trazar un cuadro acabado de la situación y del significado que tienen sus palabras.

La conversación se mantuvo en privado hasta la semana pasada, cuando un fragmento grabado por Cristino circuló a través de WhatsApp y redes sociales hasta estar en boca del presidente de la República, Luis Lacalle Pou, y los dirigentes del Frente Amplio, que en la reunión de la Mesa Política del viernes no llegaron a una conclusión, pero sí consideraron que la ciudadanía merecía más explicaciones sobre qué había querido decir Argimón.

La vicepresidente difundió este lunes un comunicado en el que volvió a negar la existencia de un "sistema institucional" de "escuchas telefónicas", algo que también hizo el ministro del Interior Jorge Larrañga y que el viernes había rechazado Lacalle Pou.

Después de que el presidente del Frente Amplio, Javier Mirada, dijera el viernes que la ciudadanía merecía “aclaraciones”, Argimón llamó al coordinador de la bancada de la coalición de izquierda en el Senado, Charles Carrera, para decirle que explicaría su versión en la próxima reunión de coordinación interpartidaria. 

Camilo dos Santos

Esa instancia se dio sobre las 14 horas de este lunes, dos horas antes de lo pautado. La exposición de Argimón duró cerca de 30 minutos y, entre otras pruebas, mostró audios y un mensaje de WhatsApp que le había enviado Cristino para demostrar en qué tono se dirigía a ella el relacionista público. 

Según legisladores del oficialismo, Argimón explicó que la conversación se produjo cuando el proyecto de ley de urgente consideración estaba siendo discutido en la Cámara de Senadores, es decir, entre el 28 de abril y la primera semana de junio. 

La vicepresidenta se puso en contacto con Cristino, a quien conoció años atrás a través de uno de sus hijos, después de que él le dejó en su despacho una serie de mensajes pidiéndole ayuda para cobrar un pago que supuestamente le debía la Intendencia de Maldonado. Según señaló Argimón a legisladores del oficialismo que estuvieron en la reunión, la intensidad y el tono agresivo de los mensajes aumentó conforme pasaba el tiempo, lo que puso en alerta a quienes podían escucharlos. 

Los argumentos que la vicepresidenta dio el lunes no conformaron a los senadores del Frente Amplio, que este martes presentarán los audios y un escrito a la Fiscalía para que investigue. 

¿Qué dijo Argimón?

Reconstruyendo la historia que se escucha en el audio, Argimón le dice al relacionista público que le “llamó mucho la atención” que hable de Lacalle Pou, de ella y del ministro Larrañaga, “con una suerte de amenaza”, y le advierte a Cristino que tiene un equipo de abogados, y que debe tener cuidado con lo que dice en las llamadas telefónicas. Le advierte que “no se haga eco de nada”, que no diga “que tiene noticias del dealer de Luis”, y expresa: “Nuestros teléfonos hay que cuidarlos mucho”, porque “todo se sabe”, y que “todo queda grabado”. Además, asegura que una llamada anterior de Cristino a una tercera persona, mencionada como “aquella”, fue escuchada por su abogado, y que ella intercedió por el relacionista público de alguna manera. 

“Al final del día, cuando se escuchan las llamadas y escucharon la tuya vinieron a hablar conmigo. Y dijeron: ¿este muchacho...? Les dije: ‘Es Fernando, yo me ocupo’ (..), para que no te hicieran nada. Porque todas las llamadas, todas, van directo y ahora te lo digo porque asumo la responsabilidad de decirte: yo frené, porque enseguida obviamente responden quienes tienen que responder”, dice la vicepresidente en un fragmento de la conversación.

En el audio quedan planteadas varias preguntas, que de momento ni Argimón ni el presidente Lacalle Pou aclararon públicamente.

En una nota con El País el viernes, la vicepresidenta sostuvo que al decirle a Cristino que "todo se sabe" y "todo queda grabado" quiso decir que cualquiera puede escuchar sus llamadas, por ejemplo si las pone en altavoz o le hackean el celular. "A veces cuando me llaman atiende mi secretaria, entonces les digo que me dejen el mensaje grabado y yo al final del día lo escucho", sostuvo. Además, el presidente negó que hubiera escuchas y dijo que eso no cabe en democracia.

Las preguntas que generó el audio

Diego Battiste

¿Hay un sistema de escuchas?

La primera duda que quedó planteada con la llamada es si hay un sistema de escuchas ilegal autorizado por el gobierno. Eso no aplica al sistema de escuchas policiales, que necesitan autorización del juez, y a las cuales el gobierno no debería tener acceso. Sería un escándalo político de proporciones. 

"Yo actuaría ilegalmente si escuchara un teléfono sin la orden judicial correspondiente, y eso lo quiero desmentir tajantemente", dijo este lunes el ministro del Interior, Jorge Larrañaga, en rueda de prensa. "Lo que quiero decir y dar las garantías a los uruguayos es que no hay escuchas ilegales en Uruguay", agregó.

Argimón, por su parte, dice en el audio que alguien escucha sus llamadas al final del día, pero no aclara quién. Lacalle Pou negó que exista un sistema de escuchas. El presidente afirmó el viernes en rueda de prensa que “es un disparate” afirmar que el gobierno está realizando escuchas telefónicas.

De hecho, según pudo saber El Observador, Lacalle Pou le pidió a Argimón que aclarara a la ciudadanía qué había querido decir. La vicepresidenta descartó mediante un comunicado que haya un sistema de escuchas. 

"En lo que respecta a mis dichos sobre grabaciones o escuchas telefónicas en ningún momento me refiero a un sistema institucional y mucho menos por fuera de cualquier sistema legal, cosa impensable en una democracia como la nuestra", sostuvo la vicepresidenta. "A lo que sí me refiero es a las múltiples llamadas y mensajes grabados que al finalizar cada una de mis jornadas laborales escucho sola o con integrantes de mi equipo", explicó Argimón.

En la reunión interpartidaria señaló que la existencia de un sistema de escuchas ilegales fue una conclusión a la que llegaron otros pero que ella nunca dijo. Allí también explicó que al afirmar “que todo se sabe” y “todo queda grabado”, quiso persuadir a Cristino de que dejara de llamarla y de dirigirse en ese tono, pero no contaba con que estuviera siendo grabada y que fuera a trascender de la forma que lo hizo. 

Cristino tiene un programa en radio Universal y desde hacía días insistía a Argimón con que divulgaría información comprometedora de algunos jerarcas del gobierno, que según los legisladores del oficialismo era falsa, si no recibía la compensación. Por eso Argimón, que tiene una relación de confianza con el relacionista público, explicó que exageró la situación para que dejara de insistir. 

¿Quién escuchó las llamadas?

En el audio Argimón se refiere a que la llamada polémica de Cristino fue a “aquella”, sin aclarar de quién se trata. Y luego menciona que al final del día “todos los llamados se escuchan”. Eso no encaja ni con la explicación de los hackers ni con la de que ella escucha los mensajes grabados que le dejan. 

“Lo que tú hablaste el otro día, cuando tú llamaste a aquella, obviamente todo se sabe. Todo queda grabado. Y por supuesto a mi abogado le dije no, a Fernando no, a Fernando te pido que no. Yo voy a hablar con él y es lo que estoy haciendo”, dice Argimón.

Tampoco queda comprendida en esa explicación la frase de la vicepresidenta en la que refiere a que “todas las llamadas, todas, van directo”.

La presidenta del Senado dijo que quienes pueden escuchar las llamadas y mensajes son las personas que frecuentan su despacho en el Palacio Legislativo, como secretarios y asesores. Negó que se trate de un organismo dedicado a eso, y recordó que el tono y el contenido de sus afirmaciones estaban condicionados por la intención de que Cristino dejara de enviarle mensajes.

"En más de una oportunidad en los últimos 15 días recibí llamadas y mensajes de este señor con intenciones poco claras, por lo que decidí consultar a un profesional a efectos de evaluar la situación jurídica del alcance de las mismas", señaló este lunes en su declaración.

Argimón no explicó en la reunión interpartidaria quién es “aquella”, pero en el comunicado contó que decidió ponerse en contacto con Cristino “muy especialmente, para clarificar el tema sobre los comentarios emitidos a una secretaria” con un “tono amenazante” que “no correspondía ni en lo personal ni en lo institucional”. 

Lo que Cristino dijo en ese mensaje por ahora se desconoce, y Argimón tampoco lo explicó en la reunión del lunes. Sin embargo, aseguró que las “intenciones poco claras” de Cristino motivaron que consultara a abogados para evaluar posibles acciones legales.

¿Qué significa el “que no te hicieran nada”?

“Les dije: ‘Es Fernando, yo me ocupo (..) para que no te hicieran nada (...) yo frené, porque enseguida obviamente responden quienes tienen que responder”. La pregunta que queda sin responder es: ¿qué frenó Argimón? ¿Quiénes son los que “tienen que responder”, y cómo deberían responder?

Hay dos partes de la llamada que permiten suponer que está hablando de abogados y una posible demanda a Cristino. Por un lado, en el arranque de la conversación dice: “Amenazas y extorsiones recibimos todos los días”. Después hace referencia a su abogado, al asegurar que ella se encargaría de llamar directamente a Cristino. Pero si bien eso se puede inferir, tampoco la vicepresidenta aclaró públicamente el punto. Por otro lado, el hecho de que “todos los días” el gobierno reciba extorsiones y amenazas es un punto que no estaba hasta ahora en la agenda pública.

Otra vez, Argimón aseguró que esto fue parte de haber exagerado el contenido del mensaje para que Cristino no siguiera llamándola, según los legisladores del oficialismo. 

Esta explicación, sin embargo, no conformó a los senadores del Frente Amplio, que argumentaron que la extorsión es un delito y, como tal, debe ser investigado. "Los contenidos generan una preocupación relevante en el sentido institucional, más allá de aspectos privados, en la medida en que refieren a escuchas telefónicas y extorsiones cotidianas a jerarcas de gobierno", plantearon este lunes en un comunicado, en el que informaron que elevarían el audio a la Fiscalía. 
 

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