Pese al exhorto del Ministerio del Interior para que una nueva marcha en contra de la instalación de la segunda planta de celulosa de UPM se realizara "pacíficamente", la manifestación terminó con incidentes y pintadas a la fachada del Banco República ubicada sobre 18 de julio y Magallanes.
La marcha fue convocada hace varios días a través de las redes sociales bajo la consigna "¡Ni UPM ni su tren!". La fecha fijada fue para este viernes a las 18 horas desde la Intendencia de Montevideo hasta la Universidad de la República.
Aunque al principio se desarrolló de forma pacífica, con una intervención artística en la explanada de la sede del gobierno departamental, mientras los manifestantes marchaban por 18 de Julio un grupo de personas encapuchadas grafitearon la fachada del Banco República que está sobre esa avenida y frente a la plaza de los Bomberos. Además, tiraron bombas explosivas de color.
Los funcionarios que trabajan custodiando el local llamaron a la Policía. "Siempre pasan estas cosas cuando hay marchas", lamentó en diálogo con El Observador uno de los funcionarios de seguridad.
Facundo Gianero
Pero ese no fue el único caso de violencia, ya que también hubo un incidente con un grupo de mujeres que se manifestaban y que atacaron a un hombre que según aseguraron había tocado a una de ellas.
Este jueves, horas antes de que se llevara a cabo la manifestación, el Ministerio del Interior emitió un comunicado en el que exhortó a que la movilización se "desarrolle pacíficamente de acuerdo a la cultura cívica del pueblo uruguayo". Además, informó que brindaría "todas las garantías" para que no hubiera "inconvenientes de ningún tipo".
Facundo Gianero
En setiembre otra marcha en contra de la instalación de UPM terminó con cuatro detenidos. Según informó entonces la cartera de seguridad, los detenidos golpearon a un policía que se encontraba en una garita cumpliendo tareas de 222. Sin embargo, a los pocos días el fiscal Alejandro Machado debió dejar en libertad a los detenidos al no conseguir reunir las pruebas suficientes para determinar qué hizo cada uno de los manifestantes durante la marcha.
Los manifestantes leyeron al final de la marcha de este viernes una proclama en la que aseguraron que el "mega proyecto de UPM" no es "lo que prometen" las autoridades. "Dicen que traerá trabajo, desarrollo y progreso pero sabemos que esas promesas no se cumplen", aseguraron. De esta manera, pusieron como ejemplo la papelera que funciona en Fray Bentos, en la que los "puestos de trabajo" duraron "sólo" en la etapa de construcción de la planta.
"El costo ambiental de una planta de celulosa es altísimo. Desapareció el monte nativo y nuestra fauna", reclamaron, al tiempo que alertaron que en las zonas donde se instalan este tipo de fábricas "aumenta la explotación sexual y la trata de mujeres y niñas".