El presidente estadounidense, Donald Trump, y el primer ministro británico, Keir Starmer, firmaron un pacto de miles de millones de dólares para inversión en tecnología, en un encuentro que renovó el aceitado vínculo entre ambos países, en el que buscaron bajar el nivel de las discrepancias en temas como la cuestión palestina y la inmigración ilegal.
Trump y Starmer coincidieron en su visión sobre Rusia y las críticas al presidente Vladimir Putin, pero expresaron públicamente su desacuerdo sobre el reconocimiento del Estado palestino, uno de los puntos disonantes en la visita al Reino Unido del estadounidense que concluyó este jueves, en la que se destacaron las manifestaciones contra el republicano en Londres.
Pero Trump se mantuvo alejado de las protestas el miércoles en el Castillo de Windsor junto a los reyes Carlos III y Camila, y este jueves en la residencia campestre de Chequers, en las afueras de Londres, donde fue recibido por Starmer.
Otro punto de inflexión fue el "combate" a la inmigración ilegal. Trump le aconsejó a su par británico usar el Ejército para controlar la inmigración porque ésta "destruye a los países desde dentro", pero Starmer optó por evitar la confrontación.
Subrayó que el Reino Unido tiene su propio plan para hacer frente a las llegadas irregulares desde Francia por el canal de la Mancha y que este mismo jueves se deportó a un indocumentado en virtud de un acuerdo con el país vecino.
Inversiones en Reino Unido por 173 mil millones de euros
Ambos mandatario exhibieron su buen entendimiento y se rodearon de magnates tecnológicos para anunciar inversiones en el Reino Unido por un récord de 173.000 millones de euros.
Se trata del "mayor paquete de medidas de inversión en la historia británica", que supondrá "250.000 millones de libras (287.500 millones de euros) fluyendo en ambas direcciones a través del Atlántico", en palabras de Starmer en una conferencia de prensa conjunta.
En virtud del acuerdo con empresas estadounidenses, al Reino Unido contará con una inversión récord por 173.000 millones de euros de compañías estadounidenses y también "miles de millones" en suelo estadounidense, añadió.
Londres y Washington expresaron en un memorando de entendimiento sobre prosperidad tecnológica su deseo común de mejorar la cooperación bilateral en materia de ciencia y tecnología a través del desarrollo de la IA, liderando una "era nuclear dorada", alcanzando la "verdadera ventaja cuántica" y asegurando el 6G, según ese documento.
Donald Trump: "Putin me ha decepcionado"
Ambos líderes exhibieron su buena sintonía durante la segunda visita de Estado del republicano a Reino Unido, en la que Londres y Washington han "renovado la relación especial para una nueva era".
Además, quedaron en evidencia sus coincidencias en torno la situación en Ucrania. Trump fue tajante al admitir que pensaba que esta guerra "sería más fácil" de solucionar por su relación con Putin, pero indicó que el líder del Kremlin le decepcionó.
"Me ha decepcionado; realmente me ha decepcionado", apuntó Trump, quien explicó que Putin "está matando a mucha gente" y dejando morir a mucha otra: "Francamente, los soldados rusos están muriendo en mayor medida que los ucranianos". "Me ha decepcionado; realmente me ha decepcionado", apuntó Trump, quien explicó que Putin "está matando a mucha gente" y dejando morir a mucha otra: "Francamente, los soldados rusos están muriendo en mayor medida que los ucranianos".
Por su parte, el laborista sostuvo que están trabajando juntos para "poner fin a la matanza en Ucrania": "Hemos debatido cómo podemos fortalecer nuestras defensas, seguir apoyando a Ucrania y aumentar decisivamente la presión sobre Putin para que acepte un acuerdo de paz duradero", indicó ante la prensa.
Incluso Trump tocó un tema muy delicado, al hablar de la destitución del embajador británico en Estados Unidos, Peter Mandelson, y sus vínculos con el pederasta Jeffrey Epstein.
"No le conozco. Quizá sería mejor que hablara el primer ministro. Fue su decisión", dijo el líder de la Casa Blanca al ser preguntado por el cese del diplomático británico.
Diferencias en torno a la situación palestina
La decisión anunciada en julio por el Gobierno británico de reconocer en la próxima Asamblea General de la ONU este mes el Estado Palestino si Israel no cumple una serie de condiciones como terminar con la "catastrófica situación en Gaza", decretar un alto el fuego y prometer que no anexionará Cisjordania, expuso un punto de disonancia entre ambos mandatarios.
"No estoy de acuerdo con el primer ministro al respecto. Es uno de nuestros pocos desacuerdos, de hecho", dijo Trump en una rueda de prensa en Chequers, junto al mandatario británico.
Starmer, en tanto, evitó dar más detalles, limitándose a apuntar que los dos equipos abordaron el tema de la situación en Gaza, que trabajan "juntos" para poner fin a la catástrofe humanitaria en Oriente Medio y que "la cuestión del reconocimiento necesita ser abordada".
"Y por lo tanto, es parte de ese paquete general que, con suerte, nos sacará de la terrible situación en la que nos encontramos ahora hacia un resultado que sea un Israel seguro y protegido —que actualmente no tenemos— y un Estado palestino viable", definió el laborista.
Trump, por su parte, subrayó que quiere que el conflicto termine. "Quiero que liberen a los rehenes. Creo que todo va a ir bien, pero ha sido un período brutal. Aunque esto está durando demasiado tiempo", se quejó.