La catedral de València será el escenario de una misa funeral en memoria de las 222 víctimas mortales de las inundaciones provocadas por la Dana del pasado 29 de octubre.
La ceremonia, organizada por el Arzobispado de València, contará con la presencia de los Reyes de España, quienes encabezarán el homenaje en este solemne acto. Sin embargo, la ausencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de su Gabinete ha generado críticas entre diversos sectores.
Un Gobierno ausente en un momento clave
La misa comenzará a las 19:00 horas, y aunque se había especulado con la posibilidad de que algún ministro asistiera, la única representación oficial del Ejecutivo será Pilar Bernabé, delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana.
La agenda oficial del presidente del Gobierno señala que, a las 17:00 horas, Pedro Sánchez tendrá una reunión con Andrew Parsons, presidente del Comité Paralímpico Internacional, en el Complejo de la Moncloa, pero no detalla ninguna actividad posterior. Por su parte, la mayoría de los ministros no tienen compromisos oficiales programados para la tarde de este lunes, lo que añade controversia a su ausencia en un acto de este impacto social.
El Partido Popular estará presente
En contraste, la misa contará con la asistencia de destacados líderes políticos, como el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; y el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón.
Los Reyes, por tercera vez con los afectados
Esta será la tercera ocasión en que los Reyes visitan València en relación con las inundaciones, después de haber acudido a las zonas más afectadas los pasados 3 y 19 de noviembre. Su presencia subraya su continuo apoyo a las comunidades afectadas y la importancia de rendir homenaje a las víctimas de las riadas.
Críticas de los familiares
Ante las críticas de algunos familiares que aseguraron no haber sido informados ni invitados al acto, el Arzobispado de València dispuso un servicio de autobuses desde varias localidades, incluyendo Alaquàs, Aldaia, Torrent y Catarroja, entre otras. Además, se ha habilitado un teléfono de contacto y las parroquias locales están facilitando las acreditaciones necesarias para asistir al evento.
Un acto que reúne y divide
El homenaje, que busca honrar la memoria de las víctimas y ofrecer consuelo a sus familiares, pone de relieve un contraste político. Mientras que la presencia de los Reyes y de líderes de la oposición enfatiza la importancia del acto, la ausencia del Ejecutivo central genera cuestionamientos sobre su compromiso en tragedias de esta magnitud.
La catedral de València se convertirá, una vez más, en el centro de una comunidad que busca recordar y honrar a quienes perdieron la vida en las devastadoras inundaciones, mientras el debate sobre las responsabilidades políticas sigue abierto.