Marcelo Morillas

Moneda única o para comercio: el plan que Brasil propone pero sin impacto en la región, según analistas

El plan fue promovido por el presidente brasileño Lula da Silva

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24 de enero de 2023 a las 05:04

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No fue lo que parecía, o lo que se interpretó en un principio. El domingo, el medio Financial Times informó que Brasil y Argentina comenzarían trabajos para establecer una moneda común. El dato surgió a través de un contacto que el medio tuvo con autoridades argentinas.

En principio su uso sería bilateral y luego se invitaría a otros países de la región a acompañar la idea. Con ese fundamento y con base en esa información lo más lógico era que la divisa fuera utilizada dentro del Mercosur, estableciendo así una especie de euro regional. Luego hasta se deslizó su nombre: Sur. Pero la noticia no era esa y la medida no tenía tal magnitud.

El presidente de Brasil, Lula da Silva, habló este lunes  sobre una moneda que se utilizaría para intercambio comercial, no una única. De una cosa a la otra hay un largo trecho. Para expertos locales si la medida hubiera sido la primera sería impracticable. Y la segunda se convierte en algo de poca monta y que también pronto se desvanecerá, más allá que haya sido parte de los discursos en Casa Rosada de los presidentes Alberto Fernández y Lula da Silva.   

"¿Por qué no intentar crear una moneda entre los países del Mercosur? Creo que va a suceder y creo que es necesario que suceda”. El comentario lo realizó el presidente de Brasil, Lula da Silva, este lunes durante una conferencia de prensa conjunta con Fernández.

Alberto Fernández
Lula da Silva y Alberto Fernández

La intención que ambos presidentes mostraron es avanzar en una moneda común para intercambio comercial entre  Brasil y Argentina que luego pueda extenderse a toda la región. Ninguno de los dos profundizó sobre la implementación de esa divisa, pero sí expresaron que sería una manera de evitar la dependencia del dólar en transacciones comerciales bilaterales y regionales.

 “Hay países que a veces tienen dificultades en adquirir dólares y se pueden establecer acuerdos que después los bancos centrales fijen el tipo de moneda para hacer el intercambio comercial”, dijo Lula da Silva. “Dios quiera que nuestros ministros del área económica y los presidentes de los bancos centrales tengan la inteligencia y la sensatez necesaria para que demos un salto de calidad en nuestras relaciones comerciales y financieras”, añadió.

A su turno, Fernández dijo que no había certezas de cómo funcionaría una “moneda común entre Argentina y Brasil y tampoco en la región. Pero lo que sí sabemos es cómo funcionan las economías dependiendo de monedas extranjeras para poder comerciar. Y sí sabemos lo nocivo de todo eso”.

Moneda única o para comercio: del delirio a algo ínfimo

El economista y socio de CPA Ferrere, Gabriel Oddone, expuso que una cosa fue lo que se había anunciado en un primer momento y otra lo que terminó siendo. “Una cosa es una moneda común, un área monetaria común y una autoridad económica común. Y otra es una moneda para facilitar el comercio”, dijo a El Observador.

Explicó que una divisa común constituye un hito  y con una coordinación tan importante que podría demorar décadas establecerla. Más allá de eso afirmó que “Argentina y Brasil tienen todos los requisitos para no ser un área monetaria común. No tienen credibilidad en sus políticas monetarias. Una moneda común en un escenario como ese era totalmente un delirio”, sostuvo.

Por el contrario “si de lo que se habla, como tantas veces, es de una moneda que permita cancelar pagos es algo tan ínfimo que no debería ser objeto de un anuncio de dos presidentes”, afirmó.  Por eso el tema no tiene relevancia para Oddone. “Hay 200 millones de temas que sí son relevantes (en política regional) y poner esto arriba de la es una mezcla de ingenuidad o de simpleza que no sé cómo describirlo”, concluyó.  

Moneda única o para comercio: peso argentino debilitado y el ombligo de Brasil 

La economista de la Unión de Exportadores (UEU), María Laura Rodríguez, también señaló que en realidad lo que se está pensando no es una moneda única, al estilo del euro, que elimine al real o al peso argentino. Recordó que está vigente el Sistema de Monedas Locales (SML) que sirve para algunas transacciones de comercio exterior. Como ejemplo, el exportador uruguayo vende en pesos a Brasil y desde ese país se paga en reales y hay una compensación entre ambos bancos centrales.

“Pero para eso se toma la conversión a dólar para hacer la compensación. Entonces el dólar no se elimina de la ecuación”, explicó.

LUIS ROBAYO / AFP
Pesos argentinos

Agregó que el tema de fondo es que Argentina quiere eliminar el dólar de la ecuación porque no cuenta con moneda estadounidense para abonar sus importaciones. “Están buscando un mecanismo para eso. Pero la realidad es que el peso argentino está tan debilitado. Más allá de con qué moneda se compare, el problema es el propio peso argentino. La capacidad de compra que tiene”, indicó Rodríguez.

Gonzalo Oleggini, consultor en comercio exterior y profesor universitario dijo que Brasil tiene problemas con el comercio con Argentina, con serios inconvenientes con sus importaciones y exportaciones. “Básicamente es por la cantidad de tipo de cambio que tiene Argentina. Entonces, está tratando de decirle: busquemos algo común. Pero eso no tiene nada que ver con hacer una moneda común”, sostuvo.

También recordó que en 2008 se implementó el Sistema de Monedas Locales. “Hace 15 años no funcionó”, aseguró. “Brasil está pensando en solucionar sus problemas bilaterales con Argentina. Se está mirando su ombligo.”, complementó.

“Pero lo quiso hacer tan grande para que no sonara particular y se terminó desvirtuando en la explicación”, expuso. Para Oleggini, Brasil aprovechó para enviar un mensaje político de tratar de disminuir la dependencia con el dólar, alineándose así con países como Rusia y China que también buscan lo mismo.

“Ahora, para que esto que quiere hacer funcionar realmente funcione hay un trecho enorme. Es más discursivo que práctico. Seguramente naufrague en los próximos meses y sea una anécdota más de la política regional”, concluyó.

 

 

 

 

 

 

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