Los futbolistas aficionados y la Liga Universitaria preparan su regreso para julio

Atentos a lo que suceda con la LUD están otras ligas importantes del fútbol amateur, que tienen responsabilidades distintas, pero que aglomeran a miles de personas cada fin de semana. La Liga Universitaria es el espejo en el que se miran para arrancar, aunque en algunos casos tienen sus propios protocolos y entienden que si cometen un error, el remedio puede ser peor que la enfermedad.

Se calcula que, en todo el país, contando las distintas ligas amateurs que están organizadas, hay más de 30 mil futbolistas que cada semana despuntan el vicio de correr detrás de una pelota.

Julio Jakob, presidente de la LUD, dijo a Referí que el reinicio está previsto para el 15 de julio, pero aclaró: “Siempre sujeto a la evaluación de cada fase y la autorización de la SND y del MSP”.

Lo que aún no se resolvió y está a estudio, es qué pasará si aparece un caso de covid-19: “Estamos analizando pero habría que parar el equipo de ese jugador, el equipo contra el que jugó y el equipo con el que jugó la semana anterior”, señaló Jakob, quien cumplió 33 años como presidente de la Liga.

El año pasado participaron 9 mil deportistas en la Liga Universitaria, que tiene competencias en 10 disciplinas. Para el mes de julio está previsto que comiencen los que se realizan al aire libre. La Liga, además, emplea a 17 funcionarios rentados y a 42 voluntarios.

Otra liga importante en el deporte amateur es la MVD o Liga Montevideo, que se fundó en 2010 y actualmente cuenta con 8 mil jugadores entre hombres y mujeres, distribuidos en distintas categorías. Cada fin de semana utilizan seis o siete complejos deportivos para sus campeonatos, y hay más de 100 empleados que dependen de la actividad, entre administrativos, árbitros y fotógrafos.

Sebastián Demarco, uno de sus integrantes, explicó a Referí que están prestando especial atención a lo que resuelva la LUD porque tienen un perfil similar. También siguen las recomendaciones de la SND y a raíz de eso comenzaron a armar un protocolo: “Más que nada de exhortaciones y recomendaciones a los jugadores. No nos metemos en el entrenamiento de ellos porque es fútbol amateur, queremos que la gente se vaya a distraer, a jugar, hacer deportes”.
Debido a que tienen capacidad de control en los complejos donde desarrollan la actividad están planificando zonas de higienización para lavarse las manos, más recipientes de residuos, más gente dedicada al mantenimiento de las canchas y separar los partidos en horarios para evitar acumulación de personas.
“Todos los días estamos en contacto con Secretaría y vamos a acatar lo que dictamen, cuando den luz verde con ciertas precauciones, recién ahí vamos a empezar a anunciar a la gente que podemos volver” señaló Demarco y agregó que el mensaje de Pablo Ferrari, subsecretario de Deporte, no le quedó claro: “Hay una exhortación, pero ¿cuál es la responsabilidad que le cabe al complejo que abre sus puertas? Y hay mucha gente que hoy en día está jugando al fútbol 5 y partidos amistosos”.

El calendario de la MVD empieza en marzo y este año se jugó una sola fecha antes de la paralización de la actividad. La idea es seguir el protocolo de la SND y habilitar la competencia cuando se pase a la fase de los amistosos. “El fin de semana arrancaron un par de ligas chicas de Paso de la Arena, otra en Melilla, de tres o cuatro divisionales. El riesgo es que si largamos y hay un foco de contacto, afectas a todo el país, solo porque fuiste a jugar a la pelotita”, reflexionó Demarco. 

La Liga América reúne a más de mil futbolistas, 48 equipos de categoría libre y 16 de mayores de 30 años. Empezaron en 2014, habitualmente utilizan las canchas del complejo de Jacksonville y juegan en triple horario. La temporada se desarrolla entre marzo y noviembre, pero este año ni siquiera se llegó a disputar la primera fecha.

Gerardo Escudero, uno de los organizadores de esta liga, dijo a Referí que están pensando en volver a jugar a mediados de junio porque los equipos están presionando. Entre las medidas sanitarias que planifican es habilitar máscaras para los veedores de los partidos y distribuir alcohol en gel. Después, apelan a la conciencia de cada jugador porque en definitiva, es fútbol aficionado: “Nunca tenemos una aglomeración de gente, pero el fútbol en sí tiene ese contacto que es lo que más miedo da”, expresó.

También tienen como referencia a la Liga Universitaria y según Martín Soto, otro de los integrantes de esta liga, “la idea es esperar a que el gobierno dé el ok para poder empezar. Las señales que dan serían para empezar en junio o principio de julio. Estamos tratando de ser responsables”.

La LigaUy, creada en 2012 también reúne a equipos de fútbol 11, fútbol 7 y fútbol 5. En el interior del país se encuentran la Tacua League en Tacuarembó, la 33 League en Treinta y Tres y Liffa Club en Punta del Este, como grupos movilizadores de mucha gente.

La Liffa Club congrega a unos 3 mil jugadores de fútbol 11 y fútbol 7, pero también tiene competencias en otras disciplinas. Su director deportivo Marcelo Villar, explicó que en total movilizan más de 10 mil personas entre sábado y domingo. Tienen un protocolo sanitario propio pero para la vuelta de la actividad siguen el de la SND, por lo que cuando se habilite la fase 2, a fines de mayo, podrían retornar al juego.