La Bañeza, en León, amaneció este miércoles sumida en la tristeza y la conmoción tras confirmarse, en la noche del martes, la muerte de un vecino muy querido: Abel Ramos, de 35 años, voluntario independiente que perdió la vida mientras prestaba labores de auxilio en el violento incendio que arrasa el sur de la provincia, tras cruzar desde Zamora.
Lejos de formar parte del operativo oficial de extinción, Abel —amante del motor y vicepresidente del Moto Club Bañezano— actuaba por iniciativa propia.
Según confirmó el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, Ramos y otro vecino de 36 años, que resultó herido con quemaduras, intentaban "defender sus municipios con la mejor de sus voluntades" utilizando una motoniveladora. Pero el fuego, "traicionero", se volvió contra ellos.
Atrapado entre dos lenguas de fuego
El fatídico suceso ocurrió el martes en la zona entre Nogarejas y Quintana y Congosto, a la altura del kilómetro 12 de la carretera L-125. De forma repentina, dos lenguas de fuego se unieron, atrapando a ambos hombres en un escenario caótico e incontrolable.
Ramos, natural de una localidad cercana pero residente en La Bañeza, era muy conocido y participaba activamente en la vida social del municipio. De hecho, el pasado fin de semana había asistido al Gran Premio de La Bañeza, evento que organiza el club al que pertenecía y al que dedicó incontables horas de trabajo.
El impacto en La Bañeza: "una huella imborrable"
La noticia de su fallecimiento sacudió a toda la comarca. “Estamos viviendo días muy largos, la situación está muy mal”, señalan fuentes municipales. La pérdida de Abel dejó una huella profunda entre familiares, amigos y vecinos, especialmente en el entorno del motociclismo, que expresaron su dolor en redes sociales.
“El fuego que azota tu querida tierra leonesa ha quebrado tu vida ejerciendo de voluntario para evitar males mayores”, escribía un usuario. “Con Abel se va parte del Moto Club Bañezano. Deja una huella imborrable”.
“La vida no ha sido justa contigo”, añadía otro, “te has ido demasiado pronto, pero tu memoria siempre vivirá entre quienes amamos este gran deporte”.
El incendio, originado el pasado domingo por causas aún desconocidas, continúa activo en nivel 2 del Índice de Gravedad Potencial (IGR) y ya obligó a evacuar a 23 municipios de la zona sur de León.
Más de 4.300 personas fueron desalojadas, muchas de ellas trasladadas a albergues provisionales habilitados por Cruz Roja en La Bañeza y Astorga.
Por si fuera poco, la comarca de El Bierzo también sufre el azote del fuego, especialmente en Llamas de Cabrera y Yeres. Este último incendio llegó incluso a afectar al entorno de Las Médulas, Patrimonio de la Humanidad.
FUENTE: EL OBSERVADOR