Nacional > FRENTE AMPLIO
Ronda de abrazos y un "no se vaya": así fue el último paro de Fernando Pereira con el PIT-CNT
Como la ronda de saludos en la que incurren los jugadores de fútbol en el medio de la cancha después de un gran partido, Fernando Pereira comenzó este miércoles a abrazar uno a uno a los dirigentes del PIT-CNT, cuando avenida Libertador aún coreaba "Los Orientales", interpretada sobre el escenario por el arachán Giovani "Turco" Fabra.
Al bajar las escaleras y conversar con la prensa, el presidente de la central sindical confesó que se aprestaba a aceptar la propuesta de ser candidato a presidente del Frente Amplio, en unas elecciones internas en la que se posiciona como favorito por recoger el apoyo de los grupos de más peso en la oposición. "Se está cerrando mi etapa sindical. Es un día diferente para mí como tantos otros en la vida muy emotivos. Siento en el alma que hoy ha sido el último acto como dirigente sindical", dijo Pereira, que a la noche y con una carta, confirmó que aceptará la candidatura la presidencia del Frente Amplio.
Es que Pereira asegura que ya iba camino a cerrar una larga etapa como sindicalista —con un punto final previsto para el Congreso del PIT-CNT de noviembre—, pero los respaldos partidarios no hicieron más que precipitar esa despedida. La propuesta de postulación fue impulsada por sectores como el MPP, el Partido Comunista, Asamblea Uruguay, Fuerza Renovadora y la Vertiente Artiguista para que sea candidato a encabezar la fuerza política.
Según afirmó pedirá licencia en la central sindical. Ante todo, el paro de este 15 de setiembre, con miles de manifestantes apostados a lo largo de la avenida del Libertador, unos 200 ómnibus arribados desde otras partes del país y una centena de jinetes, fue su última movilización a la cabeza del PIT-CNT.
A pesar de no tener una cuenta meticulosa de la cantidad de instancias vividas como sindicalista —que se difuminan entre "cientos y cientos"—, Pereira no titubea a la hora de recordar la primera, acontecida el 30 de setiembre de 1985, antes incluso de ser un dirigente de su gremio. "En aquel momento era por 20 trabajadores que estaban cesando del Consejo de Primaria. Fue una movilización de varios días y se logró reincorporar a los trabajadores", relató a El Observador.
El hoy presidente del PIT-CNT dio sus primeros pasos en la Asociación de Funcionarios de Primaria (Afuprim), desde la que militó bajo la influencia de la corriente de la Acción Sindical Uruguaya (ASU). Uno de sus más firmes referentes fue el exconsejero Héctor Florit, entonces dirigente de la Federación de Magisterio.
"Afuprim y estos jóvenes militantes se incorporan al movimiento sindical con mucho optimismo", recordó Florit en diálogo con El Observador. "Traían una visión unitaria, mucho más moderna, de que los trabajadores de un mismo ramo tienen que estar en un mismo sindicato", expuso el exsindicalista y exdirector general de Primaria. Esa línea confluyó finalmente en la integración en una misma agrupación de funcionarios docentes y no docentes, tradición que se mantiene al día de hoy en la Federación Uruguaya de Magisterio y Trabajadores de Educación Primaria (FUM-TEP).
Esas mismas raíces fueron este miércoles su punto de partida en el último paro. Tras una gira por radios durante la mañana, Pereira se acercó a la movilización sobre las 11 horas, y se apostó en el mismo espacio en que se nuclearon militantes y dirigentes de los sindicatos de la educación, a un costado de la Plaza 1° de Mayo. Allí permaneció cerca de media hora, rodeado de saludos y de solicitudes de fotos.
Sobre las 11:30 emprendió el rumbo camino abajo por Libertador hacia el escenario. Lo esperaba un largo trecho de alientos y puños en alto. "Quedó chica la movilización", bromeó el senador del MPP, Alejandro Sánchez, cuando se lo cruzó a un costado del Palacio Legislativo.
Unas cuadras más abajo, sobre una de las esquinas, estaba José Fazio, dirigente de la Unión Nacional de Obreros y Trabajadores del Transporte (Unott) y aliado de larga data en la corriente sindical Articulación que hoy Pereira dirige. "¡No se vaya!", le exclamó entre risas el sindicalista a su viejo amigo, antes de fundirse en un abrazo. El trayecto de Pereira continuó casi ininterrumpido entre carros de chorizos, banderas de colores y saludos lanzados desde las veredas.
Ya a los pies del escenario entabló una charla amistosa con otro viejo conocido: Álvaro Padrón, uno de los integrantes de su grupo de amigos "El Ramírez", bautizado años atrás por los encuentros en el club de pesca del Parque Rodó entre antiguos sindicalistas. En determinado momento, Padrón le dijo algo al oído y lo acompañó unos metros hacia un costado, donde esperaban sentados en sus respectivas sillas playeras el expresidente José Mujica y la senadora Lucía Topolansky. El exmandatario ha sido uno de los principales impulsores para vincular a Pereira con el Frente Amplio, más allá de su militancia de base y de integrar la Vertiente Artiguista.
Tras un breve saludo que concluyó con un ademán para hablar más tarde por teléfono, Pereira retornó a los pies del escenario. Como presidente del PIT-CNT, posó arriba del estrado durante las dos oratorias de la jornada. Pero el histórico referente no tomó en ningún momento la palabra para dirigirse a una avenida Libertador colmada de sindicatos.
—¿No le hubiera gustado hablar en su último paro?
—Decidimos que no, porque mañana la discusión sería si habló quien va a ser candidato o no de una fuerza política.
A pesar de ya tener "pensada su salida", el presidente del PIT-CNT admitió sentir "un poco de dolor" por apartarse de una conducción en la que está abocado desde hace 16 años. "Pero al mismo tiempo con la convicción que tenemos un gran movimiento sindical, que no necesita de ningún mesías para dirigirse bien. Precisa de la gente", planteó, y añadió que la extensa trayectoria termina en "un amor brutal" hacia el movimiento sindical.
Así, en una multitudinaria manifestación en que su figura pasó a un segundo plano en el fondo del estrado, Fernando Pereira vivió su último paro con el PIT-CNT. La próxima ocasión lo tendrá, como adelantó a la prensa, "del otro lado de la baranda".
