El estrecho de Ormuz es, sin duda, uno de los puntos más críticos de la geopolítica mundial por su ubicación estratégica entre Irán y Omán conecta el Golfo Pérsico con el resto del océano Índico, siendo la principal ruta de tránsito de petróleo. Cada día, más de 15 millones de barriles de petróleo pasan por esta vía, lo que representa el 20% del comercio mundial de crudo.
Sin embargo, este estrecho también se ha convertido en el epicentro de las tensiones entre Estados Unidos e Irán, especialmente a raíz de los ataques militares y las confrontaciones en la región.
La importancia del Estrecho de Ormuz
El estrecho de Ormuz no solo es una arteria vital para el transporte de recursos energéticos, sino que también es un punto neurálgico en la lucha por la supremacía en el Medio Oriente. A lo largo de los años, Irán consideró el estrecho de Ormuz como su "puerta" hacia el resto del mundo.
Los ataques de Estados Unidos a Irán, giraron en torno a la posibilidad de que Irán intente interrumpir el paso por Ormuz, un recurso clave para los países productores de petróleo del Golfo Pérsico.
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Vista general de las costas de Khasab en el Estrecho de Ormuz, Musandam, Omán. EFE
Los ataques de Estados Unidos y las amenazas sobre Ormuz
La relación entre Irán y Estados Unidos fue tensa desde hace décadas, pero en los últimos años, las hostilidades alcanzaron un nivel alarmante. En particular, el estrecho de Ormuz estuvo en el centro de varios episodios de agresión y confrontación. En 2019, Estados Unidos acusó a Irán de atacar petroleros en el estrecho, lo que aumentó la presión internacional para frenar las acciones del régimen iraní.
Estos ataques a buques petroleros fueron interpretados como una posible advertencia por parte de Irán, que, al tener control sobre el estrecho, podría, en teoría, cerrar esta vía estratégica como forma de represalia ante las sanciones económicas de Estados Unidos y sus aliados.
La amenaza de bloquear el estrecho de Ormuz es una de las cartas más fuertes de Irán en el escenario geopolítico, dada su capacidad de afectar directamente los mercados mundiales de petróleo.
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La continúa tensión
El estrecho de Ormuz es esencial para el comercio mundial de petróleo. Un conflicto prolongado en la región podría tener consecuencias devastadoras para los mercados energéticos internacionales.
Si Irán decidiera bloquear el estrecho, los precios del petróleo podrían dispararse debido a la escasez de oferta, lo que afectaría a países de todo el mundo, desde economías en desarrollo hasta grandes potencias industriales.
La seguridad de este paso también tiene implicaciones para las relaciones internacionales. Las tensiones entre Estados Unidos e Irán no solo involucran a los dos países, sino que arrastran a aliados y actores internacionales. Los aliados de Estados Unidos, principalmente los países de la OTAN y los países del Golfo, tienen un interés directo en mantener abierto el estrecho de Ormuz, mientras que países como China y India, grandes importadores de petróleo de la región, también tienen un interés en la estabilidad de esta ruta.