10 de mayo 2025 - 9:00hs

El informe anual de la CIDH es una radiografía del clima político, económico y social del continente americano. Sus 1.280 páginas sintetizan el minucioso trabajo hecho por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Entrevistas, denuncias, investigaciones, audiencias y pedidos de información a los distintos gobiernos de la región, compilados en un larguísimo documento que la CIDH acaba de publicar.

El resultado de la radiografía no es demasiado alentador sobre el respeto a las libertades y los derechos humanos. Si bien es imposible (e incorrecto) hacer una lectura uniforme del continente americano, a las autoridades de la Comisión les preocupa la tendencia. ¿Cuál? La de un retroceso en la cultura democrática. "La región enfrenta enormes desafíos. Una de las preocupaciones más serias es el escepticismo, o incluso el negacionismo, sobre la eficacia de los marcos de derechos humanos", afirma el presidente de la CIDH, José Luis Caballero.

El académico mexicano lo plantea en un largo diálogo con El Observador USA. En la charla hay un sólo tema vedado: México. Los funcionarios de la CIDH tienen prohibido opinar sobre su país natal. La Comisión forma parte de la Organización de los Estados Americanos (OEA). Es su brazo defensor de los derechos humanos.

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José Luis Caballero es un prestigioso abogado doctorado en Derecho. Tiene 60 años y, desde hace 25, se desempeña como investigador de la Universidad Iberoamericana, en Ciudad de México. En 2011, participó de una reforma constitucional orientada a garantizar el acceso de todas las personas en México a los derechos humanos reconocidos en la Carta Magna y en los tratados internacionales. Esa es su especialidad.

Si bien el informe de la Comisión se refiere al 2024, el aluvión de Donald Trump se cuela en la conversación con Caballero. La coronación del jefe MAGA en EEUU va más allá de un resultado electoral aislado. Y Caballero no elude el elefante en la sala. "Estados Unidos tiene que respetar la libertad de expresión y la libertad académica", advierte el nuevo presidente de la CIDH.

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La conducción de la Comisión Interamericana, brazo defensor de los Derechos Humanos de la OEA, debate durante una sesión en Washington.

La conducción de la Comisión Interamericana, brazo defensor de los Derechos Humanos de la OEA, debate durante una sesión en Washington.

También repasa el (catastrófico) panorama de los derechos humanos en Venezuela, Cuba y Nicaragua. Para la Comisión, el chavismo ya califica como terrorismo de Estado. Caballero, a su vez, señala las luces y sombras de la Argentina, Uruguay y El Salvador.

Retroceso de los derechos humanos en muchos países

¿Qué balance puede hacer sobre los derechos humanos en la región en el último año?

En términos generales, hay mucha riqueza de datos y un trabajo importante de la Comisión, tanto en términos de estadísticas como en logros alcanzados. Por ejemplo, en 2023 logramos 100 informes de fondo sobre rezago procesal, y en 2024 ya alcanzamos 121 informes de fondo. Esto refleja un importante avance en el acceso a la justicia interamericana. Además, se destacan las visitas a países como Guatemala y Colombia. El informe no solo aporta datos, sino que también ofrece un análisis profundo de la situación de los derechos humanos en la región. Temas como la seguridad ciudadana, el debilitamiento de la institucionalidad democrática y la movilidad humana, entre otros, son abordados con un análisis detallado, lo que hace que el informe sea valioso tanto en términos de datos como de reflexión.

Los estados deben entender que las soluciones a los problemas no deben pasar por debilitar la democracia ni los derechos humanos. Los estados deben entender que las soluciones a los problemas no deben pasar por debilitar la democracia ni los derechos humanos.

Antes de entrar en la realidad de cada país, ¿considera que hubo un retroceso general de los derechos humanos y los valores democráticos?

Sí, hay retrocesos en muchos estados. La región enfrenta enormes desafíos, y una de las preocupaciones más serias es el escepticismo, o incluso el negacionismo, sobre la eficacia de los marcos de derechos humanos. En muchos países, se está tomando una postura de soluciones efectistas que no respetan los derechos de las personas. Este es un desafío subregional, que afecta tanto a América del Norte como a América Latina y el Caribe. Los estados deben entender que las soluciones a los problemas no deben pasar por debilitar la democracia ni los derechos humanos.

¿Se refiere a Estados Unidos y al gobierno de Donald Trump con su planteamiento sobre el debilitamiento de la gobernanza global?

Sí, creo que es una tendencia que se ha dado en varios países, no solo en Estados Unidos. Lo que la Comisión debe hacer es alertar ante cualquier política pública que ponga en riesgo los derechos humanos, independientemente del signo del gobierno. Estados Unidos ha puesto un enorme desafío a la cooperación internacional, especialmente con los recursos destinados a la cooperación. La Comisión Interamericana tiene que alertar sobre cualquier política que busque debilitar los derechos humanos, y ante cada pronunciamiento que apunte a reducir las libertades fundamentales, debemos salir a recordarle a la comunidad internacional que ese no es el camino.

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El presidente de la CIDH en una reunión con representantes de organizaciones y comunidades en Cobán, Alta Verapaz, Guatemala, en julio de 2024

El presidente de la CIDH en una reunión con representantes de organizaciones y comunidades en Cobán, Alta Verapaz, Guatemala, en julio de 2024

Terrorismo de Estado en la Venezuela chavista

Sobre Venezuela, el informe habla de terrorismo de Estado. ¿Qué significa esta calificación y qué implicaciones tendría para el régimen de Nicolás Maduro?

La Comisión Interamericana calificó la reacción del régimen venezolano como terrorismo de Estado en el contexto de las elecciones del 28 de julio del año pasado. Este calificativo refleja el intento del régimen de perpetuarse en el poder a toda costa, incluso a través de prácticas violentas y represivas. La calificación de terrorismo de Estado implica una violación grave de los derechos humanos, y lo que está en juego es la legitimidad de un gobierno que no solo utiliza el poder para mantenerse en el cargo, sino que también atenta contra la integridad de las personas. Además, la Comisión ha emitido más de 30 medidas cautelares para proteger a líderes, periodistas, defensores de derechos humanos y otras personas en riesgo en Venezuela.

¿Qué consecuencias podría tener para el régimen venezolano después del fraude electoral del año pasado?

La comunidad internacional debe reflexionar sobre la legitimidad de un gobierno que utiliza el terrorismo de Estado para mantenerse en el poder. La Comisión Interamericana ha señalado que no puede haber elecciones legítimas cuando se usan prácticas tan graves y se ponen en riesgo las vidas de las personas. Este es un mensaje claro para la comunidad internacional, que debe actuar para evitar que estos regímenes continúen violando los derechos humanos.

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Para Cabellero, el gobierno de Maduro

Para Cabellero, el gobierno de Maduro "no solo utiliza el poder para mantenerse en el cargo, sino que también atenta contra la integridad de las personas".

El informe enumera persecuciones a autoridades electorales en la última votación en Veneziela. ¿Cuál es su opinión sobre las legislativas que se realizarán el 25 de mayo?

La Comisión está muy alerta ante la situación en Venezuela. Hay un mecanismo de seguimiento que se ha establecido, y la Comisión continuará monitoreando las prácticas que puedan poner en peligro la democracia. La falta de garantías democráticas en el país hace que la situación siga siendo una gran preocupación. La Comisión estará atenta a cualquier intento de perpetuar el autoritarismo y la represión en Venezuela.

¿Ya no hay democracia en Venezuela?

Así es. La situación en Venezuela es claramente que no hay democracia.

Las libertades en riesgo en EEUU

En el informe denuncian la persecución a la prensa independiente y el cierre de medios por parte del chavismo. La política actual de Estados Unidos que desfinancia o cierra medios internacionales puede beneficiar a Maduro?

Sí, y nosotros pues estamos advirtiéndolo desde la perspectiva del trabajo con Estados Unidos. Estados Unidos tiene una responsabilidad internacional en la libertad de expresión. Estados Unidos también no puede caer en censura en su propio país. Estados Unidos tiene que respetar la libertad de expresión, venga de donde venga, y tiene que además respetar la libertad académica, eso es muy importante. La independencia en el sentido del trabajo académico que se hace en las universidades debe ser un valor que se aquilate por los Estados Unidos, para nutrir la propia sociedad de este elemento y también por lo que pueda atenderse desde fuera. Necesitamos una libertad de expresión muy amplia.

¿La libertad de expresión y académica está en riesgo en Estados Unidos?

Sí, sí, sí lo dijimos en un comunicado, de los primeros comunicados que sacaron con respecto a Estados Unidos.

Trump optó por una política de máxima presión sobre Venezuela, con sanciones y la retirada de la licencia a Chevron, ¿qué consecuencias podría tener al interior de Venezuela?

Las sanciones y la política de máxima presión de Estados Unidos sobre Venezuela pueden fortalecer al régimen en su narrativa de victimización. Sin embargo, la represión y las violaciones a los derechos humanos continúan, como lo demuestra el trato a las personas privadas de libertad y las condiciones en lugares como la carcel del Helicoide. Lo que la Comisión tiene que hacer es seguir dando voz a las víctimas y documentando los abusos.

Represión agudizada y crisis humanitaria en Cuba

En Cuba, el informe señala un recrudecimiento de la represión desde las protestas de julio de hace tres años. ¿Cómo evalúa la situación?

El panorama en Cuba sigue siendo preocupante. La represión ha aumentado, especialmente contra los líderes sociales y los defensores de derechos humanos. La Comisión ha documentado persecuciones, violaciones a la libertad de expresión y explotación relacionada con las misiones médicas. Aunque el régimen en Cuba ha mantenido su autoritarismo, la comunidad internacional debe seguir prestando atención a estos abusos.

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Mayor represión desde las manifestaciones de julio de 2021 en Cuba, sumada a la falta de alimentos, luz y medicamentos, según documentó la CIDH.

Mayor represión desde las manifestaciones de julio de 2021 en Cuba, sumada a la falta de alimentos, luz y medicamentos, según documentó la CIDH.

Se agrega la crisis humanitaria que detallan, con falta de alimentos, medicamentos, luz e infraestructura básica. ¿Es otra novedad en Cuba, además de la represión agudizada?

Sí, exacto, que también tiene que ver con las personas en una situación, como usted dice, dramática en la falta de acceso a bienes, a servicios, a salud, que eso también está documentado, porque la sociedad civil mantiene una comunicación muy estrecha con la comisión en la que está y la que está en el exilio.

En la Nicaragua de los Ortega detectaron mayor persecución y quite de personería a cientos de organizaciones. ¿Qué pasó?

En Nicaragua, hemos visto un aumento en las violaciones sistemáticas de derechos humanos, con más represión. La reforma constitucional aprobada en noviembre de 2022 consolidó el autoritarismo, con la pérdida de la nacionalidad, el cierre de universidades y la anulación de las organizaciones. La Comisión ha denunciado estas prácticas y sigue alertando sobre la situación en Nicaragua.

El ambiguo estado de excepción en El Salvador de Bukele

Sobre el gobierno de Nayib Bukele en El Salvador, el informe señala que el estado de excepción redujo la violencia, pero al costo de prisiones preventivas y denuncias de violaciones a los derechos humanos. ¿Cuál es su opinión?

El estado de excepción en El Salvador ha reducido la violencia, pero también ha implicado un aumento en las violaciones a los derechos humanos, como la detención arbitraria y las condiciones carcelarias inhumanas. La Comisión está en diálogo con el gobierno de El Salvador para encontrar un equilibrio entre la seguridad pública y el respeto de los derechos fundamentales.

Respecto el acuerdo de deportación entre Estados Unidos y El Salvador, ¿qué mirada tiene la CIDH?

La Comisión ha señalado que la criminalización de las personas en movilidad es una violación de sus derechos. Cualquier acuerdo que trate a los migrantes como criminales va en contra de la dignidad humana y los estándares interamericanos. Estados Unidos debe garantizar que las políticas migratorias respeten los derechos de las personas.

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Migrantes deportados por EEUU en el Cecot de El Salvador.

Migrantes deportados por EEUU en el Cecot de El Salvador. "Cualquier acuerdo que trate a los migrantes como criminales va en contra de la dignidad humana", dice Caballero.

Ajuste y tensión con la prensa en la Argentina de Milei

En el capítulo sobre Argentina, el informe señala que la reducción del Estado generó mayor discriminación por razones de género y diversidad.

En Argentina, hemos observado una disminución de la capacidad del Estado en temas clave de derechos humanos, como la lucha contra la discriminación. El cierre de organismos como el del antidiscriminación y la falta de acción en la defensoría de los derechos de niños y adolescentes son señales preocupantes. La Comisión ha documentado también la represión de las protestas sociales y el uso excesivo de la fuerza durante las manifestaciones.

En Argentina se debate por el tono confrontativo del presidente Javier Milei con los periodistas. ¿Qué opina?

La Comisión está preocupada por las expresiones de alto tono de las autoridades, tanto en Argentina como afuera, que pueden atacar y estigmatizar a periodistas y poblaciones vulnerables. El discurso público puede ser usado para atacar a las personas. Las vocerías institucionales de las más altas autoridades no son vocerías en ejercicio de la libertad de expresión como la de cualquier ciudadano. Están condicionadas al respeto de las personas, a no estigmatizar, no criminalizar y a no incitar al odio. Lo vemos con preocupación y eso aplica a todos los países.

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Para el presidente de la CIDH, a las autoridades no les cabe la libertad de expresión de cualquier ciudadano.

Para el presidente de la CIDH, a las autoridades no les cabe la libertad de expresión de cualquier ciudadano. "Están condicionadas al respeto de las personas, a no estigmatizar, no criminalizar y a no incitar al odio", afirma.

Sobre Uruguay, ¿cuál es su evaluación ante la llegada del nuevo gobierno de Yamandú Orsi?

En Uruguay ha habido un cambio de gobierno, lo cual es relevante, ya que se presentan nuevas autoridades y una nueva cancillería. Es esencial continuar el diálogo con las autoridades, tal como se había venido haciendo.

¿Se discutió un tema en una audiencia sobre la ciudadanía legal?

Es un tema importante que quiero destacar: la distinción que se hacía entre personas con ciudadanía legal, a quienes se les inscribía una nacionalidad diferente a la uruguaya en el pasaporte, lo que generaba dificultades para viajar a otros países y acceder a ciertos derechos dentro de Uruguay. Esta distinción en la ciudadanía legal ha sido modificada, y el informe refleja que este cambio ya ha ocurrido. La Comisión ha reconocido este avance, ya que se trata de un paso fundamental para asegurar la plenitud del derecho a la nacionalidad. Ahora, Uruguay no diferencia entre ciudadanos por naturalización y ciudadanos por nacimiento, lo cual es un cambio significativo. Este tema fue planteado enfáticamente ante la Comisión, y ahora, gracias a esta modificación, se ha convertido en una realidad. Creo que este es un tema muy relevante dentro de lo que Uruguay está ofreciendo en términos de derechos humanos.

Trump recorta el presupuesto de la CIDH

Sobre el desafío del financiamiento de la CIDH, ¿cómo enfrenta la Comisión este reto con el gobierno de Estados Unidos buscando ajustar el presupuesto?

La Comisión depende de los aportes de los Estados miembros de la OEA, pero este financiamiento no siempre es suficiente para cubrir el trabajo creciente de la Comisión. Estamos buscando fuentes alternativas de financiamiento y apelando a la cooperación internacional para garantizar que podamos continuar con nuestro trabajo sin reducir la calidad de nuestras acciones. La Comisión no disminuirá su labor en defensa de los derechos humanos.

Cómo ve el retroceso en la valoración democrática a nivel social, especialmente en las nuevas generaciones que quizás no le dan tanta importancia a los valores democráticos?

Es cierto que hay escepticismo hacia los derechos humanos y los valores democráticos, y esto debe ser un tema de reflexión para los estados, las sociedades y los organismos internacionales. Las experiencias dolorosas que catapultaron los derechos humanos no deben ser olvidadas. Es responsabilidad de la Comisión y de todos los actores garantizar que no se pierdan estos avances y que las nuevas generaciones comprendan la importancia de la democracia y los derechos fundamentales.

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