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Casi 282 millones de personas pasan hambre en África en una crisis sin precedentes
La Organización de Naciones Unidas (ONU) y la Unión Africana (UA) advirtieron en un informe conjunto que África atraviesa una crisis alimentaria "sin precedentes" ocasionada por el cambio climático, la guerra en Ucrania y la debilidad de económica mundial, crisis superpuestas que además profundizan las desigualdades sociales y de género.
El informe, que llama a una acción internacional “urgente”, señala que los factores enumerados y las secuelas de la pandemia de Covid-19 colocan a millones de habitantes del continente más pobre frente al inminente riesgo de un agravamiento de la situación alimentaría que tendría efectos catastróficos especialmente entras las mujeres, niñas y niños.
Según el reporte, casi 282 millones de personas, un 20% de la población africana, sufría desnutrición en 2022, los que representa un incremento de 57 millones respecto a los datos previos a la pandemia.
El documento, sobre la base de datos del Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), señala que más de 1.000 millones de personas, el 78 % de la población, no se pueden permitir seguir una dieta sana y que el 30 % de los niños menores de cinco años sufren graves problemas derivados de la desnutrición.
Los expertos asumen que con estas cifras se aleja el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) de Hambre Cero, por lo que las organizaciones firmantes calificaron como "imperativo" que todos los países "aceleren sus esfuerzos" para "lograr un mundo sin hambre y desnutrición en 2030".
Entre las recomendaciones de las agencias de la ONU figura una apuesta por la transformación de los sistemas agroalimentarios para hacerlos más eficientes, sostenibles, inclusivos y resistentes a las potenciales amenazas.
El informe, además, alerta sobre un aumento de las desigualdades sociales y de género como consecuencia de la concatenación de crisis, que incluyen no sólo las consecuencias del cambio climático, sino también problemas de índole estrictamente económica.
El documento de la ONU y la UA precisa que el costo de llevar una dieta saludable se disparó en 2021 en África hasta los US$ 3,57 diarios, mientras que el umbral que mide la extrema pobreza se situó en US$ 2,15 al día, lo que complica también a personas que teóricamente no entrarían dentro de la categoría de pobres desde el punto de vista estadístico.
(Con información de agencias)
