Todo niño debería practicar algún tipo de deporte, ya que es fundamental para su desarrollo integral. Según se explica en el portal mexicano Padres e hijos, a través de las distintas actividades físicas existentes, el niño puede adquirir disciplina, aprender a autocontrolarse y mejorar en sus relaciones sociales.
Sin embargo no todos los deportes son los correctos para todos los niños. En el caso de los inquietos y rebeldes practicar un deporte puede ayudarlos a mejorar su conducta y volverse más tranquilos en otros ámbitos.
Básquetbol
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Lo ideal para un niño rebelde es realizar deportes como fútbol, básquetbol, o cualquier otro que fomente el trabajo en equipo, el compañerismo, el respeto por el rival y que al mismo tiempo permita mantenerlos activos.
Por otro lado, a los inquietos es les útil practicar deportes individuales como natación, atletismo, ciclismo, entre otros. Por medio de estas disciplinas podrán desarrollar la atención y concentración y aprender a canalizar su energía.