Contexto
¿Por qué la UTA convoca a un paro?
La UTA decidió realizar un paro de 24 horas a nivel nacional debido a la falta de avances en las negociaciones salariales con las empresas de transporte y el vencimiento de la conciliación obligatoria. El gremio había solicitado un aumento significativo para los choferes, pero las propuestas presentadas por las empresas no fueron satisfactorias. Mientras que las cámaras empresariales ofrecieron un incremento remunerativo inferior al 6% y bonos no remunerativos, la UTA consideró que la propuesta era insuficiente, especialmente ante una inflación superior al 3% mensual.
¿Cuál es el origen del conflicto?
El conflicto salarial comenzó hace varios meses, pero se intensificó tras el fracaso de la última reunión de conciliación obligatoria, convocada por el Ministerio de Trabajo. Desde marzo, la UTA ha participado en diversas reuniones sin obtener una respuesta favorable por parte de las empresas del sector, lo que llevó a la convocatoria de este paro. Los trabajadores exigen un salario básico de $1.700.000, lo que contrasta con la oferta empresarial de mantener los sueldos actuales y añadir bonos no remunerativos.
¿Qué efectos tendrá el paro?
El paro afectará a los colectivos de corta y media distancia en todo el país, lo que podría impactar a más de 9 millones de pasajeros, especialmente en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). En las últimas semanas, las negociaciones se fueron estancando debido a la falta de acuerdo entre las partes, lo que obligó al gremio a tomar esta medida de fuerza como respuesta a la falta de propuestas concretas.
¿Cuál es la situación económica del sector?
El sistema de transporte público enfrenta un desequilibrio entre tarifas y subsidios, lo que afecta directamente a las empresas y sus posibilidades de otorgar aumentos salariales. Según datos de las cámaras empresariales, el sistema de transporte público en el AMBA se financia con un 70% de subsidios estatales y un 30% con las tarifas de los pasajeros. Sin embargo, los costos operativos siguen superando las tarifas, lo que ha generado un déficit en el sector.
¿Cómo está influyendo el Gobierno en las negociaciones?
El Gobierno ha intentado mediar en las negociaciones a través de la Secretaría de Trabajo, encabezada por el secretario Julio Cordero. Sin embargo, a pesar de las gestiones, el conflicto no ha llegado a una resolución, y el Gobierno se ha mostrado reacio a intervenir directamente en el conflicto salarial, ya que se trata de una negociación entre privados. No obstante, se espera que se logre un acuerdo en las audiencias programadas para evitar que el paro se lleve a cabo.
¿Qué espera la UTA del Gobierno y las empresas?
El gremio de la UTA ha calificado las ofertas empresariales como una “farsa prolongada” y ha manifestado que no tolerará más dilaciones en la negociación. La UTA también ha advertido que la falta de seriedad en las negociaciones pone en peligro no solo el poder adquisitivo de los trabajadores, sino también la calidad del servicio público, que se sustenta únicamente en el esfuerzo de los empleados. La UTA espera que el Gobierno y las empresas asuman sus responsabilidades para resolver el conflicto de manera justa y sin afectar a los trabajadores.
¿Qué se espera para los próximos días?
Este jueves 1 de mayo, la ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, encabezará una conferencia de prensa para anunciar los resultados de las negociaciones y el impacto de este conflicto dentro del marco de las políticas de transporte del Gobierno. La resolución de este conflicto es clave para el equilibrio del sistema de transporte y para evitar nuevas medidas de fuerza en el futuro cercano. Las partes aún tienen una oportunidad para resolver el conflicto antes del paro, con una nueva audiencia prevista para el lunes 5 de mayo.
Cómo sigue
El 6 de mayo, si no se llega a un acuerdo, la UTA llevará a cabo el paro de 24 horas en todo el país. Este paro afectará a millones de pasajeros en el AMBA y otras zonas del país. Las autoridades nacionales, incluyendo la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y la Secretaría de Trabajo, continuarán con sus esfuerzos para mediar entre las partes en conflicto y evitar mayores perjuicios a la población.