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Los sectores en problemas que deben pagar aumentos de sueldos en mayo y qué dijo Mieres

En hoteles, restaurantes y bares hay ajustes pactados de hasta 4% que se habían reprogramado en diciembre de 2020

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20 de abril de 2021 a las 05:03

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Una gran parte de los sectores de la actividad privada tuvieron en el arranque de este año un ajuste salarial de 3%, de acuerdo a lo que se había estipulado en la ronda puente, pero hubo otros que reprogramaron en el tiempo ese aumento. Entre ellos los hoteles, restaurantes y bares, que en último año se han visto fuertemente golpeados por las restricciones que impuso la pandemia a su funcionamiento habitual. 

En las últimas pautas salariales se contempló la posibilidad de que en algunos sectores los ajustes fueran recién en abril, si la cantidad de cotizantes tenían una caída igual o superior a 10% interanual (comparando noviembre de 2020 con noviembre de 2019). Esa situación ocurrió en la práctica y las cláusulas de postergación que se colocaron en los convenios se activaron.

Es por ello que en mayo las empresas deben pagar un 3% nominal de aumento a sus trabajadores cuando hagan efectivas las remuneraciones correspondientes a abril. La lista comprende a personal de hoteles, apart hoteles, moteles, hosterías, campamentos y bongalows, restoranes, parrilladas, cantinas y cadenas de comidas. Y en los casos de trabajadores con salarios nominales iguales o inferiores a $ 22.595 (5 BPC a enero de 2020) corresponde un incremento adicional de 1% con lo que el aumento llegará al 4%.

Por otro lado, en el caso del subgrupo que incluye cafés, pubs, cervecerías, venta de pizza, despacho de bebidas, repostería,  confitería sin planta de elaboración y heladerías, la corrección es de 1% sobre las remuneraciones vigentes al 31 de marzo.

Estos pagos coinciden con un momento de la economía que sigue siendo complicado y que es muy diferente a las expectativas que había sobre el cierre de 2020. La actividad turística se redujo de manera significativa en los meses de verano y Semana Santa tampoco tuvo la demanda esperada. Hoteles y restaurantes de la costa no tuvieron zafra, y los de la capital trabajan muy por debajo a lo normal.

El rebrote de la pandemia en la primera parte del año también hizo que sectores  como bares y restaurantes vieran reducido su horario de funcionamiento y el aforo de público. La  mayoría ha mantenido abiertas sus puertas pero con menos personal.

Todas las correcciones salariales fueron ratificadas a comienzo de mes en actas firmadas por representantes de trabajadores, empleadores y Poder Ejecutivo.

En diálogo con El Observador, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, señaló que hasta el momento no se han recibido planteos por parte de empleadores en dirección a no poder cumplir con los ajustes pactados.

“Es el primer aumento que se tendría desde mediados del año pasado. No tengo planteos. Son convenios firmados y están vigentes. Deberían pagarse esos aumentos a partir del 1° de mayo”, afirmó el ministro. Mieres añadió que si ocurre algún tipo de planteo habrá que analizarlo en el ámbito de los Consejos de Salarios.

¿Qué harán en ese contexto de menores ingresos las empresas que hoy siguen funcionando? En diálogo con El Observador, el presidente de la Asociación de Hoteles y Restaurantes del Uruguay, Francisco Rodríguez, explicó que la gremial ya envió a todos sus asociados la comunicación con el ajuste que corresponde otorgar según lo acordado. Eso no quita que luego haya empresas que de forma individual puedan solicitar el descuelgue del convenio ante el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.

En estos sectores de la economía se aguarda con expectativas los nuevos anuncios que pueda realizar el gobierno en las próximas a modo de ayuda para las empresas. Particularmente en actividades vinculadas al turismo hace algunos días hubo pedidos por exoneraciones en aportes patronales, pagos de DGI y facilidades de acceso a crédito.

En tanto, otras fuentes del comercio minorista coincidieron en que el ajuste para bares y cantinas está pactado a nivel del grupo de actividad, y que será cada comerciante de acuerdo a su realidad el que decida qué hacer. Una de las preocupaciones centrales radica hoy en que las empresas que continúen abiertas lo hagan dentro de la formalidad y cumpliendo “por igual” con los laudos salariales establecidos para cada categoría.

En el caso de Cambadu, la asociación logró -tras negociar con el gobierno- la refinanciación de adeudos con BPS y DGI, reducción de aportes patronales y exoneración de anticipos de IRAE mínimo para una parte de las micro y medianas empresas.

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