Cuando Gabriel Boric ganó las elecciones de 2021 no sólo se convirtió en el presidente más joven de Chile, con 36 años, sino que el mandatario de izquierda representó el cambio político que demandaba el país desde el estallido social de 2019. En un contexto algo diferente y con una situación económica estable, los chilenos elegirán el 16 de noviembre a su sucesor. La campaña comenzó este lunes, después de que se inscribieran los ocho candidatos a reemplazarlo.
La próxima elección tendrá una importante novedad: por primera vez habrá voto obligatorio en Chile. Lo votación se realizará además en un escenario de fuerte polarización en el país. Los dos favoritos, según las encuestas, son el ultraderechista José Antonio Kast, que perdió en segunda vuelta contra Boric en los comicios pasados, y la comunista Jeannette Jara, ex ministra de Trabajo que ganó las primarias oficialistas en junio pasado.
El tercer lugar lo disputan la ex alcaldesa derechista Evelyn Matthei y el economista Franco Parisi, líder del Partido de la Gente (PDG), que es tachado por sus críticos de populista. Los otros candidatos son el diputado Johannes Kaiser, líder del Partido Nacional Libertario (PNL), el ex diputado Marco Enríquez-Ominami, el periodista y exdirigente de fútbol Harold Mayne-Nicholls y el profesor Eduardo Artés.
Un nuevo escenario para Chile
"Es un escenario de polarización nuevo" para Chile, dijo la analista Mireya Dávila, académica de la Universidad de Chile, a la agencia AFP.
Los chilenos hoy se muestran más sensibles frente al tema de la seguridad, a diferencia de 2021. Entonces el clamor popular era el de reformar a fondo un país tan rico como desigual, tras el estallido social de 2019.
Boric asumió con la promesa de cambiar la Constitución, pero fracasó en el intento que lideró la izquierda. Un segundo proceso, liderado por la ultraderecha, también falló posteriormente.
"Son clivajes totalmente contrarios a los de la elección anterior. En 2021 ganó el cambio social contra el orden. Ahora, la probabilidad es que gane el orden", señaló el analista y experto electoral Pepe Auth en declaraciones al diario La Tercera.
Quiénes son los favoritos
Kast, líder del Partido Republicano y primero en todos los sondeos, lanzó su campaña con fuertes dardos al gobierno y prometió un "cambio radical" para "recuperar y reconstruir" el país.
José Antonio Kast - EFE
Kast prometió un "cambio radical"
EFE
"Vivimos una emergencia en seguridad que encierra a las familias en sus casas, mantiene libres a los criminales en las calles y permite que extranjeros ilegales violen impunemente nuestras fronteras y nuestras leyes", señaló el político de 59 años, que se presenta por tercera vez como candidato a presidente. En 2017 había quedado cuarto y en la segunda vuelta dio su respaldo a Sebastián Piñera, que resultó ganador.
Ex diputado de 59 años, Kast es muy cercano al mandatario argentino, Javier Milei, y al líder del partido ultraderechista español Vox, Santiago Abascal, con los que coincide frecuentemente en las reuniones que la organización internacional Foro Madrid celebra en distintas partes del mundo. También es seguidor del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y reivindicó a la dictadura de Augusto Pinochet, en especial al modelo que se instauró en el segundo periodo de esa etapa.
"Chile no está condenado al fracaso, Chile está llamado a la grandeza", enfatizó Kast en un acto este lunes en la región de Antofagasta, en el que prometió bajar los impuestos y reducir el tamaño del Estado, según recogió la agencia EFE.
Jeanette Jara - 18-8-25 - EFE
Jeannete Jara durante la inscripción de su candidatura
EFE
Su principal rival es una abogada comunista de 51 años que debuta como candidata. Jara se consagró en la interna oficialista con el 60% de los votos. Surgió como opción presidencial luego de que en su gestión como ministra del Trabajo se logró reducir la semana laboral de 45 a 40 horas. También impulsó y lideró las negociaciones para la aprobación de una reforma de las pensiones.
"El sueño que queremos es un país que crezca más, que genere mejor empleo, que tenga mejores salarios y que tenga mejores condiciones de vida para todas las familias", manifestó Jara, quien también cuenta con el apoyo de la Democracia Cristiana, el histórico partido de centro que piloteó buena parte de la transición chilena y que no forma parte de la coalición oficialista.
Jara ha insistido en definirse como la "candidata de la centro izquierda y no del Partido Comunista", con cuyos líderes ha tenido diferencias públicas sobre las dictaduras de Cuba y Venezuela.
La disputa por el tercer lugar
Mientras, la derecha tradicional aglutinada en la formación Chile Vamos concurrirá a las presidenciales con Evelyn Matthei. Con 71 años, es la política de más trayectoria entre los candidatos. Encabezaba las encuestas hasta hace unos meses, pero perdió fuerza en favor de Kast.
"Quienes venían a refundarlo todo nos ha entregado años de inseguridad, estancamiento económico, promesas vacías y sueños truncos", declaró el pasado sábado.
Franco Parisi, por su parte, dio la sorpresa en la elección de 2021 al alcanzar el tercer lugar con una campaña sólo por redes sociales desde Estados Unidos, con un discurso contra las élites. En las últimas semanas fue creciendo en las encuestas y en algunas superó a Matthei.
"Nosotros vamos a gobernar con mano dura contra los criminales y dándole la mano a la clase media, que la ha pasado pésimo (...) Con Parisi presidente y el Parlamento con el PDG, los criminales tienen dos opciones: o bala, o cárcel", enfatizó.