Qué te puede enseñar Sócrates sobre liderazgo

“Tiene más que ver con lo que se ve que Sócrates hace en los diálogos que con lo que dice”, explica el investigador, que toma fragmentos de diferentes diálogos (Critón, Fedón, Fedro) entre Sócrates y sus discípulos para extraer los elementos que debe tener un buen líder y que el filósofo ejerce.

Cómo tratar a los otros desde una posición de liderazgo

Según Carman, el líder para Sócrates es el que hace “parir las verdades”, sin imponer su propia verdad, sino tratando de lograr el desarrollo personal del otro, “que despliegue su potencial”. “El liderazgo es el arte de hacer parir”, dice el investigador y cita al propio Sócrates para explicar el concepto:

“El oficio de ayudar a parir tal como yo lo desempeño, tiene las mismas características que el de las matronas, pero se diferencia en el hecho de que yo examino las almas pero no sus cuerpos. Yo no soy sabio en modo alguno ni he logrado ningún descubrimiento que haya sido engendrado por mi propia alma, sin embargo, los que tienen trato conmigo, aunque algunos parecen muy ignorantes al principio, en cuanto avanza nuestra relación todos hacen admirables progresos. (…) Es evidente que no aprenden nada nunca de mí, pues son ellos mismos quienes descubren y engendran muchos bellos pensamientos”.

Para el filósofo, la forma de influir en los demás es conduciendo las almas mediante el poder de las palabras, y esa influencia va más allá de un efecto emocional, sino más bien como una guía.

“Las transformaciones para Sócrates se generan escribiendo en las almas una a una y eso tiene una onda expansiva. El liderazgo que Sócrates propone es transformar almas, no estructuras”, dice Carman. Y para ello el líder debe ponerse al lado de su equipo para enfrentar los problemas juntos (“se preocupa no solo por el liderazgo eficiente, sino por el ejemplar,”), debe valorar la importancia que tiene un tema de la misma forma que la valoran los otros y debe saber conducir a la gente a buscar líderes mejores que uno mismo, si hay otro que es experto en el tema.

De los diálogos socráticos, Carman también desprende actitudes que debe tener un líder en lo personal:

• Debe conocerse a sí mismo 
• Toma decisiones en base a la razón y utiliza la pasión para ejecutarlas
• Se prepara para los momentos difíciles y sabe “remarla” cuando hace falta
• Se equivoca pero lo reconoce, repara los errores y sigue adelante
• Se obsesiona un poco con los problemas a resolver
• Tiene la mente abierta, escucha a todos, principalmente a los más ancianos.
• También se deja liderar por otros, porque nadie es líder absoluto.