Los bancos de la zona euro endurecieron de forma inesperada las condiciones de acceso al crédito para las empresas durante el tercer trimestre de 2025, según la última Encuesta de Préstamos Bancarios del Banco Central Europeo (BCE).
Aunque el ajuste fue moderado, con un endurecimiento neto del 4%, supone un giro respecto al trimestre anterior, cuando las entidades habían relajado levemente los criterios (-1%) y anticipaban mantenerlos estables.
El BCE atribuye este cambio a un aumento de los riesgos percibidos sobre las perspectivas económicas, así como a la elevada incertidumbre geopolítica y comercial, factores que han llevado a las entidades a aplicar una mayor discriminación entre sectores y empresas. En algunos casos, los bancos han intensificado sus procedimientos de análisis y seguimiento del riesgo crediticio.
Divergencias entre países
Entre las principales economías del bloque, Alemania registró un endurecimiento neto de los estándares crediticios, mientras que en España, Francia e Italia los criterios se mantuvieron sin cambios.
El ajuste fue similar entre grandes empresas y pymes, con tasas netas de endurecimiento del 4% y 3%, respectivamente.
Crédito a hogares: estabilidad en hipotecas, tensión en consumo
En el segmento minorista, los criterios para la concesión de hipotecas permanecieron estables (0%), contrariamente a la ligera relajación que se esperaba. En cambio, el crédito al consumo experimentó un endurecimiento neto del 5%, en línea con las previsiones.
El BCE destaca que la percepción del riesgo continúa siendo el principal factor detrás de la restricción del crédito al consumo.
De cara al cuarto trimestre de 2025, las entidades anticipan que los estándares se mantendrán prácticamente sin cambios para las empresas, se endurecerán ligeramente para las hipotecas y más significativamente para el crédito al consumo.
Aumento en las tasas de rechazo
El informe también señala un incremento en la proporción de solicitudes de préstamos rechazadas en todas las categorías, especialmente en el crédito al consumo.
En el caso de las hipotecas, la tasa de rechazo subió un 5%, el primer aumento desde el inicio de 2024, rompiendo con la tendencia de trimestres previos.
Por países, los rechazos aumentaron en España y Alemania, mientras que Francia e Italia mantuvieron sus niveles.
Demanda: leve repunte empresarial y fuerte impulso hipotecario
Pese al endurecimiento, la demanda de crédito empresarial aumentó ligeramente (2%), impulsada por la caída de los tipos de interés y las necesidades de refinanciación, aunque los bancos la siguen calificando como “débil”.
La demanda de hipotecas registró un fuerte crecimiento neto (28%), apoyada en la mejora del mercado inmobiliario y en el descenso de los tipos, mientras que el crédito al consumo se mantuvo prácticamente estable (1%).
Para el cierre de 2025, los bancos esperan que la demanda de crédito corporativo se estabilice, mientras que la demanda hipotecaria continuará al alza, aunque con menor intensidad, y el crédito al consumo registrará un leve repunte.
FUENTE: El Observador