Los sectores del FA que se disputan el peso político en la estructura partidaria

La última imagen de 2016 mantiene al Movimiento de Participación Popular (MPP) como la fuerza predominante, con 18 representantes dentro de los 85 que corresponden a los sectores en el Plenario Nacional —máximo órgano de conducción política— y tres dentro del total de 15 cargos que componen la Mesa Política, que es el brazo ejecutivo de la organización. 

La siguiente en esa línea es la 1001, con el Partido Comunista (PCU) como punta de lanza. La colectividad obtuvo en los últimos comicios internos 12 delegados al Plenario Nacional, y dos en la Mesa Política.

Ambos sectores mayoritarios están hoy alineados detrás de la candidatura de Fernando Pereira, quien cosecha los respaldos más amplios en el extenso espectro de izquierda que abarca el Frente Amplio. 

Con igual representación en la Mesa Política se posiciona hoy el Partido Socialista (PS), aunque bajo una dirección distinta a la que lo perfiló en la interna de 2016. El sector encabezado por Gonzalo Civila pasó en 2019 a estar al frente de la fuerza fundada por Emilio Frugoni, e impulsa hoy a la figura de su secretario general para que sea presidente del Frente Amplio.

El realineamiento lo distancia en tanto de sectores más moderados en la coalición de izquierda —como el astorismo— con el que se alió años atrás para respaldar a Javier Miranda. En ese entonces era Mónica Xavier quien tenía las riendas del partido, una de las exponentes de la llamada renovación. 

El PS lanzó ahora la postulación de Civila al tiempo que anunció la conformación de un nuevo espacio con otros sectores, alineados todos detrás de la referencia de Carolina Cosse. En ese bloque están fuerzas como La Amplia —sector de la intendenta, aunque hoy no forma parte de la orgánica—, Casa Grande y el Partido por la Victoria del Pueblo (PVP).

La agrupación de la jefa comunal continúa juntando las firmas necesarias para pasar a formar parte de la estructura partidaria, tras un primer intento infructuoso. Los dos últimos, por su parte, buscarán mantener su representación en la Mesa Política —ambos tienen un representante en el órgano ejecutor—, aunque cada uno confeccionará su propia lista, indicaron a El Observador desde esas filas. 

Distinto es el camino adoptado por la Convocatoria Seregnista Progresistas, un flamante espacio lanzado esta semana de la mano de Fuerza Renovadora de Mario Bergara y Asamblea Uruguay del exministro Danilo Astori, un pacto que también componen Plataforma (del exdirector de la OPP, Álvaro García), el Partido Demócrata Cristiano y Magnolia (del exintendente Christian di Candia), entre otros. 

Desde ese bloque pretenden "nuclear a muchos frenteamplistas independientes, que hoy fluctúan de sector en sector", relató a El Observador el senador de Asamblea Uruguay, José Carlos Mahía. Por eso, los grupos acordaron para el próximo 5 de diciembre participar unidos en la misma lista, lo que, indefectiblemente, implica que uno quede por delante del otro.

En la interna se maneja que Astori será quien encabece la lista seguido de Bergara, pero al ser consultado al respecto, el senador Mahía zanjó que "no hay nada cerrado aún". "Entendemos que para el Frente Amplio es bueno que esta convocatoria se presente ante la sociedad conjuntamente", acotó el legislador. 

Una lectura sobre la mesa es que Bergara —un liderazgo en ascenso que tiene en su legajo el haber sido precandidato presidencial— no tiene nada para perder, y sí terreno para avanzar: en el peor de los casos, queda por fuera de una Mesa Política de la que ya hoy no forma parte. En caso contrario, logra mayor presencia que la actual en la estructura. Su sector Fuerza Renovadora celebró en agosto el ingreso a la orgánica frenteamplista, tras acreditar las firmas necesarias. 

Por fuera de la Convocatoria quedaron sectores como el Nuevo Espacio de Rafael Michelini, la Vertiente Artiguista de Enrique Rubio y el PAR de Cristina Lustemberg, que ya desde los últimos comicios departamentales estaban en las conversaciones para reconstruir el ala moderada, dispersa tras la fractura del Frente Líber Seregni (FLS) en las vísperas de las elecciones nacionales de 2019. 

Consultado por El Observador, el senador de la Vertiente, Eduardo Brenta, aludió que su "prioridad" estuvo fijada en la juntada de firmas contra 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración (LUC): "Sin restarle validez al proceso que han desarrollado, entendimos que había que generar un proceso que avanzara con mayor lentitud, que echara raíces más profundas", declaró. "No descartamos que el proceso de coincidencias termine haciéndonos confluir en un espacio común (hacia 2024)", sostuvo. 

Desde el Nuevo Espacio comparten la misma perspectiva respecto a que en esta instancia es "apresurado" unirse, aunque sí saben de la voluntad de conformar eventualmente un sublema. En esa colectividad entienden que les es más favorable marcar votos por su cuenta para diciembre, más allá de las coincidencias. Asamblea Uruguay, la Vertiente y Nuevo Espacio tienen cada uno un delegado a la Mesa Política, con el astorismo actualmente como la cuarta fuerza sectorial en el Plenario. 

En el ámbito también está representada la Liga Federal, en un proceso de renovación con la incorporación del intendente salteño Andrés Lima y la salida de su referente, el exdiputado Darío Pérez. Según informó el jefe comunal a El Observador, la intención del sector es conformar un "Espacio Federal", al que "se puedan ir sumando agrupaciones del interior y de zona metropolitana sin un referente nacional". "Será un espacio político nuevo que va a recorrer su camino propio", indicó el salteño, quien busca consolidarse como uno de los referentes del interior. 

Las elecciones de 2016 también llevaron a la Mesa Política a la 711 de Raúl Sendic, entonces flamante vicepresidente del país. Cinco años más tarde, su renuncia al cargo y las sanciones del propio Plenario frenteamplista cambian rotundamente el escenario. Otra incógnita será cómo incide la reforma aprobada en el Congreso, informó El País, para imponer un requisito mínimo del 1% de los votos del padrón para acceder al Plenario. La resolución es criticada por los sectores más chicos y la propia 711 de Sendic. 

Un último factor será la participación, en bajada desde los últimos comicios. Desde varios sectores tienen la expectativa de multiplicar la adhesión tras el envión generado por la recolección de casi 800 mil firmas.