Lacalle Pou "rehén" de su propia estrategia frente al avance de Talvi, según analistas

“Uruguay va a un proceso el 27 de octubre que es alternancia o continuismo. Los que opten por la alternancia pueden decir quién les asegura que también pueden gobernar con el resto de los partidos en los próximos cinco años. Ese creo que es el diferencial del Partido Nacional”, dijo el candidato a El Observador. 

Sin embargo, esta estrategia de Lacalle Pou que, según reconoce, antecede a la propia campaña se tropieza ahora con un escenario cambiante y una realidad inesperada tan solo algunos meses atrás. Las últimas encuestas de intención de voto muestran que el colorado Ernesto Talvi crece y se le acerca  como un competidor fuerte para las elecciones nacionales.

¿Cómo debe moverse Lacalle Pou en un escenario de crecimiento fuerte de uno de sus posibles socios que incluso le puede arrebatar la posibilidad de ser el representante del "cambio" en el balotaje? El candidato ya dijo que nada lo hará moverse de su camino. Para politólogos consultados por El Observador, cambiar el rumbo o empezar a tomar paulatinamente otro camino no es una opción, pero entienden que la hoja de ruta puede traer algunas complicaciones.

El director de Factum, Eduardo Bottinelli, señaló a El Observador que Lacalle Pou es “rehén de su propia construcción”. “Él se viene posicionando como líder de la oposición con la apuesta a un gobierno multicolor y no puede borrar lo que ha dicho de dejar las puertas abiertas a otros partidos. Él trazó una línea. Distinto hubiera sido si dijera que iba a estudiar a quién integra”, sostuvo.

Bottinelli aclaró que la foto actual de las encuestas es “post elecciones internas”, lo que significa que todavía no se puede decir a ciencia cierta si el crecimiento de Talvi es una “línea de tendencia o significa que Lacalle Pou tuvo una caída pero luego se estabiliza”. “Talvi viene en un proceso de crecimiento personal pero es una incertidumbre si sigue creciendo. Si sigue creciendo, empieza a dificultarse cuáles van a ser las líneas demarcatorias y el caudal electoral que tienen juntos.  Y si realmente van a trabajar juntos”, dijo.

Por su parte, para la directora ejecutiva de Cifra, Mariana Pomiés, Lacalle Pou comienza a experimentar una pérdida de liderazgo en la oposición porque su victoria no es tan clara y eso debería llevarlo a darle otro énfasis a sus discursos. “Él debería hacer énfasis en conquistar o reconquistar votos para mostrarse como el mejor presidente y con el mejor equipo”, sostuvo.

Al igual que Bottinelli, Pomiés enfatizó que hacer algunos ajustes en su discurso no puede implicar un cambio en su hoja de ruta porque “está convencido de que ese es el camino”.  

Para Lacalle Pou, “el partido tiene la obligación de comparecer claramente ante la ciudadanía”. “Decir quiénes somos, qué programa tenemos y cuál es el camino a seguir. Hay que darle certidumbre a la gente y sostener diariamente la humildad que significa el ejercicio de la autoridad. Eso habla de cuidar a nuestros futuros socios”, afirmó en la entrevista que le realizó El Observador.

El politólogo Antonio Cardarello opinó que la necesidad de cuidar socios fue un poco anticipada por parte del candidato. Según Cardarello, Lacalle Pou se adelantó en decir quiénes serán esos futuros compañeros de coalición, porque entiende que mencionar a determinados partidos puede expulsar a algunos votantes más de centro.

“Está bien porque está privilegiando destacar lo que tienen en común por sobre las diferencias pero en la campaña uno tiene que competir y diferenciarse. En ese sentido Talvi ha sido más astuto,  porque es partidario de una coalición pero ha marcado diferencias respecto a con quiénes no negociaría; tratando de ocupar un poco más el centro del espectro político”, dijo.