El Partido Justicialista (PJ) de la provincia de Buenos Aires puso primera y arrancó con el diseño de la campaña de cara a las elecciones legislativas nacionales del 26 de octubre. Con la mira puesta en repetir la actuación del 7 de septiembre, el peronismo provincial se fijó un objetivo claro: elevar la participación electoral al menos cinco puntos para alcanzar un 70% del padrón.
“Es el número mágico”, repiten los amadores bonaerenses. Entienden que ese porcentaje les va a permitir mantener la ventaja sobre La Libertad Avanza (LLA) en el principal distrito electoral.
En ese marco, desde el entorno de Axel Kicillof le confirmaron a El Observador que la estrategia electoral no variará, por lo menos en la provincia de Buenos Aires, respecto del enfoque territorial. La intención será confrontar modelos, la valorización de la gestión y no interferir con los "errores no forzados, internas y presuntos escándalos de corrupción" de La Libertad Avanza.
Bajo ese esquema, ya conocido por el PJ bonaerense, los intendentes, figuras clave en el triunfo provincial, volverán a ser protagonistas y acompañarán al gobernador en la campaña de Fuerza Patria. Kicillof, por su parte, también se sumará a las actividades como sucedió durante los últimos meses.
Hay datos que son tomados como centrales por el PJ de cara a la campaña. El escenario de profunda incertidumbre económica, la caída del consumo y la recesión que impacta de lleno en el conurbano, son apreciadas como eje central de la discusión a futuro.
En ese sentido, desde el PJ no descartan que a partir del jueves, con el fin del secreto de sumario en la causa ANDIS, los escándalos que tocan directamente a la figura de Karina Milei vuelvan a primera plana. Así las cosas, con ese combo en mente, el peronismo volverá a usar un mensaje directo: el voto del 26 de octubre representa un freno a Javier Milei y sus políticas.
El peso del voto de los extranjeros
Un factor a considerar para el peronismo es la ausencia de los votantes extranjeros en las próximas elecciones nacionales. En la provincia de Buenos Aires, más de un millón de extranjeros estuvieron habilitados para votar en los comicios locales. De estos, 255.758 personas participaron el 7 de septiembre. Este segmento del padrón, favorable al peronismo —con un 59,06% para Axel Kicillof en 2023—, no emitirá su sufragio el 26 de octubre. Los extranjeros pueden votar para cargos provinciales y municipales, pero la ley 5109 no los habilita para comicios nacionales
Boleta Única de Papel
La campaña del PJ también aborda un desafío pedagógico: la implementación de la Boleta Única de Papel (BUP). Los candidatos coinciden en la necesidad de explicar a la gente cómo votar, especialmente a muchos electores mayores, acostumbrados a recibir la boleta en su casa. Senadores como Mariano Recalde ya recorren estaciones de subte con gigantografías de la BUP para educar a los ciudadanos. Los intendentes, con su probada tracción municipal, asumen un rol fundamental en esta tarea de difusión en las semanas previas a la elección.
Encuestas y optimismo en el peronismo
Los estrategas peronistas encuentran motivos para el optimismo. Una encuesta de CB Consultora, realizada entre el 8 y 12 de septiembre, muestra a Jorge Taiana, primer candidato a diputado nacional por la provincia, con seis puntos de ventaja sobre José Luis Espert.
La misma encuesta proyecta una participación del 82% de los bonaerenses, superando en 17 puntos el 65% real del 7 de septiembre. Esta brecha ofrece una oportunidad para alcanzar el 70% de concurrencia fijado como meta. El peronismo busca activar a aquellos que expresan su intención de votar, pero no lo hicieron en septiembre, un segmento que representa casi un cuarto del electorado y que puede definir la elección del 26 de octubre.