Tres empresarios del sector de eventos que se reconvirtieron en pandemia

En medio de esa lucha, y luego de una espera de meses en busca de medidas que palien la situación, algunos decidieron dar un giro para poder seguir activos. “Hubo que reinventarse, porque los locales nuestros sirven solo para acumular gente”, reconoció el propietario de Punta Cala y Carrasco Yacht, Gonzalo Maneiro.

En su caso, Maneiro entiende que las fiestas tal y como todos las conocen, no van a volver en el corto plazo. Por eso decidió idear un modelo que pudiera anticiparse al cambio, con el fin de seguir trabajando a pesar de que la facturación no sea muy alta. “Entiendo que va a haber un cambio en la modalidad de las fiestas, no creo que vuelvan como antes”, proyectó.

Explicó que actualmente solo está disponible el Yacht, en Carrasco,donde se adaptan a lo que la persona busca y su vez se cumple con las medidas impuestas por el Ministerio de Salud Pública (MSP). “No lo voy a dejar más para grandes fiestas, porque no lo veo a corto plazo”, insistió Maneiro, quien es socio de la Cámara de Eventos.

El empresario añadió que esta remodelación en cuanto a la forma de trabajo, implicó empezar a estudiar determinados aspectos de los que antes no tenía idea. Para Maneiro, este es el principal obstáculo por delante, pero enfatizó que eso no es un impedimento para retomar la actividad. “Algo tengo que hacer; ya perdí una año”, reflexionó

Entre los planes que siguen, en los próximos días estará sobre la mesa la posibilidad de presentar una propuesta que le permita abrir varios días de la semana con una oferta gastronómica. Reparó que esto aún está en estudio, pero que se puede concretar en los hechos.

A través de la pantalla

Otro de los casos de reconversión es el de Agustín Beduchaud. Su empresa siempre estuvo enfocada en el rubro eventos pero tenía un fuerte foco en el sector corporativo. Si bien, con el correr de los meses, muchas compañías están volviendo a la oficina, es un hecho que el trabajo remoto llegó para quedarse y por eso Bedchaud decidió repensar su negocio.

El empresario explicó que optaron por llevar los eventos presenciales a un ámbito virtual, pero sin perder de vista el entretenimiento. En palabras de Bedchaud, muchas de las empresas que son clientes se preocupan por el bienestar de sus colaboradores por lo que en tiempo de pandemia esos cuidados se intensificaron.

Los eventos online que llevan adelante tienen diversos aspectos, desde trucos de magia, sorteos o regalos. Bedchaud puntualizó que esto es importante porque al ser a través de la pantalla, las chances de que las personas abandonen la cita son grandes.  “La idea no es que se sienten a mirar, porque para eso está YouTube”, ejemplificó.

Si bien el reto implicó grandes cambios, Bedchaud contó que la receptividad por parte de los clientes fue muy buena. Explicó que desde el primer momento, todas las empresas estuvieron abiertas a escuchar la propuesta y “se pusieron la camiseta” como para poder colaborar.

Además afirmó que las evaluaciones que se hacen luego de cada evento, han sido positivas. Mencionó que en el último que llevaron adelante, casi el 100% de la plantilla de empleados estuvo conectado.

“Reconversión positiva”

Matías Ricardi es fotógrafo y siempre estuvo dedicado al ámbito audiovisual dentro de fiestas. Hace tres años, fundó la productora audiovisual Bardolino Films para poder abarcar otro segmento del mercado: las fotografías de productos. Como en ese entonces los eventos eran los que dejaban más ganancias, nunca pudo dedicarse de lleno al proyecto pero con la llegada de la pandemia Ricardi pudo reconvertirse.

Explicó que, a su entender, “es una reconversión positiva” porque no se aleja mucho de lo que venía haciendo ni de lo que le gusta. Además, tampoco tuvo que vender gran parte de los equipos, por lo que eso le permite retomar la actividad cuando los eventos vuelvan.

Si bien en su nuevo rol, Ricardi pudo encontrar una demanda significativa, comentó que “los números siguen sin cerrar”. Subrayó que hay semanas que tiene mucha actividad, pero luego puede llegar a pasar un mes sin obtener un trabajo que colme sus expectativas de ingreso. “No da ganancia pero no da pérdida. Estoy recibiendo un 5% de lo que estaba cobrando antes”, añadió.

De igual modo, insistió que hasta ahora está conforme en cómo se vienen dando las cosas, por lo que es de esperar que los ingresos aumenten en la medida que pasa el tiempo. “Si dicen que una empresa lleva ocho años para que dé ganancias, yo estoy casi en la mitad”, afirmó. Además, una vez que pase la pandemia, espera seguir adelante con los eventos ya que tiene varios en agenda.