Con pocas horas de diferencia, el gobierno y la empresa UPM dieron señales contradictorias respecto al avance de las obras en Paso de los Toros y de la construcción de una eventual segunda planta de celulosa en Uruguay de la finlandesa.
Pocas horas después de que el presidente Tabaré Vázquez dijera públicamente que el gobierno había "cerrado todos los temas" con UPM , el máximo representante de la empresa en Uruguay, Petri Hakanen, dijo en una reunión con un grupo de periodistas –entre los que se encontraba El Observador– que hay "elementos fundamentales que aún están abiertos" y que "el foco" de la compañía "está en los niveles de ejecución de esos temas pendientes".
Entre esos temas que según UPM restan acordar destaca especialmente el capítulo laboral. Para Vázquez, en cambio, fue resuelto "positivamente". Esta mañana, consultado sobre si se había llegado a un acuerdo con respecto a la cláusula de prevención de conflictos, el mandatario respondió: "Lo que sí puedo decir con seguridad es que todos los puntos que nos propusimos trabajar para llegar a un acuerdo final, todos, absolutamente todos, están acordados entre el gobierno nacional y UPM".
Aunque Vázquez dijo que "todo está en verde" para la concreción de la planta, una tabla presentada por UPM horas más tarde muestra varias casillas en amarillo. En la jerga de la empresa ese color indica que un aspecto está "avanzado, no implementado".
Además del capítulo laboral, que incluye tener "protocolos para la construcción de la planta acordados" y "regulaciones laborales definidas y promulgadas", otros casilleros en amarillo refieren a los "permisos para la construcción" de la obra del puerto" así como la firma del contrato de obra del Ferrocarril Central y el inicio de la construcción.
Efectivamente, ese capítulo está encaminado –la obra ya cuenta con financiamiento y la adjudicación al consorcio Vía Central obtuvo recientemente el visto bueno del Tribunal de Cuentas–, pero resta la firma final.
"Si bien se han logrado avances notorios en ciertas áreas, aún hay aspectos pendientes que deben cumplirse", dijo Hakanen, en línea con el mensaje que UPM transmitió a sus accionistas el pasado 26 de abril, en su informe cuatrimestral. Allí se hablaba de "varias condiciones importantes" del acuerdo que "todavía" estaban "pendientes", como la ejecución de la obra del Ferrocarril Central, los protocolos laborales y otros asuntos complementarios. Fuentes de la empresa dijeron que la postura oficial sigue siendo esa.
Es decir, mientras que el gobierno da por terminada la segunda etapa de las negociaciones –antesala de la eventual decisión de inversión– UPM insiste en que todavía restan algunos capítulos. Eso no quita que los directivos dejaran entrever su optimismo respecto a la concreción de la inversión. "Esperamos que la segunda etapa finalice satisfactoriamente", dijo Haneken en reiteradas ocasiones. El director de Desarrollo de Negocios de UPM, Gonzalo Giambruno, agregó que la empresa tiene "confianza en que se va a dar cumplimiento a los compromisos".
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