El Antel Arena: los hechos y dos relatos

La obra que se anunció en 2013, cuando la actual intendenta Carolina Cosse era presidenta de Antel, y se inauguró el 12 de noviembre de 2018, se ha convertido en un caballito de batalla del gobierno para pegarle a los gobiernos frenteamplistas y particularmente a Cosse, que se va posicionando cada vez más cómoda como precandidata presidencial para 2024.

El oficialismo sustenta su relato en que existieron irregularidades que fueron amparadas en la falta de transparencia ya que todas las resoluciones del directorio de Antel que tuvieran relación al Arena se declararon reservadas por 10 años, lo que imposibilitó a legisladores y a periodistas obtener información sobre la obra.
 
Otros hechos señalados por el gobierno:

• El Tribunal de Cuentas de la República (TCR) fue el primero en observar en 2013 (con los votos de blancos y colorados y el presidente independiente) a pocos meses de presentado el proyecto, los gastos de la obra y declararla inconstitucional por entender que violaba el artículo 190 de la Constitución que define que “los Entes Autónomos y los Servicios Descentralizados no podrán realizar negocios extraños al giro que preceptivamente les asignen las leyes”. 
• Hubo 20 solicitudes de pedidos de legisladores durante el período de construcción del Antel Arena y solamente se contestó uno (al entonces senador Pablo Mieres), e incluso en ese pedido se respondió a 14 preguntas que la información no se podía dar por ser reservada, informó Gurméndez en el Parlamento.
• Al ser citada al Parlamento en ese momento por Mieres, Cosse afirmó que una consulta del Instituto de Derecho Constitucional, suscrito por su director el catedrático Alberto Pérez Pérez, avalaba la obra. Ahora se supo que ese informe no pasó por el instituto sino que había sido redactado a título personal por el profesor. Según reveló Gurméndez en la interpelación el pasado 3 de noviembre, el Consejo de la Facultad de Derecho informó a la decana Cristina Mangarelli que la consulta no había contado con la participación de los otros docentes del instituto: los profesores Ruben Correa, Felipe Luzardo, Jaime Sapolinski y María Elena Rocca.
• El costo total de la obra, de US$ 120 millones, triplicó la estimación original del proyecto 
• De acuerdo con los resultados de la auditoría realizada por la consultora Ecovis Uruguay, a los que accedió El Observador, el complejo Antel Arena ha representado desde su inauguración, el 12 de noviembre de 2018, y hasta el primer semestre de 2020 una pérdida de US$ 3,7 millones ($ 137.377.228).esa pérdida se desglosa en US$ 787.782 durante los dos meses de 2018, US$ 1.758.627 en 2019 y US$ 1.201.999 en el primer semestre de 2020. 
• La auditoría también indicó que “el 88,6% de las compras (por un total de US$ 96, 1 millones) fueron, de acuerdo a lo informado, compras directas en las que se invitó a cotizar a por lo menos dos posibles proveedores”.
• Aún restan por pagar US$ 47 millones de la obra.

En base a esos hechos, el senador nacionalista Jorge Gandini calificó directamente de “corrupción” esos hechos. “La suma del secretismo, con todos los desvíos, las adjudicaciones directas y los sobrecostos que se generaron por tres veces lo presupuestado es un hecho de corrupción que ocultó el interés político de una fuerza política para promover la imagen de la presidenta de Antel”, lanzó sobre el final de la interpelación del 3 de noviembre al ministro de Industria Omar Paganini y a Gurméndez.

De hecho, el directorio presentó una denuncia penal patrocinada por el penalista Gustavo Bordes que recayó en la fiscalía de Enrique Rodríguez (uno de los nombres propuestos por el oficialismo para ocupar la fiscalía de Corte). A esa denuncia se agregó luego el informe de la Junta Transparencia y Ética Pública (Jutep) que señaló que Antel violentó los principios de probidad, transparencia, eficiencia y legalidad en la construcción del complejo Antel Arena. El informe que contó con la firma del miembro frenteamplista Jorge Castro, le valió el cese en el cargo al integrante del Partido Comunista.

El gobierno ha ido construyendo un discurso pero para que termine de traerle réditos deberá probar que las irregularidades existieron. "Que el Antel Arena sea una realidad hermosa no puede tapar que se gastaron tres veces más de lo proyectado en hacerlo", señaló Gandini. "La diferencia está en algún lado y la Justicia deberá averiguar a qué bolsillo llegó", afirmó. Veremos hasta donde se llega.

“De lo que hay que hablar”

Del lado de la oposición, Cosse ha sido la abanderada de la defensa del complejo y del relato opositor, y si bien ha salido firme y bien parada -fruto de su notoria mejora en el desempeño político-, lo que ha hecho ha sido repetir postulados. Ha refutado las críticas con poco dato concreto y ha llevado el debate al terreno político con acusaciones y sospechas, y sobre todo se ha enfocado en poner en duda el proyecto tecnológico de Antel.

“No veo ningún proyecto, eso es lo que tenemos que discutir”, dijo cuando se presentó la denuncia penal, y hace unos días dijo con voz fuerte: "¿Cuál es el proyecto en esta nueva era digital que la propia Antel ayudó a cimentar?", "¿cuál es el nuevo plan que nos va a asombrar?", cuestionó. "Esa es la estrategia, ¿dónde está? Nadie sabe. Muchas gracias", se contestó ella misma dando por finalizadas las preguntas.

"De lo que hay que hablar" es que Antel está perdiendo clientes, dijo, y aseguró que "sospecha" que la participación de Antel en el mercado está muy por debajo del 50% cuando en 2019 era del 54%. Según el dato de diciembre 2020, Antel lidera la categoría con 51,5% de participación de mercado. Aún no se conoce el dato de 2021.

Con respecto al sobrecosto del Antel Arena primero lo negó "rotundamente" y dijo haber tenido “control y rigurosidad” pero luego admitió: "Yo cometí un error cuando anuncié el proyecto y dije cuál era el costo. Era lo que me habían estimado verdaderamente los arquitectos especialistas. Después en el avance del proyecto surgió que no estaba en una isla y nos pareció que era válido el proyecto igual", dijo en entrevista con No Toquen Nada.

Otro de sus argumentos centrales es que el gobierno atenta contra las empresas públicas. "Yo soy una más de ustedes y voy a dar todo de mí para defender a las empresas públicas", dijo ante el intento fallido de abrazar al Antel Arena en respuesta al llamado a sala al Parlamento de las autoridades del ente.

“Hay una obsesión de desprestigiar a las empresas públicas”, había dicho en rueda de prensa cuando se conoció el informe de la Jutep. Y agregó: "Para mí es una no noticia. Parecería ser que hay un sector del Partido Nacional que está obsesionado con Antel y con las empresas públicas", sostuvo.

También pesa en el mensaje frenteamplista el barrio humilde mejorado gracias al estadio polifuncional y el hecho de tener "el mejor estadio de América Latina para espectáculos artísticos, culturales", como dijo el candidato a la presidencial del Frente Amplio Fernando Pereira. 

Habrá que ver cuánto de “la realidad hermosa” del Antel Arena, que es innegable, y cuánto de lo turbio e irregular se logra probar. En los resultados o no, irán parte de los réditos políticos que puedan sacar unos y otros.