Comenzó a trabajar a los 16 años como telefonista para ayudar a su familia que estaba viviendo una situación económica desfavorable, y a los 27 años logró dedicarse a su pasión, la cocina. Comenzó a vender productos gastronómicos por su cuenta y por necesidad, ya que la empresa donde trabajaba como secretaria de gerencia perdió una licitación vital y ella se quedó sin empleo.
Esta nota es exclusiva para suscriptores.
Accedé ahora y sin límites a toda la información.
¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá