Pedro Sánchez elige como vocera a Elma Saiz, una socialista de Navarra partidaria de no castigar la inmigración ilegal
Saiz es la elegida por el presidente español para suceder a Pilar Alegría que deja el Gabinete de ministros para participar como candidata en las elecciones de Aragón en febrero.
22 de diciembre 2025 - 13:11hs
Elma Saiz, nueva ministra portavoz de Pedro Sánchez.
La nueva portavoz del Gobierno que sustituyó a Pilar Alegría en el gabinete de Pedro Sánchez es la navarra Elma Saiz, ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones desde noviembre de 2023, que suma ahora a sus competencias la de ejercer como voz del Ejecutivo en la segunda parte de la legislatura.
Según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), Saiz era hasta ahora la ministra menos conocida del Gobierno de coalición: solo el 15,2 % de los españoles sabía quién era, de acuerdo con el barómetro del pasado mes de octubre. Esa situación comenzó a cambiar tras la última reunión del año del Consejo de Ministros, desde la que asumió el papel de portavoz y pasó a comparecer de forma habitual desde La Moncloa para explicar los acuerdos del Ejecutivo y responder a las preguntas de los periodistas en un contexto político especialmente sensible.
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Experiencia previa como portavoz en Navarra
Para este rol, Saiz cuenta con experiencia previa. Entre 2019 y 2023 formó parte del primer Gobierno de María Chivite, donde ejerció como consejera de Economía y Hacienda y también como portavoz del Ejecutivo foral, un doble rol que la entrenó en la gestión política y comunicacional en escenarios complejos.
Nacida en Pamplona el 2 de diciembre de 1975, su vocación política se desarrolló en el Partido Socialista de Navarra (PSN-PSOE). Es licenciada en Derecho y máster en Asesoría Fiscal por la Universidad de Navarra, y construyó una carrera profesional combinando la consultoría jurídica y tributaria con la docencia universitaria.
Se afilió al PSN en 2003 y fue elegida parlamentaria foral entre 2005 y 2007. Más tarde se convirtió en la primera mujer delegada del Gobierno en Navarra, cargo que ocupó hasta 2012.
Su llegada al Consejo de Ministros
Tras varios años fuera de la primera línea, regresó a la política municipal como concejala en el Ayuntamiento de Pamplona y, posteriormente, como consejera de Economía y Hacienda del Gobierno Foral entre 2019 y 2023. En las elecciones de 2023 encabezó la lista socialista por Pamplona y ejercía como portavoz municipal cuando Pedro Sánchez la llamó para incorporarse a su Ejecutivo.
Desde noviembre de 2023 es ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, en sustitución del actual gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá.
Gestión en Seguridad Social y pensiones
Durante su etapa al frente del ministerio, Saiz mantuvo un perfil bajo, con escasas apariciones mediáticas, salvo en momentos puntuales como la propuesta de bajas laborales flexibles o el conflicto con asociaciones de autónomos por el nuevo esquema de subida de cuotas previsto para 2026, finalmente suspendido.
En este periodo continuó la reforma de pensiones iniciada por su antecesor, cerrando medidas pendientes como los incentivos a la jubilación demorada y la mejora de la jubilación parcial con contrato relevo.
También impulsó facilidades en el acceso al Ingreso Mínimo Vital (IMV) y destacó por la evolución del mercado laboral, que alcanzó un récord de 21,8 millones de afiliados, más de un millón más que al inicio de su mandato, un dato subrayado por el propio presidente del Gobierno al anunciar su nombramiento como portavoz.
Su mirada sobre las migraciones
En materia migratoria, Saiz se ha caracterizado por una defensa firme de la aportación positiva de la población extranjera y una posición antirracista frente a una oposición con un discurso cada vez más duro. Su ministerio afrontó en 2024 el récord de llegadas irregulares a Canarias, lo que tensionó el Programa de Atención Humanitaria y generó quejas de comunidades y ayuntamientos por falta de transparencia.
Flexibilizó el reglamento de extranjería
En 2025 impulsó una profunda reforma del reglamento de extranjería que flexibiliza el arraigo con el objetivo de regularizar a 900.000 personas en tres años, pero que también fue criticada por su impacto negativo en solicitantes de asilo, hasta el punto de ser recurrida ante la Justicia por varias entidades sociales.
Uno de sus mayores desafíos llegó con la orden del Tribunal Supremo de marzo, que obligó por primera vez a su ministerio a hacerse cargo de menores migrantes no acompañados solicitantes de asilo en Canarias, a lo que se suma un requerimiento similar para jóvenes ubicados en la Comunidad de Madrid. En este contexto mantiene un enfrentamiento con el Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón por el cierre del Centro de Recepción, Atención y Derivación (CREADE), una decisión municipal recurrida por el ministerio que dirige.
Con estos antecedentes, Elma Saiz pasará de ser una ministra poco conocida a convertirse en uno de los rostros más visibles del Gobierno, con la responsabilidad de explicar y defender la acción del Ejecutivo en una etapa clave de la legislatura.