Florencia Nobelasco - Especial para Cromo
Tres ingenieras desarrollaron una app de movilidad asistida para personas ciegas y con baja visión. Actualmente están en conversaciones con la Intendencia de Montevideo para implementarla en el sistema de transporte.
Victoria Tejera, Valentina Kunze y Stephanie Mendonça recientemente se graduaron como ingenieras en Informática de la Universidad de Montevideo. Cuando buscaron opciones para su proyecto final de carrera tenían claro que querían “hacer algo que pudiera ayudar a alguien”, contaron a Cromo.
Les encantó la idea de hacer una aplicación de transporte que facilitara los traslados de las personas con discapacidad visual.
“Realmente podíamos hacer una diferencia. Además se ajustaba muy bien a lo que nosotras queríamos lograr del proyecto: que fuera solo de software. Hacer una aplicación móvil se ajustaba súper bien”, dijo Kunze.
Durante 2021 trabajaron en su desarrollo y actualmente están realizando los ajustes finales para que la app pueda estar disponible.
La aplicación es similar a Cómo ir, pero cuenta con “algunas funcionalidades extra para personas ciegas o con baja visión. Ese es su plus”, dijo Tejera.
Muchas de las funciones fueron agregadas en base a reuniones que las ingenieras tuvieron con la Fundación Braille, la Unión Nacional de Ciegos del Uruguay (UNCU) y diferentes centros vinculados a la comunidad ciega del país.
La app tiene dos modos de funcionamiento: Uno es asistido totalmente por voz y el usuario no precisa interactuar con el celular. En el segundo modo la aplicación utiliza el lector de pantalla que ya existe en los teléfonos móviles pero además el usuario debe confirmar acciones mediante botones.
Se diferencia de otros servicios similares porque acompaña al usuario durante todo el viaje dándole indicaciones auditivas. “Cuando la persona comienza un viaje, la app le indica a qué distancia se encuentra su ómnibus, una vez en viaje le indica en qué parada se tiene que bajar. Si perdió el ómnibus también le avisa. Si se pasó de parada la asiste para que pueda llegar al destino marcado originalmente”, dijo Mendonça.
Otra función extra es la posibilidad de que el usuario pueda compartir su viaje con algún contacto. En ese caso, la persona recibirá mensajes que le avisarán los cambios de estado: si salió de su casa, llegó a la parada, subió al ómnibus y bajó de él.
“Muchos ya están acostumbrados a andar en ómnibus pero hay muchos otros que todavía no y les cuesta más el proceso de independización. La idea es poder acompañarlos y apoyarlos al mismo tiempo que se le da seguridad a su entorno”, explicó Mendonça.
Para facilitar aún más la independencia de los usuarios, también agregaron a la app la posibilidad de programar un viaje. Si una persona en la mañana define que hará un viaje a la tarde, la aplicación le avisará antes de llegada la hora y le enviará notificaciones para que pueda salir a tiempo del lugar donde se encuentre.
Una de las funciones que más les solicitaron a las ingenieras fue que, ya en la parada, la app avise al usuario a qué distancia está su ómnibus. Esto hace que la persona no tenga que pararlos a todos para saber si es el suyo. Incluso, “si antes del suyo va a estar llegando algún otro cercano también le avisa para que no lo pare de forma errónea”, explicó Tejera.
La aplicación estará disponible para Android e iOS y para su funcionamiento será necesario contar con conexión a internet y con una app de mapas como Google Maps.
Carla Trivelli es psicóloga y presidenta de la Fundación Braille. Tiene baja visión, algo que le dificulta ver los ómnibus a distancia. “Si es uno que tiene determinado color es más fácil, ya ver el número me es imposible hasta que no está parado”, dijo a Cromo.
Trivelli probó la aplicación en sus fases de testeo y le resultó “fabuloso” que le avise cuando está por venir su ómnibus. “Es fantástico porque realmente lo que nos pasa a nosotros es que vamos a la parada y si no hay nadie tengo que parar todos los ómnibus, ya es un punto de estrés”, explicó.
Siente que la aplicación le da autonomía, confianza y le saca el estrés. Elimina “esa frustración e incomodidad de salir y no saber si vas a poder tomar en tiempo y forma el transporte que estás esperando”, agregó.
Las ingenieras destacaron que la aplicación brinda independencia y seguridad a quien la utilice. Se adapta a cualquier rango de edad y conocimientos de la persona en cuanto al manejo del celular. También acompaña al usuario desde el momento en que sale de su casa, “por comando de voz le da todas las indicaciones para llegar a la parada”, dijo Tejera.
El proyecto surgió por el interés de la intendencia de Montevideo en mejorar la accesibilidad. Luego de algunas reuniones entre las ingenieras y representantes del gobierno departamental llegaron a la idea actual de la app.
La intendencia brindó la base de datos con la información que las ingenieras necesitaban para poder desarrollar la aplicación. “Fue un gran plus, tener la seguridad de que íbamos a poder acceder a la información necesaria”, dijo Kunze.
Las ingenieras tienen la intención de donar la app a la Intendencia de Montevideo, actualmente están en conversaciones para que eso pueda suceder.
Trivelli opinó que para que la inclusión de las personas ciegas en la sociedad sea efectiva, el transporte es el primer paso, porque permite acceder a la educación, al trabajo y a la cultura. “Primero tenemos que llegar a determinado lugar para que después podamos tener conocimiento o lo que sea”.
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