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Vázquez, el hombre del knock out
El politólogo Gerardo Caetano señaló que el triunfo frenteamplista tiene “carácter de encrucijada histórica” tras consolidar el poder de un partido político que repite por tercera vez su actividad en el gobierno con mayoría legislativa propia, y representa un golpe para los partidos tradicionales incluso mayor que el del 2004 cuando el Frente Amplio obtuvo su primera presidencia.
Entrevistado por el periodista Leandro Gómez de El Observador TV, Caetano reflexionó sobre la particularidad del clima electoral de estos comicios, donde factores como la figura nueva de Luis Lacalle Pou y los resultados (equívocos) de las encuestas determinaron una enorme expectativa para la oposición.
“Blancos y colorados creyeron que había posibilidades de triunfo. Lacalle Pou, (Pedro) Bordaberry y el país esperaban otro resultado, por eso la elección del 26 de octubre fue como un golpe de knock out”, agregó.
A continuación, el experto ahondó en la figura de Vázquez, recordando su “singular” trayectoria en la política uruguaya, poco similiar al común de los candidatos de izquierda. “No militó en los 60` y llegó tarde a la política. Su trayectoria tiene que ver con la militancia social de una persona que en un barrio obrero hace labor social, pero no es la trayectoria de un hombre de izquierda”, concluyó.
En este sentido, el politólogo describió la historia del candidato como una historia de ascenso social, así como también de un empresario y médico muy exitoso.
Para Caetano, buena parte del carisma de Vázquez nace de su labor y vocación como oncólogo. “Es un hombre acostumbrado a tratar con la vida y la muerte. A orientar y a tomar decisiones muy difíciles, cargando con una mochila de responsabilidad muy grande”.
Hacia el final, Caetano habló del estilo de gobernar de Vázquez y aclaró que su forma de construir política es antitética a la de José Mujica. “Tabaré administra sus silencios y sus dichos. Elige cuándo hablar y sobre qué”, explicó.
Por último, agregó que Vázquez no alcanzará el protagonismo que Mujica logró a nivel internacional, entre otras cosas, porque no lo quiere. “Le importa más liderar un gobierno exitoso que proyectarse como símbolo”, finalizó.
