MUSLEH ALKHTHAMI / SAUDI ARAMCO / AFP

Se acerca el "pico petrolero", que puede cambiar el consumo de combustibles en el mundo

No se puede descartar una sostenida caída del consumo de petróleo posterior a la crisis del coronavirus, dice Bernard Looney

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14 de mayo de 2020 a las 15:32

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Por Anjli Raval, Billy Nauman y Gillian Tetti 

El nuevo director ejecutivo de BP dijo que el impacto del coronavirus en el consumo de crudo probablemente perduraría más allá de la pandemia e incluso podría haber dado paso al "pico petrolero", el punto teórico donde se alcanza la tasa máxima de extracción de petróleo, después del cual se espera que caiga en una disminución terminal.

Bernard Looney, quien asumió el cargo principal en la gran compañía energética del Reino Unido en febrero, le dijo al Financial Times que la crisis del covid-19 sólo "se había sumado a los desafíos del petróleo en los años venideros", conforme las prohibiciones de viaje y los confinamientos han reducido el consumo en un tercio de los niveles previos a la crisis que era de aproximadamente 100 millones de barriles por día.

"No va a hacer aumentar la demanda de petróleo. Es más probable que el petróleo tenga menos demanda", dijo Looney, señalando que podría persistir el uso de tecnología que permite el trabajo remoto, reduciendo la necesidad de viajar.

"No sabemos cómo se desarrollará esto. Yo ciertamente no lo sé", dijo. "¿Podría ser el pico petrolero? Posiblemente. Posiblemente. No lo descartaría".

La industria petrolera está evaluando cuánto de la caída de la demanda provocada por la pandemia de coronavirus puede volverse permanente. BP dijo el año pasado que esperaba que el consumo creciera en la próxima década antes de estabilizarse en la década de 2030.

BP, que obtiene la mayor parte de sus ingresos del petróleo, informó una caída del 66 por ciento en las ganancias en el primer trimestre y, al igual que otras grandes compañías energéticas, se ha visto obligada a pasar al modo de conservación de liquidez. Ha emitido miles de millones de dólares en deuda, recortado los gastos y retrasado las aprobaciones de proyectos para preservar los pagos de dividendos, los cuales los analistas creen que se han vuelto insostenibles.

La compañía está enfrentando su crisis más reciente justo cuando Looney está intentando reformar su modelo comercial y su estrategia a largo plazo para un mundo que exige que las compañías de combustibles fósiles asuman más responsabilidades por el cambio climático.

Dijo que la pandemia había reforzado su "convicción personal" de la necesidad de cambiar la estrategia. Se espera que BP invierta más en energía baja en emisiones de carbono y menos en hidrocarburos como parte de un nuevo compromiso de convertirse en una compañía de cero emisiones netas de carbono para 2050.

 Looney señaló que conforme han caído los precios del crudo, los proyectos de energía renovable han podido atraer financiamiento, lo que sugiere que la pandemia ha debilitado los argumentos en favor de las inversiones en el petróleo.

Mark Felix / AFP

"Es el modelo que los inversionistas respetan y admiran cada vez más, porque es resistente y tiene un perfil de riesgo diferente", dijo.

La junta directiva de BP quiere presentar un enfoque renovado en su reunión anual este mes después de que en la reunión del año pasado la compañía entró en desacuerdos con los inversionistas que exigían objetivos sobre emisiones y una mayor divulgación sobre cómo el negocio se alinea con los objetivos climáticos del Acuerdo de París.

Todavía no está claro cómo BP, cuyas acciones cayeron recientemente a su nivel mínimo en 24 años, planea ejecutar su estrategia. Los analistas cuestionan si su pesada carga de deuda, entre las más altas del sector, permitirá el tipo de cambios que busca Looney.

A corto plazo, los banqueros e inversionistas se están preguntando si la compañía seguirá el ejemplo de Shell de reducir o cambiar sus dividendos para tener más margen de maniobra, particularmente si los precios del petróleo se mantienen bajos y las ventas de activos siguen siendo difíciles.

"La acción de la política de dividendos de Shell facilita que otros la sigan en un momento en que hay un enfoque muy real en la fortaleza y liquidez del balance", dijo Francois Austin, director del área de energía de la consultoría Oliver Wyman.

Looney dijo que, aunque había un interés "significativo" en la próxima movida de la compañía, no haría comentarios sobre el rumbo que tomaría BP, diciendo que sólo revisaría la política de dividendos trimestre por trimestre.

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