Cabe destacar que, hasta el momento, la cadena YPF optó por no aplicar incrementos, manteniendo los precios vigentes hasta ayer.
En detalle, el litro de nafta súper experimentará un aumento, pasando de los actuales $553 a un valor de $702. Por su parte, la nafta premium podría alcanzar los $868, el diésel común los $750 y el diésel euro los $944. No obstante, estos son cálculos estimativos basados únicamente en los valores de surtidor de YPF, la empresa con mayor participación en el mercado, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Este incremento representa la tercera alza significativa en el precio de los combustibles en menos de un mes. El primer aumento notable ocurrió durante la última semana del mandato de Alberto Fernández, cuando las petroleras aplicaron un ajuste promedio del 30% en el precio final de los destilados, aprovechando el fin del congelamiento establecido previamente.
Posteriormente, tras el aumento del dólar oficial el 13 de diciembre, los precios en los puntos de venta volvieron a experimentar un aumento considerable. Pocas horas después del ajuste en el valor del dólar, las empresas aplicaron incrementos que oscilaron entre el 30% y el 37% en todos sus productos.
Con este último ajuste, el precio por litro de nafta se acerca rápidamente al valor histórico de un dólar. Con un aumento del 27%, la nafta súper promediará los $700, mientras que la nafta premium se comercializará aproximadamente en $900. Aunque no hay confirmación por parte de YPF, se espera que las petroleras privadas ajusten sus precios.
Cabe mencionar que otro aumento significativo se produjo el 8 de diciembre, liderado por las petroleras privadas con un promedio del 30%, seguido por YPF una semana después. Previamente, las petroleras habían acordado un aumento del 7% en colaboración con el Gobierno, como parte de los acuerdos en el sector de los combustibles. En noviembre, el ajuste fue del 12%.
Este último ajuste representa la primera subida del año, después de dos aumentos significativos en diciembre. La decisión parece ser una consecuencia directa de la medida adoptada por la Secretaría de Energía el 28 de diciembre, que estableció incrementos para el biodiesel y el bioetanol en un rango del 28,45% al 34,44%. Se esperaba que las petroleras trasladaran, al menos parcialmente, el aumento de costos al precio final de los combustibles, pero los porcentajes indican que podrían estar transfiriendo casi la totalidad.
En 2023, los precios de la nafta y el gasoil experimentaron incrementos en todos los meses, con excepción de septiembre. En términos numéricos, el litro de nafta súper inició el año en $150,90 y concluyó en $553, representando un aumento del 266,22%. Por otro lado, el litro de nafta premium aumentó de $185,90 a $684, reflejando una evolución del 267,74%.
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