Al principio de la pandemia, abundaron las notas sobre cómo dar charlas virtuales o mantener reuniones por zoom. Casi un año después, la perspectiva es de que aún falta para un retorno a la normalidad y que, además, la virtualidad ha ganado mucho terreno y no lo cederá todo una vez que se regrese a la presencialidad. Sigue siendo relevante entonces cómo desempeñarse en esas instancias, y sobre todo, cómo gestionarlo dentro del entorno hogareño, logrando una conexión con la audiencia.