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Se sacan chispas por ANCAP
Discusión sobre acuerdo con Venezuela derivó en cuestiones ideológicas y críticas del pasado
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19 de agosto de 2015 a las 05:00
Una chispa bastó para que la sesión del Senado de ayer, que se preveía simple, se transformara rápido en un debate ideológico sobre las empresas públicas y si deben dar ganancias.
También quedó claro que de aquí en más las bancadas responderán a todo lo que consideren una acusación.
El proyecto llegó de comisión votado por unanimidad lo que hacía esperar un trámite rápido. Se trataba de votar un acuerdo entre ANCAP y Pdvsa para cancelar una deuda y crear un sistema de exportación para productores uruguayos.
El lunes, en la bancada del Frente Amplio -según supo El Observador- hubo advertencias sobre que el debate podía salirse de curso al tratarse de ANCAP y de Venezuela. Y así pasó.
En el medio de la sesión se habló de la corrupción de los gobernantes venezolanos, el peso del amiguismo en las relaciones internacionales, "la mochila" de los blancos que cuando gobernaron (1990-1995) propusieron vender las empresas estatales; y se llegó hasta mencionar la opinión de Tabaré Vázquez, que en plena crisis del año 2002, estuvo a favor de ir al default, camino que el presidente Jorge Batlle no tomó.
El debate parecía transcurrir con un espejo retrovisor.
La discusión no estuvo exenta de lo que ocurre en ANCAP, la empresa pública de mayor facturación, cuyos números empezaron a ser revisados por una comisión investigadora.
Finalmente la cámara alta votó que Rentas Generales le preste a ANCAP US$ 262 millones para adelantar la cancelación de una deuda con la petrolera venezolana que ronda los US$ 420 millones.
El sistema acordado entre los presidentes Vázquez y Nicolás Maduro estableció además la creación de un fideicomiso donde intervendrá el banco Bandes; el pago a los exportadores uruguayos por ventas concretadas por unos US$ 70 millones; y una especie de trueque con la posibilidad de vender alimentos (260 mil toneladas de pollos, queso, leche, arroz y soja) a cambio de petróleo en principio hasta fin de año por US$ 300 millones.
En filas blancas, Jorge Larrañaga y su compañero Carlos Camy apuntaron al aspecto político y los senadores del Frente se incomodaron en sus sillones.
"Aquí un gobierno socialista le aplica las reglas más duras del capitalismo a otro gobierno socialista", dijo el líder de Alianza Nacional. Camy acotó que el gobierno "progresista" del Frente "se está aprovechando" de un país que necesita dinero y alimentos.
El blanco Luis Alberto Heber también fue directo: el gobierno de Venezuela "es corrupto del primero al último de los gobernantes", afirmó. Los blancos, además, dijeron que no tienen "certezas" que Venezuela le pague a los productores uruguayos lo adeudado.
Leonardo de León (Lista 711 y quien fue director de Alcoholes del Uruguay) respondió que Uruguay "no está apretando" a Venezuela para lograr este acuerdo que "es beneficioso para los dos países".
Desde la presidencia del Senado –en sustitución de Raúl Sendic que tiene gripe–, Lucía Topolansky pidió que la oratoria se remitiera al proyecto. "No tuve éxito", comentó en un momento al reiterar el pedido.
Para Otheguy, con la oposición se parte de "concepciones distintas". "No se entiende el aporte de las empresas estatales porque simplemente no comparten que el Estado tenga empresas".
Luis Lacalle Pou, que no estaba anotado para hablar, pidió la palabra enseguida. "Hay que escuchar que se puede fundir una empresa y decir que es por el bien del país", disparó. "Eso lo paga Juan Pueblo y no el gobernante", dijo.
Opinó que las empresas públicas deben ser funcionales al país y "aquí después de 10 años de bonanza entendemos que vale fundir una empresa pública".
Lacalle Pou afirmó que el negocio con Venezuela, "es artificial" y "propio de un acuerdo de tuya y mía entre dos presidentes".
Al final y a pesar de las críticas, todos votaron el acuerdo que ya había sido aprobado en Diputados por "ser beneficioso" para Uruguay.
El directorio de ANCAP presidido por José Coya irá hoy por primera vez a la comisión investigadora del Senado.
Recibirá formalmente las 12 denuncias que presentó el Partido Nacional.
También quedó claro que de aquí en más las bancadas responderán a todo lo que consideren una acusación.
El proyecto llegó de comisión votado por unanimidad lo que hacía esperar un trámite rápido. Se trataba de votar un acuerdo entre ANCAP y Pdvsa para cancelar una deuda y crear un sistema de exportación para productores uruguayos.
El lunes, en la bancada del Frente Amplio -según supo El Observador- hubo advertencias sobre que el debate podía salirse de curso al tratarse de ANCAP y de Venezuela. Y así pasó.
En el medio de la sesión se habló de la corrupción de los gobernantes venezolanos, el peso del amiguismo en las relaciones internacionales, "la mochila" de los blancos que cuando gobernaron (1990-1995) propusieron vender las empresas estatales; y se llegó hasta mencionar la opinión de Tabaré Vázquez, que en plena crisis del año 2002, estuvo a favor de ir al default, camino que el presidente Jorge Batlle no tomó.
El debate parecía transcurrir con un espejo retrovisor.
La discusión no estuvo exenta de lo que ocurre en ANCAP, la empresa pública de mayor facturación, cuyos números empezaron a ser revisados por una comisión investigadora.
Finalmente la cámara alta votó que Rentas Generales le preste a ANCAP US$ 262 millones para adelantar la cancelación de una deuda con la petrolera venezolana que ronda los US$ 420 millones.
El sistema acordado entre los presidentes Vázquez y Nicolás Maduro estableció además la creación de un fideicomiso donde intervendrá el banco Bandes; el pago a los exportadores uruguayos por ventas concretadas por unos US$ 70 millones; y una especie de trueque con la posibilidad de vender alimentos (260 mil toneladas de pollos, queso, leche, arroz y soja) a cambio de petróleo en principio hasta fin de año por US$ 300 millones.
Corruptos
El senador Ruben Martínez Huelmo (Espacio 609) explicó el alcance del acuerdo con Venezuela y el colorado José Amorín fue el primero en marcar los "niveles de corrupción" que tiene el país caribeño.En filas blancas, Jorge Larrañaga y su compañero Carlos Camy apuntaron al aspecto político y los senadores del Frente se incomodaron en sus sillones.
"Aquí un gobierno socialista le aplica las reglas más duras del capitalismo a otro gobierno socialista", dijo el líder de Alianza Nacional. Camy acotó que el gobierno "progresista" del Frente "se está aprovechando" de un país que necesita dinero y alimentos.
El blanco Luis Alberto Heber también fue directo: el gobierno de Venezuela "es corrupto del primero al último de los gobernantes", afirmó. Los blancos, además, dijeron que no tienen "certezas" que Venezuela le pague a los productores uruguayos lo adeudado.
Leonardo de León (Lista 711 y quien fue director de Alcoholes del Uruguay) respondió que Uruguay "no está apretando" a Venezuela para lograr este acuerdo que "es beneficioso para los dos países".
Desde la presidencia del Senado –en sustitución de Raúl Sendic que tiene gripe–, Lucía Topolansky pidió que la oratoria se remitiera al proyecto. "No tuve éxito", comentó en un momento al reiterar el pedido.
Fundida
El debate volvió a calentarse cuando el senador Marcos Otheguy (Lista 711) preguntó si ANCAP "¿siempre tiene que dar ganancias?. ¿Por qué? Lo importante, dijo, es que cierren las cuentas del país, la cuenta social y la productiva, en el entendido que ANCAP tiene que cumplir "con objetivos superiores" definidos por el Poder Ejecutivo. Nadie, si no es una empresa pública, invertirá en electrificación rural porque simplemente no es rentable, afirmó.Para Otheguy, con la oposición se parte de "concepciones distintas". "No se entiende el aporte de las empresas estatales porque simplemente no comparten que el Estado tenga empresas".
Luis Lacalle Pou, que no estaba anotado para hablar, pidió la palabra enseguida. "Hay que escuchar que se puede fundir una empresa y decir que es por el bien del país", disparó. "Eso lo paga Juan Pueblo y no el gobernante", dijo.
Opinó que las empresas públicas deben ser funcionales al país y "aquí después de 10 años de bonanza entendemos que vale fundir una empresa pública".
Lacalle Pou afirmó que el negocio con Venezuela, "es artificial" y "propio de un acuerdo de tuya y mía entre dos presidentes".
Al final y a pesar de las críticas, todos votaron el acuerdo que ya había sido aprobado en Diputados por "ser beneficioso" para Uruguay.
Va el directorio
El directorio de ANCAP presidido por José Coya irá hoy por primera vez a la comisión investigadora del Senado.
Recibirá formalmente las 12 denuncias que presentó el Partido Nacional.
