El fútbol es uno de los
deportes donde la homofobia y la
discriminación todavía son un problema corriente. Muchos deportistas se niegan a dar a conocer su sexualidad por miedo a rechazos, retiros de sponsors o incluso despidos.
Con esto en mente, en Madrid se creó GMadrid Sports, un club deportivo enfocado hacia la comunidad LGBT pero que abre sus puertas a todos por igual. Allí se encuentra el equipo de Fútbol 11, que cuenta, según
Verne, cuenta con 20 jugadores que a pesar de estar practicando hace pocos meses ya se plantean participar de la liga municipal en octubre.
Algunos jugadores tienen ya experiencia en otros clubes, como Rubén de Tomás, que jugó en un equipo de tercera, donde nadie sabía que era gay. "Había mucho
machismo y supongo que no lo dije por miedo a que no me sacaran a jugar o a que hiciesen bromas", dijo a Verne. La experiencia de José Manuel Garoz fue diferente. Cuando jugaba en un equipo de juveniles de segunda, sus compañeros se enteraron de su sexualidad, y terminaron echándolo.
El director del Observatorio español contra la LGBTfobia, Paco Ramírez, afirmó de que la homofobia "es la mayor discriminación en ese deporte, por delante del machismo y la xenofobia", y además, los clubes "no se toman en serio este tipo de discriminación y la hinchada es homofóbica".
Este equipo, de a poco, busca romper con el estigma.