Millones de estudiantes retomaron las clases en las últimas semanas a lo largo de Estados Unidos y muchos se enfrentaron a algunos cambios, que van desde la prohibición de usar un teléfono celular en el horario escolar, a la presencia de detectores de metales en las escuelas o modificaciones en el código de vestimenta.
De los 20 distritos escolares más grandes del país, al menos siete ya prohíben el uso de teléfonos móviles durante el horario escolar o planean hacerlo próximamente, reveló una investigación reciente del diario The Washington Post. Otros siete distritos imponen restricciones significativas, como prohibir su uso durante las clases, aunque permiten su utilización durante el almuerzo o entre clases.
Entre las nuevas medidas, el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles, el segundo más grande del país, votó en junio a favor de prohibir el uso de teléfonos durante toda la jornada escolar. Asimismo, en el condado de Clark, Nevada, los estudiantes de secundaria deberán guardar sus dispositivos en bolsas especiales durante el día a partir de este otoño.
Esta tendencia, que también se ha visto en Indiana, Luisiana, Carolina del Sur y Florida, donde se han implementado normas que limitan el acceso a los celulares en el ámbito escolar, se da en medio de la preocupación por la distracción que los teléfonos generan en los estudiantes. Una encuesta realizada por el centro de investigación Pew señala que más del 70% de los profesores de secundaria consideran que la distracción por teléfonos móviles es un "problema grave".
Detectores de metales en Florida
En el condado de Broward, en Florida, el comienzo de las clases hace unas semanas fue algo caótico, después de que formaran largas filas frente a las escuelas por la instalación de detectores de metales.
"Se trata de una medida adicional de seguridad para nuestras escuelas", dijo el superintendente del distrito, Howard Hepburn, que aseguró que se trata sólo de un aspecto dentro de un plan general de seguridad escolar. "¿Seremos muy eficaces el primer día? No, aún estamos resolviendo los problemas, por lo que puede haber algunos pequeños retrasos, nuestros directores de escuela y el personal trabajarán con ustedes", manifestó, según recogió la cadena NBC Miami.
Este es el primer año en el que todas las escuelas secundarias del distrito, el sexto más grande del país, cuentan con estos detectores. La medida forma parte de los intentos por mejorar la seguridad en el distrito, donde en 2018 se registró la masacre de Parkland, cuando un ex alumnó mató a tiros a 17 personas e irió a otras 17 en el colegio Marjory Stoneman Douglas, en uno de los tiroteos escolares más graves de la historia estadounidense.
Códigos de vestimenta: no a las crocs o buzos con capucha
En algunas escuelas del país se implementaron además códigos de vestimenta para ir a clases, como en el Instituto Bessemer City de Alabama, donde los estudiantes podrían enfrentar una suspensión si utilizan sandalias abiertas, crocs o buzos con capucha.
El director de la escuela, Stoney Pritchett, dijo que las autoridades quieren que los estudiantes puedan manejarse en un entorno de aprendizaje satisfactorio y limitar las distracciones, lo que incluye artículos de ropa. Además, en declaraciones a WBRC, filial de CNN, señaló que la intención no es disminuir la creatividad de los estudiantes, sino prepararlos para escenarios del mundo real en los que algunos atuendos pueden no ser apropiados o aceptables.
Las sudaderas con capucha también fueron prohibidas en las escuelas públicas de Flint, en Michigan. Según el superintendente Kevelin Jones, muchos escolares usaban estas prendas para esconderse mientras realizaban actividades dañinas.
Políticas educativas brillan por su ausencia en las plataformas electorales
Si bien muchos pedagogos señalan un momento crítico en la educación de Estados Unidos, no abundan planes detallados para el sistema de escuelas públicas. En la campaña electoral, ni Donald Trump ni Kamala Harris hicieron eje en este punto.
Trump promete desmantelar el Departamento de Educación de Estados Unidos de la mano de su plan de audaz ajuste estatal. Y la vicepresidenta Kamala Harris, en sintonía con su compañero de fórmula Tim Walz, quiere frenar los tiroteos en las escuelas.
Por lo demás, los puntajes de lectura de los estudiantes han caído a mínimos de 20 años, los estados enfrentan escasez de maestros y la segregación racial en las escuelas se potenció.