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Líder de banda narco que cayó era empresario, de "clase alta" y vivía frente al mar en Buceo
El líder de la banda de narcotraficantes que cayó este sábado en Río Negro, luego de que la Policía incautara un cargamento de 400 kilos de droga que había sido arrojado desde una avioneta, tiene 35 años, es de "clase alta media", vivía "frente al mar" –en el barrio Buceo– y su actividad económica estaba centrada en Pocitos y vinculada al mundo empresarial.
No tenía antecedentes penales y, según el director de Investigaciones del Ministerio del Interior, Juan Rodríguez Reina, era una "persona de perfil socioeconómico alto", por el lugar donde vivía, "cómo se movía" y los "bienes" que tenía. Consultado sobre si se trataba de un "empresario", el jerarca respondió que sí.
Sin embargo, se excusó de detallar a qué actividad se dedicaba esta persona.
En una conferencia celebrada este lunes, las autoridades del Ministerio del Interior señalaron que la droga arrojada en un campo en Río Negro tenía como destino el mercado local y en especial abastecer a bandas familiares de la zona metropolitana. Todavía se desconoce el país de procedencia, aunque la avioneta en la que fueron arrojados los paquetes –que luego se intentaron ocultar entre colmenas de abeja– escapó hacia Argentina.
"La operación se inicia por información que se recibe, por la sospecha de que una persona estaba dedicada al narcotráfico y podía ser uno de los que organizaba la traída de la droga para el suministro en el área metropolitana", señaló Rodríguez Reina.
El líder de la banda no tenía antecedentes penales y fue condenado, junto a las otras cuatro personas detenidas en la operación, luego de alcanzar un acuerdo abreviado con la Fiscalía.
En su caso, fue condenado por "un delito de tráfico ilícito de sustancias estupefacientes prohibidas en la modalidad de importación, transporte y distribución en concurrencia fuera de la reiteración real, con un delito de organización de actividades de narcotráfico en reiteración real, con un delito de tráfico interno de armas de fuego y municiones". Deberá cumplir seis años y seis meses de penitenciaría.
La persona señalada como líder de la banda también contaba con tres boxes en un depósito de Pocitos, donde la Policía encontró varios cogollos de marihuana, así como implementos para montar un laboratorio de esa droga, armas, municiones y chalecos antibalas.
También se le incautó una embarcación que tenía en el Puerto del Buceo, que, según la información de inteligencia que se posee hasta el momento, pertenece al hombre condenado.
La organización había sido detectada hace cinco meses, luego de que llegara información de que se dedicaba a ingresar drogas para distribuirlas en el mercado local. La investigación estuvo a cargo de la Fiscalía de Estupefacientes de 1° Turno, que lidera Mónica Ferrero, junto a la Dirección General de Represión al Tráfico Ilícito de Drogas. Como Ferrero actualmente ejerce el cargo de fiscal de Corte –ante la licencia por motivos de salud de Juan Gómez–, fue subrogada por Angelita Romano.
Según la Policía, la organización estaba en sus inicios –al menos eso se presume porque no se tenían datos previos de su operativa– y abastecía de cocaína y pasta base al área metropolitana.
El comunicado del Ministerio del Interior señala que, en total, se incautaron unos 156 kilos de cocaína (en 150 ladrillos); unos 232 kilos de pasta base de cocaína (en 228 ladrillos), 3 kilos de marihuana; tres vehículos (un camión, un auto y una camioneta); una lancha; ocho armas (cuatro pistolas, un revólver, un rifle y dos escopetas); 182 municiones de distintos calibres; y también dinero en efectivo, tanto pesos uruguayos como dólares.
