Cuando orille mayo, Juan Sartori despejará la incógnita y anunciará qué camino recorrerá en la interna blanca. Tras reunirse con Laura Raffo y Álvaro Delgado, el senador-empresario reunió a los suyos en la parrillada La Perdiz de Punta Carretas para informarles que se tomará unos días y que las tres opciones seguían arriba de la mesa.
Las posibilidades son, a esta altura, archiconocidas: que sea precandidato, que apoye al exsecretario de la Presidencia o que se vuelque por la economista. En marzo, cuando se juntó con el edil fernandino Adolfo Varela a ver fútbol en Maldonado, manejaba una cuarta: no hacer nada. Pero ahora, en abril, esa opción salió del menú y "Todo por el pueblo" registró la agrupación nacional y varias departamentales ante la Corte Electoral.
Con ese movimiento, el sector confirmó que participará en las internas, aunque sus dirigentes aún no saben cómo serán las listas que distribuirán: si sus caras irán junto a la de Sartori o si también compartirán cabezal con Delgado o Raffo.
En la cena, en la que estuvieron, entre otros, Alem García y Martín Elgue, pero no el senador suplente Juan Straneo, los dirigentes le reiteraron que lo mejor es que sea precandidato ya que si bien es difícil que gane la interna porque Delgado está “muy consolidado”, la postulación maximiza las posibilidades de obtener convencionales departamentales que pueden ser claves para definir diputados e intendentes.
“Estoy convencido que si Juan no es precandidato, el partido va a votar peor en junio”, dijo Elgue a El Observador. El dirigente enfatizó en que Sartori les transmitió dudas y reparos, y que la decisión final era “personal”.
Un pensamiento similar al de Elgue tienen dirigentes que integran el comando de Delgado. Entienden que “lo ideal” para los blancos es que Sartori largue y que por eso “no hay que apurarlo”.
El razonamiento tiene como premisa que la votación de junio no es obligatoria y que en un contexto de caída general de la participación, el hecho de que la interna sea más competitiva hará que los sectores traccionen más en busca de votos.
En 2019, 457.376 personas votaron en la interna blanca. De ellas, 94.581 lo hicieron por Sartori. El número posicionó al empresario segundo por delante de Jorge Larrañaga que obtuvo 80.524.
Foto: Leonardo Carreño.
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En el sartorismo señalan que buena parte de esos votos fueron de personas que no forman parte del tipo ideal del Partido Nacional. Microdatos electorales procesados por El Observador muestran que Sartori le ganó a Lacalle Pou en Casabó y Pajas Blancas (Montevideo). A su vez, fue el más votado en Mercedes, la capital de Soriano. En ese mismo departamento también ganó en algunas localidades como San Dios y Rincón del Cololó.
Más allá de los votos de “fuera de la pecera”, dirigentes afines a Delgado agregan que como la interna no tiene disputas significativas (las encuestas ubican a Raffo segunda a varios cuerpos de distancia), “cuanto antes” se movilice a la militancia mejor. “En octubre el voto es mucho más firme si esa persona ya votó en junio”, razonó una dirigente nacionalista.
En 2019, los blancos multiplicaron por 1,5 su votación en las nacionales (recibieron 696.452 sufragios), mientras que el Frente Amplio, cuya interna decantó rápidamente hacia Daniel Martínez, multiplicó por 3,7 (pasó de 255.072 a 949.376).
La necesidad de tener una buena votación en la interna fue explicitada esta semana por Delgado durante una gira en Treinta y Tres. En un acto en Isla Patrulla, el precandidato llamó a votar el 30 de junio para que la coalición empiece a "ganar la elección".
"Me interesa que el Partido Nacional vuelva a ser el más votado en las internas. Es una señal y un mensaje", dijo.
I. Guimaraens
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Los blancos vienen superando a la izquierda en las últimas tres elecciones de este tipo. En 2009 la votación fue pareja (490 mil a 440 mil), mientras que en 2014 la distancia fue de unos 117 mil votos (418 mil a 301 mil), y en 2019 aún mayor: 200 mil sufragios.
Con Fernando Pereira a la cabeza, el Frente Amplio se puso como objetivo volver a tener 400 mil votos en la interna para evitar que el multiplicador de octubre sea tan grande. Informalmente, en la Huella de Seregni dicen que un buen junio evitará volver a repetir la experiencia del “susto despertando al mamado”.
Pero la lectura de Sartori como candidato para elevar el piso de la interna no es unánime entre los blancos. Dirigentes afines a Raffo relativizan la capacidad del senador-empresario para recoger adhesiones que incidan en el porcentaje de votación.
El diputado Juan Martín Rodríguez señaló a El Observador que no cree que Sartori “cambie la interna” y consideró que en términos generales habrá una baja en la votación pese a que el Frente Amplio “puede votar más” ya que en 2019 registró un mínimo.
En rueda de prensa, Raffo dijo este jueves que tras la conversación con Sartori quedaron “todas las posibilidades abiertas” y que ella está dispuesta a hacer “las alianzas que se puedan hacer”.
Los sectores que impulsan a la economista perciben, por otro lado, que Delgado puede ser el principal beneficiado en una candidatura de Sartori, ya que aumentará la competencia sobre ellos y Jorge Gandini (posicionado tercero).
