Internautas del barrio epicentro de los disturbios denunciaron interrupciones de la señal que les imposibilitaron realizar transmisiones en tiempo real de los enfrentamientos entre las autoridades policiales del gobierno y los manifestantes. El artista Leonardo Quintero fue uno de ellos, y dejó claro en su testimonio a El País de Madrid que, tras pisar la zona, le fue imposible ver o transmitir vídeos después de las 22:00 horas. “Parecía como si el internet estuviera caído. Intentamos poner un vídeo y aparecía cargando, pero jamás cargaba. No pudimos ver lo que estaba pasando en el barrio. Sabemos que hubo disturbios muy fuertes, gases lacrimógenos y helicópteros sobrevolando, porque los oíamos, pero en redes no había nada”, explicó.
Un vocero de las compañías radicado en Colombia dijo que la censura en el contenido se debía a la detección de publicaciones con imágenes violentas que el propio algoritmo de las plataformas detectaba para no infringir las normas de la comunidad. Pero ese mismo miércoles, la organización Netblocks, que se define como el observatorio de Internet, indicó que hubo fallas en el suministro de Cali, con un pico sobre las 16 horas del martes, que siguió sobre la madrugada.
"Confirmado: los datos de la red en tiempo real muestran que Internet se interrumpió en Cali (Colombia) en medio de disturbios sociales cuando las autoridades se enfrentan a los manifestantes con fuerza letal; incidente en curso", reportó.
Netblocks anunció que fue la segunda interrupción ocurrida en los últimos días, desde el inicio de las protestas. Y aseguró: “Las métricas de la red corroboran los informes de los usuarios sobre dificultades para conectarse en medio de protestas generalizadas y el uso informado de fuego real por parte de las fuerzas de seguridad”.
“La interrupción tiene un impacto parcial en la actualidad, pero es probable que limite significativamente el libre flujo de información desde el lugar de las protestas. Se está trabajando para monitorear la situación”, agregó.
Ante esto, cientos de usuarios pidieron a otros que "por favor" utilizaran servicios de VPNs (red privada virtual) para transmitir datos. Y seguidamente, casi como una consecuencia, el movimiento activista de hackers Anonymous detectó un "corte de señal de internet fijo y celular". Ese reporte llegó días después de que la propia organización se jactara de haber hackeado las páginas de Presidencia, del Senado y del Ejército colombiano luego de que estas presentaran fallas. "En el momento hay 42 % de cobertura en la ciudad de Cali”, detalló Anonymous.
Las autoridades, en cambio, atribuyeron los problemas de conexión al robo de cables de fibra óptica, paralelos a los disturbios. Movistar, una de las empresas mencionadas por Netblocks, por ejemplo, dijo que presentó fallas para al menos 7.000 clientes de Cali (distrito de Aguablanca) a raíz de estos supuestos actos de vandalismo, donde sus conexiones de cobre fueron robadas.
Emcali, la otra implicada, publicó por su lado un comunicado en el que da cuenta de que su servicio persistía funcionando en "óptimas condiciones". "No se realizan, de manera intencional, interrupciones masivas en la prestación de los servicios públicos o de telecomunicaciones”.
Pese a estos robos, que también fueron confirmados por otras autoridades vinculadas a los servicios de internet, buena parte de los opositores al gobierno aún se preguntan la causa de las fallas de la señal en Siloé, ya que ni siquiera forma parte de la misma Comuna que Aguablanca, donde se produjeron los saqueos, y tienen redes independientes.
