Este blog fue publicado originalmente en el blog Not Only Salad Blog
¡Estoy tan tan feliz con esta receta que quiero que todos la prueben! Se trata de una torta “pound cake” de mandarinas, y mi emoción no sólo se debe a su increíble sabor y textura, sino también por cómo la hice. Si les digo que para cocinarla no prendí el horno…¿me creen?
Las tortas pound cake son típicas de la cultura anglosajona. Su nombre se debe a la unidad de medida pound, la libra, que es la que usan a diferencia de nosotros que medimos en gramos. Para hacer esta torta se precisa una libra de cada uno de sus ingredientes: manteca, azúcar, harina, huevos, y nada más. Hoy en día existen muchas variantes de esta torta que no siguen a rajatabla la regla, pero mantienen la esencia de la original. Se logra una masa compacta y húmeda, de textura aterciopelada y delicado sabor.
Es perfecta para cortar y rellenar con ganache, dulce de leche, crema batida y frutas, o lo que se imaginen. Sin embargo, es tan rica que generalmente se sirve sola, apenas bañada con un glasé o espolvoreada con azúcar impalpable.
Hoy, mi versión es de mandarinas aprovechando su época de esplendor. Los cítricos son el sol de otoño, y bien vale aprovecharlos!
La torta fue hecha con un savarín cerámico colocada dentro de una olla de hierro fundido con tapa, y quedé fascinada con los resultados! No sólo su forma es divina, sino que también el tamaño y su desmolde son perfectos. Si la hubiese hecho en el horno a 180°C, hubiese demorado aprox 50 minutos. En cambio, hecha de esta forma me tomó apenas 35 minutos y usé el fuego más bajo de todos. Ahorro de tiempo y energía, rock n’roll!
El savarín entra perfecto en una olla de hierro fundido con tapa de 24 cm, y cumple la función de cocinar a baño maría, pero sin agua. Simplemente se coloca el accesorio dentro de la olla, se tapa y se deja cocinar la receta el tiempo necesario. Me encantó como quedó el aspecto de mi torta, con un look dorado parejo espectacular (que por casa dijeron que parecía de dibujito animado).
Además, la torta quedó super húmeda, esponjosa, y perfectamente cocida hasta el centro. Cuando la hagan en casa, para comprobar que está hecha tienen que pinchar con un palito de madera (yo guardo uno de brochette a mano). Si sale seco con algunas migas pegadas, está lista!
Y les paso un tip para ahorrar (más) energía! Si al pinchar con el palito, éste sale apenas húmedo, significa que le falta muy poco a nuestra torta. Apaguen el fuego y dejen bien tapada la olla, que con el calor remanente va a terminar de cocinarse.
La torta quedó super húmeda, esponjosa, y perfectamente cocida hasta el centro. Cuando la hagan en casa, para comprobar que está hecha tienen que pinchar con un palito de madera (yo guardo uno de brochette a mano). Si sale seco con algunas migas pegadas, está lista!
Y les paso un tip para ahorrar (más) energía! Si al pinchar con el palito, éste sale apenas húmedo, significa que le falta muy poco a nuestra torta. Apaguen el fuego, que con el calor remanente va a terminar de cocinarse.
Let’s be honest… No hay torta más linda de pinta que la bañada con un perfecto glasé. Muchas veces me consultan cómo hago para que quede así como en la foto y, la verdad sea dicha, es muy fácil de lograr. Simplemente hay que cuidar la proporción de azúcar impalpable y líquido que mezclamos. Para bañar esta torta de mandarinas usé aprox 1 1/2 Tazas de azúcar impalpable, a lo que le agregué jugo de mandarinas muy de a poco.
El líquido se agrega de a poco porque es necesario ir mezclando y viendo la fluidez del glasé. Necesitamos que quede bien espeso y que fluya leeeentamente. Así es como obtendremos una torta bañada con dropping como les muestro acá.
Si se llegaran a pasar de líquido, que de vez en cuando nos pasa a todos, simplemente agreguen un poco más de azúcar impalpable para espesar la mezcla. Les va a parecer que el glasé está duro, lo sé, pero van a ver qué lindo queda!!
En cuanto al líquido, pueden usar agua, jugo de limón, de pomelo, de naranja, de mandarinas como en este caso, o darle un toque con su licor favorito.
*Stephanie Rauhut es gastrónoma profesional y autora del blog "Not Only Salad". Estudió cocina en Uruguay, en Francia, y tras haber tenido durante varios años su empresa de pastelería, se dedica actualmente a la comunicación gastronómica y de viajes.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá