Productor de Cerro Largo sufrió cuatro ataques de jaurías en dos meses
Además, hubo este fin de semana diversos daños provocados por perros abandonados en varios puntos del país
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29 de julio de 2019 a las 15:31
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Jaurías atacaron en varios puntos del país durante este fin de semana diversos predios rurales matando a decenas de ovinos. En Cerro Largo, próximo a Fraile Muerto, el productor ovino Pedro Screimini sufrió un nuevo ataque de perros abandonados, el cuarto en dos meses.
Según pudo saber El Observador, en Bella Vista (Maldonado), Paysandú y Tacuarembó también se registraron casos con jaurías que atacaron a animales ovinos, generando costos económicos ante un problema que no encuentra solución y parece aumentar cada vez más en la campaña.
Scremini dijo que tuvo el cuarto ataque en dos meses, sumando 29 ovinos muertos, más los heridos en lo que va de ese tiempo. Incluso, aseguró que decidió no realizar más denuncias policiales dado que la Policía “no puede hacer nada”.
Esta vez, el productor había puesto seis ovejas como señuelo para que no llegaran a la majada de cría. Los perros mataron a cuatro e hirieron a las otras dos. “En los grupos de Whatsapp hay alguna denuncia todos los días. Y lo que se ve es apenas una parte porque la mayoría de la gente no dice nada”, aseguró.
El productor se movilizó junto a otros ovejeros de Cerro Largo a principios de julio en la Plaza Constitución de la capital de ese departamento, mostrando ovejas muertas y otras heridas para denunciar este flagelo que los azota casi diariamente.
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Por su parte, el integrante del departamento de Promoción de la Central Lanera Uruguaya, César Niell, comentó a El Observador que hace falta mucha conciencia agropecuaria sobre este tema, cuando la problemática implica “pérdidas de animales, de genética y económicas”.
“Es muy desmotivante y un rubro rentable está siendo jaqueado por los perros y el abigeato, con negocios montados atrás. Al final los productores terminan vendiendo todas las ovejas”, explicó.
Según establece el artículo 125 del Código Rural, “los propietarios ocupantes tienen derecho a matar perros ajenos que se encuentren en sus poblaciones o cerca de sus ganados”, pero la Policía no lo puede hacer. En caso de que la propiedad de los animales sea establecida, será el dueño quien deba reparar el daño causado.
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