A poco más de un mes de la muerte de Miguel Ángel Russo y luego de que Boca Juniors rindiera homenaje a su último director técnico en funciones mediante el "envío de una camiseta al cielo" sujeta con globos, un productor rural uruguayo sorprendió en las redes al identificar la casaca dentro de su campo.
El episodio tuvo lugar el martes en Cañada Nieto, localidad ubicada en el departamento de Soriano, a unos 251 kilómetros de Montevideo. En las fotografías se logra visualizar la dedicatoria que el club argentino elevó desde La Bombonera en manos del capitán Leandro Paredes y Claudio Úbeda.
"La camiseta homenaje a Miguel Russo que Boca Juniors mandó al cielo, cayó en la localidad rural de Uruguay Cañada Nieto. Un productor la encontró y subió estas fotos", informó la Agencia de Medios de Comunicación Nogoyá Radios.
La suelta de los globos formó parte de los actos de despedida que la institución dirigida por Juan Román Riquelme llevó a cabo en la fecha contínua al deceso del entrenador frente a Belgrano: los honores comenzaron desde el momento en el que la delegación se subió al micro rumbo al estadio, totalmente ploteado para su inmortalización.
Sobre la parte superior delantera del bus se observó una imagen de Russo y a su lado una de sus frases más célebres dedicadas al Xeneize: “A Boca nunca se le puede decir que no”.
Luego, en la previa del partido y antes del minuto de silencio en homenaje, fue entonces cuando Paredes y Úbeda se reunieron en el centro del campo. Allí recibieron una camiseta de Boca con la leyenda "1956 - ∞" sujeta con globos, para al instante, ser liberar hacia el cielo.