Argentina enfrenta desafíos significativos en el ámbito educativo, según los resultados de la prueba PISA 2022, que revelan que más de la mitad de los estudiantes de 15 años en el país no alcanzan el nivel básico en Matemática, Lectura y Ciencias. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) califica este desempeño como parte de un retroceso global "sin precedentes" en los aprendizajes, atribuido en parte al impacto continuo de la pandemia de COVID-19.
En Matemática, Argentina se posiciona en el puesto 66 de 81 países evaluados, con un 72,9% de estudiantes por debajo del nivel básico. A nivel latinoamericano, el país se ubica en el octavo lugar en Matemática, detrás de naciones como Chile, Uruguay y México. Además, en Lectura y Ciencias, el rendimiento también refleja desafíos significativos, colocando a Argentina en el puesto 58 y 60 respectivamente, entre los países evaluados.
A pesar de este preocupante escenario, los resultados se mantienen relativamente estables en comparación con la edición anterior de la prueba en 2018. Jaime Perczyk, ministro de Educación de la Nación, destacó la estabilidad en el desempeño de Argentina, a pesar de la incorporación de más estudiantes al sistema educativo desde 2007.
En el ámbito regional, la Ciudad de Buenos Aires y Córdoba lograron resultados por encima del promedio nacional en Matemática, Lectura y Ciencias, a pesar de experimentar caídas mayores. Mendoza, que participó por primera vez con una muestra propia, obtuvo resultados prácticamente idénticos a la media nacional en las tres áreas evaluadas.
El informe también señala que, a nivel global, los resultados de PISA indican una caída generalizada de rendimiento, con un descenso de 15 puntos en Matemática y 10 puntos en Lectura en los países de la OCDE. Argentina, sin embargo, mantiene sus bajos desempeños sin cambios significativos.
El contexto latinoamericano revela que cuatro de los cinco últimos lugares en el ranking PISA 2022 pertenecen a países de la región, destacando la necesidad de abordar los desafíos educativos de manera integral. Colombia y Perú son mencionados como excepciones positivas, mostrando mejoras en sus resultados.
El análisis de expertos destaca la paradoja de que, a pesar del impacto prolongado de la pandemia y la suspensión prolongada de clases presenciales en la región, Argentina no experimentó un empeoramiento significativo en sus resultados. Esta paradoja, según Axel Rivas, director de la Escuela de Educación de la Universidad de San Andrés, sugiere que las evaluaciones pueden no ser sensibles a cambios a corto plazo o que la región ha logrado sostener sus niveles de aprendizaje.
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