¿Cómo invertir de forma legal en el negocio de las armas, el juego y la marihuana?

Aunque pueda sonar poco ético, apostar por empresas de estos rubros puede tener su rédito

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21 de noviembre de 2018 a las 05:04

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El mundo de los mercados financieros ofrece hoy infinidad de opciones para sacarle jugo a los ahorros. Hay para todos los gustos, perfiles y bolsillos. Una de los caminos que suelen elegir aquellos que apuestan por renta variable es la compra de acciones de reconocidas compañías estadounidenses y en ramas diversas, como tecnológicas, financieras o retail, por ejemplo.

Más allá de estos sectores tradicionales, la posibilidad de invertir de forma legal en nichos "raros" de mercado, que incluso pueden considerarse hasta poco éticos está al alcance de la mano. Un camino para ello son los Fondos Cotizados de Inversión o Exchange Traded Funds (ETF), fondos que operan en bolsa y replican los resultados de un índice específico de acciones, y que también permiten ampliar el abanico de inversiones.

Armas y mísiles

La industria militar y armamentística no es algo tan lejano como puede parecer. El iShares US Aerospace & Defense ETF (ITA) permite tener exposición a empresas de Estados Unidos que se dedican a la fabricación de aeronaves comerciales, militares y otros equipos de defensa, como armas y misiles.

Este fondo busca replicar los resultados de inversión del Dow Jones U.S. Select Aerospace y Defense, que actualmente tiene activos de 37 empresas estadounidenses. Entre ellas, están Lockheed Martin Corp, uno de los mayores contratistas militares de Estados Unidos y Northrop Grumman Corp especializada en buques de guerra. También hay otros gigantes de la industria de defensa como Boeing o Raytheon, uno de los mayores productores de misiles guiados del mundo.

El ETF que nació en mayo 2006 salió al mercado a un precio de US$ 52. Hoy su cotización ronda los US$ 190, tras empezar el año en US$ 188 y llegar a un techo de US$ 217 en setiembre. Su patrimonio es de unos US$ 5.300 millones.

El cannabis

Si las armas no seducen demasiado, apostar por la marihuana puede ser otra opción que reporte rentabilidad. La industria del cannabis tiene un futuro prometedor en el mundo y son varias las empresas que están apostando fuerte por ese sector, enfocado tanto al uso terapéutico como recreativo.

El Horizonz Marijuana Life Sciences Index (HMMJ) es un ETF que busca replicar el rendimiento del North American Marijuana Index y ofrece exposición a acciones de marihuana medicinal y a su producción.

Su evolución está atada a  una cesta de 50 empresas integrada en su mayoría por firmas canadienses, como Aurora Cannabis Inc, Canopy Growth Corp, Tilray Inc, Aphria Inc y Cronos Group Inc, entre otras, que debutaron este año en la Bolsa de Nueva York.

El fondo cotizado salió a la Bolsa de Toronto en noviembre del año pasado a un precio de US$ 12 y la volatilidad ha sido una marca en estos pocos meses. Hoy está en torno a US$ 17, tras empezar el año en US$ 21 y alcanzar un techo de US$ 26 en octubre. Sus activos de gestión abarca alrededor de US$ 800 millones.

La legalización de esta droga en el mundo es cuestión de tiempo y esas expectativas positivas han despertado entusiasmo entre los inversores de Wall Street que están demandando acciones de estas compañías.

 

Tabaco y juegos de azar

Pero si con armas y marihuana no es suficiente, y se quiere seguir rompiendo tabúes y asumiendo riesgo, también se puede mirar hacia el mundo de los juegos de azar.

El Vectors Gaming (BJK) es un fondo que busca replicar el precio y el rendimiento del MVIS Global Gaming Index, un fondo que invierte en activos relacionados con los casinos, las apuestas deportivas, lotería y tecnología de juego, entre otros.

En su cartera figuran activos de más de 40 empresas que operan en Estados Unidos, como Las Vegas Sands Corp, una compañía de casinos y complejos turísticos o Galaxy Entertainment Group, una compañía de hoteles y casinos en Hong Kong, además de otras del rubro que funcionan en Reino Unido y Australia. El precio del fondo está hoy en US$ 35 tras empezar el año en US$ 46 y llegar a un máximo de US$ 50 en mayo.

Otra opción menos popular es el Advisor Shares Vice (ACT), un fondo cotizado que ofrece exposición a alrededor de 30 empresas dedicadas a la comercialización de tabaco, bebidas alcohólicas y marihuana, entre las que figuran Boston Beer Co y Turning Point Brands Inc, por ejemplo. También forman parte de la cartera otras firmas dedicadas al negocio de los restaurantes y la comida rápida. Su año no ha sido nada bueno. El ETF tiene un precio de US$ 24, tras empezar el año en US$ 26 y alcanzar un máximo de US$ 27 este año.

Durante casi dos años también estuvo disponible el Whiskey & Spirits (WSKY). Este fondo que se concentraba específicamente en el segmento de producción y distribución de bebidas alcholicas dejó de operar en junio pasado. Supo tener en su portafolio empresas como Diageo o Brown-Forman, una de las compañías a estadounidenses más grandes dedicada al negocio de los vinos y los licores.

Una forma de repartir riesgos
Los ETF son fondos que operan en bolsa y replican los resultados de un índice de acciones o una cartera de bonos, por ejemplo.
Estos instrumentos tienen entre sus ventajas la posibilidad de diversificar la inversión con un único producto y a bajo costo. Por ejemplo, si se quiere invertir en empresas dedicadas a la industria del juego de Estados Unidos, pero no se sabe qué acción elegir se puede adquirir una participación en un ETF del sector y tener acceso a una canasta representativa de acciones.
De esa forma, en vez de estar invirtiendo en una sola empresa se lo estará haciendo en varias empresas a la vez, lo que también ayuda a reducir el riesgo.
Las participaciones se compran y se venden en tiempo real  igual que las acciones, por lo que se pueden negociar en cualquier momento del día sin tener que esperar al cierre del mercado para saber el valor de liquidación.
Para operar con este tipo de fondos se hace igual que si se fuera a comprar acciones o bonos abriendo una cuenta con un corredor de bolsa o un bróker. Siempre es recomendable consultar con el asesor cuál es el más apropiado, tomando en cuenta su liquidez, las comisiones que se cobran y sus rendimientos, entre otros aspectos del mercado.
Además, como los ETF replican todo tipo de activos es posible adaptarlos  a cualquier estrategia de inversión, según  las características del inversor y el riesgo que se esté dispuesto a tomar. Hoy los ETF suelen incluirse como parte de la estrategia cuando se arma un paquete de inversión de US$ 10.000 o incluso hasta de US$ 5.000 y ayudan a repartir los riesgos del portafolio.
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