El ministro del Interior, Luis Alberto Heber, dijo que en la resolución por el caso Stefanía Quirque Bello –la mujer recordada en Uruguay desde 2008 por intentar matar a la esposa de su amante tres veces, que escapó a su pena de prisión domiciliaria este miércoles– no se expresaba "una necesidad de custodia", sino "simplemente una ronda de control que hacía la policía en distintos horarios" para seguir a la mujer.
Sin embargo, de acuerdo a la resolución judicial a la que accedió El Observador, la implicada debía esperar la extradición a Brasil en su domicilio con una de las tobilleras electrónicas que cuenta el Ministerio del Interior o, de lo contrario, bajo custodia policial.
La jueza a cargo del caso, Beatriz Larrieu, pidió que se coloque tobillera y que en caso de que no fuera posible su uso, un control diario que debía cumplir el mismo requisito de seguridad que cubre el dispositivo electrónico.
"Dispónese que el contralor de arresto domiciliario se hará mediante dispositivo electrónico de monitoreo y en caso de no ser posible, mediante contralor diario por la autoridad policial correspondiente al domicilio", dice el texto de la resolución judicial de Larrieu.
En los casos de violencia doméstica, que es uno de los usos más habituales de tobillera electrónica, se dispone de guardia policial de 24 horas en los casos en que no exista tobillera disponible.
Sin embargo, en declaraciones a Universal la jueza dijo este jueves que no era necesaria una guardia de 24 horas. "Yo dispuse arresto domiciliario con dispositivo electrónico (tobillera) o, en caso de que no hubiera, con control policial. (El control policial diario) implica que controlan, que pasan por el domicilio a verificar que esté allí, no es necesario que haya un policía en la puerta. La falta de tobilleras es un problemas en muchos casos", dijo. Su evaluación, según explicó, partió de la base de que la mujer había "colaborado en todas las etapas" y era una persona "ubicable", que tenía trabajo y familia.
El ministro del Interior señaló que si bien no cuestiona las decisiones del Poder Judicial, a su juicio, se deberían haber aplicado medidas "más importantes".
Larrieu afirmó que no va a hacer comentarios sobre los dichos de Heber, porque su decisión, según entendió en ese entonces, le pareció "suficiente". "El tema de la peligrosidad es muy difícil de evaluar”, agregó.
El ministro había señalado que eran necesarias para un caso así medidas más importantes. “Nosotros no cuestionamos las decisiones del Poder Judicial. Las aceptamos, coincidamos o no coincidamos con ellas (...) Ahora estamos haciendo la investigación, esperemos que nos den todos los instrumentos como para ahora sí ocuparnos nosotros de la captura de una persona que, a nuestro juicio, debería haber tenido alguna medida cautelar más importante de la que se puso, pero bueno, así fueron los hechos”, expuso.
Tras un aviso de la policía, las autoridades notificaron al ministerio que la mujer había escapado.
Quirque es requerida para extradición por tráfico trasnacional de estupefacientes y asociación para delinquir.
Antes de la reciente fuga la uruguaya había sido detenida el 6 de agosto de este año, también en Piriápolis. Ese día, el auto en el que se trasladaba por la Ruta Interbalnearia fue identificado y, ya en la ciudad, estacionó sobre la calle Sanabria. Hasta allí fue un patrullero y la policía la detuvo en plena calle. En esa fecha el juez actuante dispuso su arresto domiciliario preventivo a la espera del pedido formal de extradición por el término de 40 días desde la notificación. Eso no ocurrió y este martes se fugó.
Quirque fue procesada en Uruguay en 2009 por el delito de coautora de homicidio especialmente agravado por la premeditación y muy especialmente agravado en grado de tentativa, luego de intentar asesinar por tercera vez a la esposa de su amante. Un año antes, junto a su amante, el arquitecto Martín Somoza, contrató a dos sicarios para asesinar a la esposa del profesional, homicidio que no resultó pero que dejó herida de bala a la víctima. Ataques por el estilo estuvieron asociados a hechos premeditados entre Somoza y Quirque.
Tras el encarcelamiento, en noviembre de 2011 la uruguaya se fugó de la Cárcel de Mujeres (Unidad 5) del INR durante el horario de visita. En ese momento escapó hacia Brasil, pero regresó a Uruguay meses después, donde fue recapturada en 2012. Ese procedimiento fue en Las Tocas (Canelones) donde vivía con el cabecilla de una organización dedicada al tráfico de drogas.
En ese momento, tenía un pasaporte italiano falso denunciado hacía tiempo como robado en Montevideo, por lo que se le sumó un nuevo delito. Fue procesada por el delito de falsificación de pasaporte en calidad de coautora en reiteración real con falsificación de certificado en calidad de coautora.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá